Wheelwright: se sobreponen a las deudas heredadas y encaran un importante plan de obras

Néstor Fenoglio / Pablo Rodriguez
Sur 24 llegó a Wheelwright, para entrevistar al presidente comunal Benjamín Gianetti y repasar la tarea que se viene desarrollando en esta gestión. “Es un pueblo tranquilo. Pero en el último tiempo se notó un crecimiento constante a raíz de impulsos privados y del Estado que genera iniciativas para que eso suceda”, dijo.
El joven jefe político, señaló que “es un pueblo que tiene una composición donde la actividad agrícola ganadera es el principal factor económico” pero la particularidad, es que “tenemos mano de obra calificada en el rubro textil”. Y es que en esa localidad, se radicó uno de los emprendimientos textiles más importante del país en la década del 70 hasta nuestros días conocido como “IndusWheel”.
“Supo tener hasta 1300 empleados e impulsó el crecimiento y desarrollo del pueblo. Por equívocas políticas económicas nacionales y provinciales quebró. A partir de entonces, se generó un sinfín de pequeños talleres que terminaron elaborando prendas para las grandes firmas en el mercado nacional”, aclaró.
Gianetti, dijo que trata junto a su equipo que Wheelwright sea un “lugar agradable a la vista” y armónico. “Apuntamos a tener los espacios públicos bien cuidados, para la inclusión y sociabilización”, reconoció. En este orden, aclaró que pese a tener 33 mil hectáreas en el distrito, por las dimensiones del pueblo, no es tanto.
“Eso hace que debamos ser prudentes y responsables en la administración de recursos públicos. A pesar de todo, contamos con energía eléctrica en la mayoría del distritito, agua potable, gas natural en un 80 % de la localidad y este año estamos extendiendo la red a los sectores que faltaba”.
Revertir el panorama económico
El representante del Frente Progresista, valoró que en Wheelwright hay “cordón cuneta casi en el 95 % del pueblo, asfalto y pavimento en el 80 % del pueblo” y que no hay una calle que no tenga estabilizado. “Nos queda pendiente la obra de cloacas, que en este preciso momento estamos elaborando el proyecto que nos va a demorar 60 días más para presentarlo a la provincia y empezar a hablar de este tema”, indicó.
“Asumimos en una situación compleja. Tuvimos que declarar la emergencia económica. Había 10 millones de pesos de deudas a proveedores, salarios impagos de trabajadores, la ART cortada, fondos provinciales y nacionales (con afectación específica) que no se habían ejecutado las obras y el dinero no estaba. “El patrimonio era de $ 350 para afrontar $ 10 millones de deudas”, remarcó.
Asimismo, recordó que al momento de entrar en funciones, los “empleados nos aguantaron y refinanciamos las deudas”. De hecho, en julio próximo terminan de pagar la última cuota del refinanciamiento de la deuda con proveedores: “Nos tomamos 36 meses para hacer frente a las obligaciones. Solamente a muy pocos les desconocimos por no acreditar la documentación que daba legitimidad. Se judicializó y la justicia falló a favor de la comuna”.
Luego, destacó que pudieron encarar obra pública y que podrían haber hecho más, pero las deudas “heredadas” fue un impedimento: “Perdimos en promedio una cuadra de pavimento por mes. Fuimos prudentes en el gasto y el control es estricto de cada centavo. Tenemos todos los balances aprobados por mayoría y minoría. No hay sospecha de nada. Toda la obra pública está debidamente certificada y rendida”.
De todas formas, valoró: “Abonamos la deuda y encaramos obras divididas en ítems. Recuperamos calles con cuadras de hormigón, asfalto y mejorado. Vamos de lo más grave a los menos. Por otra parte, recuperamos edificios públicos. Veníamos de muchos años de deterioros. Intervenimos la Comisaria, la terminal de ómnibus y salas sin concluir que había en el SAMCo. Hicimos una nueva oficina de la Secretaría de Obras Públicas en el corralón comunal, porque cuando asumimos era un basural prácticamente”.
Y siguió: “Fueron muchas inversiones. En estos 3 años de gestión vamos a llegar a diciembre del 2021 abonando cerca de 10 millones de pesos con el Fondo de Asistencia Educativa, cuando en 4 años la administración anterior había abonado solamente $ 100 mil. Intervenimos en viviendas, hicimos un loteo con sentido social, urbanizamos para que sea un barrio con todos los servicios; mejoramos las luminarias y tenemos el 100 % del pueblo con luces led. Junto con los vecinos se cobraron 18 cuotas de $ 85 para cubrir cerca de 900 luces. La gente confiaba porque la plata volvía en obras”.
Finalmente, reclamó: “La diferencia del trato con la provincia es llamativa. Me tocó estar los 2 primeros años con Miguel Lifschitz con quien estamos muy agradecidos. Ellos estuvieron poyando todos los proyectos que presentamos, como por ejemplo el instituto secundario que se incendió con una inversión superior a los 10 millones de pesos”. “Ahora -continuó-, hay una clara desigualdad en reparto de fondos públicos respecto de quienes son oficialistas y quienes oposición. Eso es llamativo, e innegable porque son datos de la realidad. Las obras que tenemos del gobierno provincial son porque por ley nos corresponden. Hay obras especiales que llegan a gobiernos justicialistas y no del Frente Progresista”.