Carmina Burana experimenta con nuevos sonidos y trabaja en su 6° disco
Los firmatenses de Carmina Burana, están cocinando un nuevo estofado que tiene muchas de las influencias que marcaron a los músicos en la década del ‘80 y que por estos días se puede escuchar en el primer corte de difusión “Vas más allá”. Pero la olla no cierra ahí: adentro también hay ska, hardcore, pasodoble, sintetizadores, vientos, metal y punky, la esencia que los distingue hace un cuarto de siglo.
El baterista, Juan Manuel “Billie” Gómez, dialogó con Sur 24 y contó que el nuevo tema que lanzaron “coquetea” con bandas como Depeche Mode y New Order. “Es una especie de post punk electrónico que nos remite a esa época que todos escuchamos. Hay discos que son emblemáticos y que son pura influencia para Carmina. En nuestras mentes están latentes”, dijo.
Admitió que “no es augurio de una tendencia musical nueva para el grupo” porque los genes no cambian: “Somos pasa doble, metal, ska, punky y reggae ‘cocteleado’ por 9 mentes enfermas”. De paso, remarca que volvió a la formación el saxofonista Juan Pablo “Titi” Barthet Mozzorecchia. “Estamos ‘craneando’ música nueva. ¡Eso es Carmina Burana papá!”.
El quinto disco de estudio ya es un hecho. Los músicos lo están trabajando en la sala de ensayo para ser el sucesor de “Existe” (2017). “Lo estamos tocando juntos. Necesitamos tener un tiempo para poder acostumbrarnos a la musicalidad de cada tema para grabar, mezclar, masterizar y editar. Este año vamos a estar enfocados en ese disco. Seguramente para finales de año puede que haya una sorpresa y esté publicado”, adelantó.
El cráneo que hierve
Gómez es claro cuando habla de los orígenes de Carmina y que “siempre fue una banda que experimentó nuevos sonidos y combinó géneros”. De hecho, destaca que nunca en la gestación musical dijeron de hacer un tema ska, de rock o chamamé. “Es algo que va surgiendo. No es la intención de la banda auto encasillarse. Nuestra forma de composición es primitiva”.
En esto, reconoció que “la música aflora” y el motor que mueve esas ganas habitualmente es “Kamono” (Leandro Ramón Ibarra Rodríguez, el cantor), que “aparece con alguna letra, prosa o melodía”. “Se junta con ‘Poila’ (Ariel Poeylaut) y son los artífices del gen de las canciones iniciales. Nosotros nos encargamos de bajar toda esa música en un ordenador a los instrumentos reales. Ese cóctel se da sin pensar demasiado en un género específico. La experimentación estuvo siempre y va a seguir estando”.
También entiende que la banda creció mucho en todos estos años y que eso se nota cuando tocan y en el espíritu de grupo: “Hay experiencia en conjunto. La relación se fortificó. Por eso coincidimos en que Carmina ocupa un lugar importante en la vida de cada uno de nosotros. Es un buen grupo humano de personas amigas para transitar la vida. Cada vez que nos vemos aflora música. Estamos en el lugar que debemos estar y mientras haya espíritu y ganas de hacer cosas, la banda se va a mantener viva. No me imagino un futuro cercano sin Carmina”.
Un auténtico obrero de la cultura
A sus 43 años, “Billie” reparte el tiempo entre Carmina; “All The Hats” (punk rock rosarino); dando clases en la Escuela Técnica de Sonido “Cetear”; mezcla, masterización y edición de discos; tiene su propio sello conocido como “BGA Discos”, donde incluso mezcla música de otros países; y además participa en el tributo a Social Distortion que lidera el ex “Carajo”, Marcelo “Corvata” Corvalán.
“De muy chico me di cuenta que quería ser músico. Vi un poster de AC DC y escuché un disco. Estaba convencido de que quería eso para mí. Pelee día a día. A los 10 me regalaron mi primer batería y desde entonces no dejé de tocar nunca. Siempre tuve bandas y sabía que de grande iba a estar tocando”, valoró.
Y continuó: “Tanto Carmina como ATH son las bandas que siempre quise tener porque de alguna forma me permiten expresarme musicalmente con total libertad. Estoy con la misma energía. Creo que hay Carmina para rato, para hacer quilombo, resistir y llevar el mensaje”.
Efecto COVID-19
El rubro de los trabajadores, fue otro de los tantos sectores que se vio (y aun se ve) golpeado por la pandemia. Carmina no resultó la excepción y fue el momento de encontrar nuevas oportunidades: “Nos encontrábamos más comunicados que nunca y con más ganas de hacer música. Aprovechamos el confinamiento para organizar otras cuestiones que siguen sumando a la actividad como banda. Empezamos a prestar atención a las redes sociales, ganando terreno. Y que el catálogo de discos nuestros esté completo y en forma en las plataformas de streaming”, aclaró.
En ese confinamiento, Gómez remasterizó “El sendero de los pajaritos primaverales” (2000); y “Hermoso, todo junto, difunto y podrido” (2003), para subirlos con los valores que exigen las plataformas. “Son canciones de principios del 2000. Había que hacer ajustes finos desde el punto de vista técnico”.
Reconoce que la música y la cultura la están pasando mal desde hace un año por las “embestidas de COVID-19” donde los “platos rotos” los paga la cultura en general. “Hay músicos que no supieron adaptarse y buscaron otros trabajos. Algunos directamente colgaron los guantes para mantener a sus familias. Eso es desesperante y triste. Salir a tocar es la mayor ganancia. Haciendo eventos, llevando música a la calle, ciudades y a la gente. Verdaderamente esto de no salir a expresarse hace que de repente te encuentres en tu casa sin saber qué hacer”.
Aclaró también que se mantuvo activo durante el confinamiento “estudiando y aprendiendo hacia donde vira todo”: “Insisto en que la estamos pasando mal desde los músicos a todo lo que viene detrás de un evento. Más allá de la parte negativa, hay mucha gente preocupándose por esto y nos empezamos a nuclear. En Rosario estamos los técnicos y operadores de sonido, comunicados para darnos una mano. Tocar fondo quiero creer que es para salir hacia arriba. Buscamos la reinvención del rubro, teniendo en cuenta muchas cosas. Ahora vamos a exigir reglas que antes no”.
Finalmente, reflexiona: “Va a pasar mucho tiempo para que los shows sean libres como los conocemos: ‘pogueando’ y saltando. Las nuevas tecnologías llegaron para quedarse. Son tiempos para inventarse y re configurarse. Hoy tenemos herramientas para desplegar la creatividad. Las posibilidades del streaming siempre están. Nosotros necesitamos del ida y vuelta de la gente, somos reacios al streaming pero por ejemplo estamos preparando un show grabado, que va a tener unos condimentos más en estos próximos meses cercanos. Vamos a globalizar la data”.