El secretario general de la ONU, António Guterres, exhortó hoy a los gobernantes de los países del Caribe a “incrementar el apoyo” a la Policía de Haití para hacer frente a pandillas que han desatado una ola de “violencia sin precedentes” en meses recientes. Luego de una breve visita a Haití, el jefe de la ONU llegó a Trinidad y Tobago para participar de la cumbre de la Comunidad del Caribe (Caricom), y dijo que en territorio haitiano, “la situación de seguridad se deteriora rápidamente y las necesidades humanitarias se disparan”.
Jefe de la ONU pide apoyo para Haití por una ola de “violencia sin precedentes”
“Debemos hacer más colectivamente para ayudar al pueblo haitiano a trazar un camino hacia las elecciones y una solución política”, agregó.
La ONU ha expresado su alarma por la violencia impuesta por pandillas que aterrorizan al país más pobre de América.
La jefa del organismo de la ONU para la infancia (Unicef), Catherine Russell, dijo la semana pasada que la situación en Haití “nunca ha estado tan mal”, citando casos de niñas violadas y niños reclutados por las bandas criminales.
Guterres reiteró su llamado a un “despliegue de una fuerza de seguridad internacional autorizada por el Consejo de Seguridad” y que sea “capaz de cooperar con la Policía Nacional de Haití para desmantelar las bandas que han creado esta violencia sin precedentes”.
También está prevista la participación, el miércoles, del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, quien se reunirá con el primer ministro haitiano, Ariel Henry, quien desde hace casi un año ha pedido una intervención internacional para ayudar a su país.
Ningún país, sin embargo, se ha declarado hasta ahora dispuesto a liderar una fuerza de intervención. Brasil y Canadá son los más implicados en la discusiones, mientras que Estados Unidos prefiere respaldar un reforzamiento de la Policía local.
“Es hora de que aquellos que tienen la capacidad para crear las condiciones básicas de esta fuerza de un paso al frente”, señaló Guterres, que destacó que países africanos y caribeños han manifestado su intención de participar.
“Necesitamos que los actores clave tengan un compromiso fuerte”, sostuvo y agregó que sólo un desarrollo inclusivo y sostenible podría romper el histórico círculo de crisis que envuelven al país caribeño.