La próxima cosecha, salvavidas momentáneo o el tiro de gracia
“Nos propusimos trabajar para poner en conocimiento de la población lo que significan cuatro años de sequía consecutivas, con impacto principalmente en la cosecha de la siembra gruesa (soja/maíz) y en la siembra fina de este año (legumbres/trigo). Pero no solo en lo que perdió el productor, por el contrario, lo que perdió la zona en general, los pueblos rurales, los trabajadores de cooperativas, los acopios, los transportistas, los comercios y las comunas de nuestra zona”, expreso el referente de Federación Agraria, Valentino Agostini.
Según los datos aportados, en estos cuatros años se perdieron cerca de 320.000 toneladas de soja, que al precio actual sería una cifra cercana a los 200.000.000 de dólares. Esto es delimitando una zona de alrededor de 80.000 hectáreas productivas contando desde Villa Constitución hasta J.B. Molina y desde el límite provincial con Buenos Aires hasta el Arroyo Pavón, incluyendo la localidad de Coronel Bogado (45 Km x 20 Km).
“Vemos como el Estado, a pesar de la Emergencia, vía retenciones en los pocos granos producidos, se llevó millones de dólares, que no solo no volvieron en ayuda a los chacareros, sino que no fueron afectados a nuestra zona en obras de desarrollo y/o paliativos a la población que vio resentida su economía en general”, continuó el joven dirigente.
El informe detalla números sobre el impacto que género en Transportistas, Comercios, Acopios y Cooperativas, Ventas de Insumos locales, y la economía en general de los pueblos en forma directa e indirectamente sobre las grandes urbes cercanas. Además, informa sobre la magra o casi nula ayuda recibida por parte de la Provincia y Nación, denuncia un futuro de desaparición de chacareros y pueblos y traza un comparativo sobre lo que se podía haber hecho con un Estado presente y con políticas de desarrollo rural
Resultado de cuatro años secos
-Impacto principalmente, la siembra gruesa (soja/maíz). Este año tuvo la particularidad, que golpeo de lleno sobre los cultivos de inviernos (legumbres/trigo) y arranca la siembra de la gruesa con un faltante de humedad de 300 mm a pesar de esta última lluvia que trajo solo un respiro.
-El estimado en estos cuatro años, es que se perdieron por sequía, solo en soja, 320.000 toneladas, que al precio actual sería una cifra cercana a los 200.000.000 de dólares
– El Estado se hubiera llevado en retenciones y diferencia cambiaria, 120.000.000 de dólares de ese total perdido
-Lo paradójico es que el Estado, si se llevó en estos cuatro años de sequía, cerca de 100.000.000 de dólares, al valor actual, de los pocos granos producidos, en retenciones y diferencia cambiaria, dejando a los chacareros arrendatarios, solo deudas y la esperanza de que algún cultivo de invierno pueda financiarlo hasta la próxima cosecha gruesa.
– Los transportistas perdieron de realizar en estos cuatros años, 10.600 viajes que al valor del flete actual representa cerca de 400.000.000 de pesos
– Las ventas de insumos cayeron un 35 % y esta zona está considerada por las empresas, de alto riesgo crediticio, por la gran cantidad de deudas que arrastran los productores.
– Los acopios de las cooperativas vieron reducidos su capacidad en 40 %, por consiguiente, los gastos de comercialización, erogaciones por estructura y administración, etc se vieron resentidos. Para colmo, son el primer eslabón del financiamiento para la próxima campaña del productor, siendo aún más difícil su situación a futuro.
-Los productores terminan gastando menos en la economía local e invierten menos en equipamiento, máquinas y/o rodados o construcción.
-La gran mayoría de las comunas de estos pueblos tienen como principal fuente de recursos propios, la Tasa x Hectárea, además de la coparticipación por el cobro del impuesto inmobiliario rural y patentes de automotores. Es utilizada por los mismos, para gastos corrientes o pago de personal y generalmente se descuida las obras para mantención de caminos e infraestructura rural. Al día de hoy, se ven resentidas las recaudaciones de dichos impuestos y tasas.
Pueblos countries, pueblos geriátricos y chacras
-Se acelera el éxodo rural de los pueblos (principalmente de jóvenes que se van a estudiar y no vuelven a sus pueblos al no tener un horizonte laboral), quedando los mayores que se niegan abandonar sus raíces.
-Se expulsan productores genuinos arrendatarios, ante el avance de empresas de otras zonas con más capacidad de pago de arrendamientos.
-El avance de empresas agrícolas, pooles y/o fidecomisos extrazona radicadas en las grandes urbes, determinan otro esquema de trabajo (operan en forma directa con el exportador, comercializan en forma directa con las empresas de insumos, tienen maquinarias de alta tecnología, cuentan con transporte propios y no viven ni consumen en los pueblos) ignorando a las cooperativas, acopios, transportistas y comercios locales.
-La pérdida de identidad de esos pueblos determina un cambio cultural, de pueblos rurales a ser parte del Gran Rosario. Habitantes de fines de semanas, con otras prioridades (seguridad, asfalto, agua potable, gas, conectividad, cuidado del medio ambiente) y sin ningún lazo emocional con el origen de estos pueblos.
