La Vela Puerca: el desafío de brindar “felicidad a los oídos”
[vc_row][vc_column][vc_column_text]Juan Ignacio Novak
La Vela Puerca lanzó “Discopático”. Se trata del octavo material de estudio generado por la legendaria banda de rock uruguaya que tiene como figura más representativa al “Enano” Sebastián Teysera. De acuerdo a la propia definición de los propios músicos, el título remite a “aquel que ostenta la enfermedad de los discos, que afecta al disco intermusical formado por una sustancia vinílica llamada LP, se aloja entre cada surco y su función es proporcionar felicidad a los oídos”.
Acerca de esto y de la gira que realizan por Argentina para compartir las nuevas canciones (que los tendrá el 27 de agosto en Rosario) dialogó con este medio Santiago Butler, guitarrista de La Vela Puerca. “Grabamos ‘Discopático’ al final de la pandemia, con Ale Vázquez como productor. Esto marca una diferencia con los últimos dos discos, que habíamos hecho nosotros solos con el sonidista. En este caso, la producción estuvo a cargo de Ale y quedamos muy contentos con eso. Nos vino bien tener a un tercero opinando y creo que al disco le dio gran calidad, tal como nosotros esperábamos”, indicó.
Formato atípico
Para Santiago, el nuevo es un disco “para mover la patita”. Sobre todo por su origen, ya que surgió a partir de varias líneas de bajo, compuestas por el “Enano”, que se las pasó al “Mandril” (Nicolás Lieutier, bajista). “Lo atípico de este disco es que armamos primero las estructuras de canciones para que luego los dos cantantes, que son los que escriben, pongan sus letras. Es un disco que primero tiene la música, armada en un 95 por ciento, y después se escribieron las letras encima”.
Es un formato de trabajo que la banda no solía utilizar, aunque Butler dejó claro que, desde su óptica, no hay una metodología para este tipo de cosas. “Estamos hablando de arte. Una canción, a veces, puede salir en cinco minutos. Otras veces te puede llevar seis meses. No hay una forma definida para hacerlo. Pero La Vela trabajaba, en general, encima de una melodía con unos acordes y ahí se iba armando. Ahora se salió de líneas de bajo, de esas que hacen mover la patita. Se armaron las estructuras, cada integrante dio lo que suele dar y luego los cantantes escribieron arriba de todo eso”, detalló. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_raw_html]JTNDaWZyYW1lJTIwd2lkdGglM0QlMjI1NjAlMjIlMjBoZWlnaHQlM0QlMjIzMTUlMjIlMjBzcmMlM0QlMjJodHRwcyUzQSUyRiUyRnd3dy55b3V0dWJlLmNvbSUyRmVtYmVkJTJGdkFQRUJoUGp6cFElMjIlMjB0aXRsZSUzRCUyMllvdVR1YmUlMjB2aWRlbyUyMHBsYXllciUyMiUyMGZyYW1lYm9yZGVyJTNEJTIyMCUyMiUyMGFsbG93JTNEJTIyYWNjZWxlcm9tZXRlciUzQiUyMGF1dG9wbGF5JTNCJTIwY2xpcGJvYXJkLXdyaXRlJTNCJTIwZW5jcnlwdGVkLW1lZGlhJTNCJTIwZ3lyb3Njb3BlJTNCJTIwcGljdHVyZS1pbi1waWN0dXJlJTIyJTIwYWxsb3dmdWxsc2NyZWVuJTNFJTNDJTJGaWZyYW1lJTNFJUMyJUEwJUMyJUEw[/vc_raw_html][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]
Cuestionar sin perder la esperanza
Cada una de las canciones de “Discopático” representa un mundo en sí mismo, con sus particularidades. Sin embargo, tienen algunos rasgos que las engloban y unifican. “Reflejan el momento que se vivía cuando fueron creadas. Pueden ser reflexivas en algunos momentos, cuestionadoras en otros, pero creo que siempre tienen esperanza. No hay canciones que pronostiquen cosas que no tienen solución, simplemente son un pantallazo de la realidad y al final muestran que hay una luz al fondo del camino”. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_raw_html]JTNDaWZyYW1lJTIwd2lkdGglM0QlMjI1NjAlMjIlMjBoZWlnaHQlM0QlMjIzMTUlMjIlMjBzcmMlM0QlMjJodHRwcyUzQSUyRiUyRnd3dy55b3V0dWJlLmNvbSUyRmVtYmVkJTJGeFByN1FxQUFmZW8lMjIlMjB0aXRsZSUzRCUyMllvdVR1YmUlMjB2aWRlbyUyMHBsYXllciUyMiUyMGZyYW1lYm9yZGVyJTNEJTIyMCUyMiUyMGFsbG93JTNEJTIyYWNjZWxlcm9tZXRlciUzQiUyMGF1dG9wbGF5JTNCJTIwY2xpcGJvYXJkLXdyaXRlJTNCJTIwZW5jcnlwdGVkLW1lZGlhJTNCJTIwZ3lyb3Njb3BlJTNCJTIwcGljdHVyZS1pbi1waWN0dXJlJTIyJTIwYWxsb3dmdWxsc2NyZWVuJTNFJTNDJTJGaWZyYW1lJTNF[/vc_raw_html][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]
Butler refirió, al respecto, que las letras están teñidas por lo que se vivía en la pandemia con distanciamiento, encierro y un mundo paralizado. A cualquier persona, eso le afecta. Fue algo que hizo que mucha gente la pase mal. Sin embargo, las canciones tienen un final esperanzador y va en cada uno poder verlo de esa forma”. Podría agregarse que los contenidos guardan una relación con el resto de los contenidos de La Vela, que siempre se hicieron eco de lo social. “No digo que las letras de Sebastián sean una bajada de línea sobre cómo hay que hacer las cosas. Son puntos de vista, reflexiones que llevan a pensar y a realizar interpretaciones. De todas maneras, no es lo mismo que escribía hace 8, 10 o 15 años. Tenemos 27 años de trabajo y las letras son diferentes”, dijo.
Vínculo con Argentina
En relación al nexo de la banda con la Argentina y su público, Butler consideró que es muy profuso porque, más allá de la escala diferente de ambos países, no existen demasiadas diferencias. “Quizás allá se vive un circo más grande y los problemas son más grandes. Pero, en términos generales, somos personas viviendo en países con un montón de cosas en común. Vamos allá desde hace muchos años y nos sentimos parte de la cultura argentina, que es muy parecida a la nuestra. Vamos mucho para allá y esos viajes nos influyen muchísimo. En todos estos años nos cruzamos con un montón de músicos amigos. Grabamos discos en Córdoba y en Buenos Aires, lo real es que siempre volvemos”, cerró. [/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]