89 mujeres policías admitieron haber sufrido violencia dentro de la institución
(Por Nancy Balza) – Las trabajadoras de la Seguridad pública, principalmente las integrantes de la Red de mujeres policías, realizaron una segunda encuesta sobre las violencias que atraviesan sus integrantes. De las 128 personas que respondieron a la consulta sobre si habían atravesado algún tipo de violencia dentro de la institución, 89 dijeron que si, 30 que no y 9 no contestaron.
El principal tipo de violencia que reconocieron fue el moobing (acoso laboral) con 56 respuestas afirmativas. La violencia psicológica estuvo presente en 30 respuestas (también predomina fuera de la institución), sexual (18), física (1), simbólica (9), discriminación (10 y por maternidad (10) fueron las modalidades percibidas por las encuestadas.
El otro dato alarmante lo constituye el paso posterior a la agresión. Son muchas las encuestadas que reconocen no haber hecho la denuncia por vergüenza, miedo o falta de recursos. También hubo quienes denunciaron pero desconocen cómo sigue la causa.
“El único objetivo es seguir haciendo visibles con números reales las violencias por las que atravesamos, y una búsqueda constante de soluciones”, indican en el documento que acompaña las principales cifras del relevamiento.
Allí advierten que “a pesar de llevar más de tres años trabajando y de los logros obtenidos, aún falta información y nos cuesta mucho llegar a diversos puntos del territorio; las compañeras no sienten confianza en concurrir a los organismos destinados a la recepción de denuncias, y las que se animaron hasta el día de la fecha no han obtenido ninguna respuesta: sienten que sus denuncias “se cajonean” o sus causas se archivan por falta de pruebas o por diversas causas de las que no les dieron ningún argumento”.
Más grave aún: “Varias manifestaron que fueron cambiadas de destino, que no se resuelven los conflictos laborales e incluso más de una vez escuchan la sugerencia de que no realicen denuncias o soliciten las licencias que por ley les corresponde, según las distintas situaciones de cada una, porque ponen en riesgo su actual destino y pueden ser trasladadas”.
Con la convicción de que la problemática de género es una situación que afecta a todos los sectores sociales, la red evalúa que debe ser atendida como “grave”, y advierte que “deteriora las relaciones interpersonales y laborales como así también para el afuera”.
En este punto insisten: “cómo vamos a dar una óptima respuesta a lo que a género respecta si nosotras mismas somos vulneradas con el mismo tipo de violencia”.
Resultados
La encuesta fue contestada por 137 agentes policiales durante los meses de junio a agosto de 2022; 102 aportaron su nombre o datos personales. En cuanto a las edades, 19 tenían entre 20 y 30 años; 85 entre 31 y 40; 31 de 41 a 50, y una 52.
Como ya se dijo, la primera pregunta buscó establecer si las encuestadas habían atravesado algún tipo de violencia dentro de la institución. De las 128 respuestas obtenidas, 89 fueron por la afirmativa.
El tipo de violencia predominante es le moobing, también conocido como acoso laboral. Sin embargo hay una notable prevalencia de violencia psicológica, seguida por sexual que registra 18 respuestas positivas. Como siempre que se aborda este tema, hay más de una respuesta afirmativa, es decir, una misma persona puede sufrir más de una forma de agresión.
Fuera de la institución también se atraviesan situaciones de violencia: 37 del tipo psicológica, 6 física y una cifra similar sexual. Hay violencia doméstica (18) simbólica (3) y económica (2).
Hubo 126 respuestas a la siguiente consulta: ¿Denunciaste? ¿Dónde? ¿Hasta que instancia llegó la denuncia? 81 respondieron en forma negativa por vergüenza, miedo, edad, porque nadie le iba a creer o por falta de recursos; 10 dijeron que si pero no dieron más detalles; 29 especificaron que la denuncia se frenó, se desconoce qué pasó con el archivo, no tuvieron respuesta o suspendieron o trasladaron a la denunciante.
Con todo, 58 de 128 dijeron percibir algún cambio respecto a los derechos de las mujeres dentro de la institución. Otras 28 dijeron que cambió “muy poco” y 33 respondieron por la negativa mientras que 9 no contestaron.
Maternidad, cuidado y licencias médicas
A la pregunta ¿eres jefa de hogar o madre soltera?, 84 agentes (sobre 132) dijeron que si, 44 que no y 4 no respondieron. El 45,2 % tiene más de un hijo; el 28.6 % un hijo, y el 8,5 % más de tres. El 13,8 % tiene algún hijo con discapacidad.
Las taras de cuidado y el concepto de doble o triple jornada laboral también aplica para agentes de la policía: el 45,2 % manifestó tener familiares a cargo.
El 56 % de las consultadas vive en la localidad donde trabaja. El 67,3 % habita a menos de 50 km.; 8,9 % entre 50 y 100 km. Y un 23,8 % a más de 100 kilómetros.
Un 30.7% reconoció que fue madre y no se le permitió ascender (antes fue un 72.9%) y un 69.3% dijo que si (contra un 27.1% anterior). Y el 61,1 % dijo que tuvo permiso para amamantar.
Sobre 133 respuestas a la consulta sobre si habían solicitado licencia médica por patología psicológica, 64 dijeron que si, 66 que no y 3 no respondieron. Apenas 8 solicitaron el día femenino; 3 lo pidieron y no se lo dieron, 1 no contestó y 123 no lo solicitaron.
¿Qué ocurrió cuando solicitaron licencia por violencia de género? ¿Les otorgaron los días? Sobre 124 fueron afirmativas 5 respuestas; 113 negativas y 6 no respondieron. “Alguna compañera relató que cuando la pidió su jefe le dijo que si sacaba ese artículo la trasladaba, otra que no porque la culpa era para ella, otras que desconocían ese derecho”.
¿Tuvo resolución su caso?, ahonda la última pregunta: 63 respuestas fueron por el no y 16 por el si.