A casi un mes del cierre de listas, la política santafesina tiene todavía más entre bambalinas que sobre el escenario. Algunos pasos se fueron dando en estas últimas semanas, pero los más relevantes se esperan para los próximos días. El 12 de mayo expira el plazo para formalizar las pre candidaturas de cara a las elecciones primarias por lo que abril será clave en materia de definiciones. Pero antes de establecer las postulaciones, será necesario terminar de formalizar los diferentes espacios que operarán como estructura y plataforma para dichas aspiraciones.
Abril de definiciones, en un ensayo de campaña entre armas y escarpines
En ese sentido, se constituyó ya la mesa política del Frente Amplio por la Soberanía con partidos de izquierda y sectores minoritarios del Socialismo y el radicalismo. Pero la expectativa se centra en el otro gran espacio no peronista que contiene a diez partidos – la Coalición Cívica era el décimo primero pero por ahora, desistió de seguir participando- y que se identifica como “el frente de frente”. En las próximas horas, esta alianza que suma – entre otros- a la UCR, el PS, el PRO, el PDP y a CREO (el partido que lidera Pablo Javkin) abandonará esa identificación de cabotaje y alumbrará la denominación con la que se la identificará en las próximas elecciones. Con ese nuevo nombre y ya con un documento fundacional aprobado, la gran alianza se presentará en sociedad el próximo 25 de abril en Cayastá. Para muchos será el primero y prácticamente el único acto que protagonizarán en conjunto todas las fuerzas que lo integran. Desde entonces, se librará la batalla de cara a la interna que ya presenta al menos dos corrientes bien definidas: la que lidera Maximiliano Pullaro y un sector del PRO, y la que contiene a un sector del radicalismo donde tributan Carolina Losada y Dionisio Scarpín, más el Socialismo, Pablo Javkin, Betina Florito y otra rama del PRO representada por Federico Angelini.
Esa división de aguas no se corresponderá exactamente con las posibles pre candidaturas a gobernador, puesto que tanto el Socialismo – que competirá con Clara García- como Florito mantienen hasta aquí la intención de sumarse a esa disputa.
De todos modos, el principal atractivo en esta previa de campaña encuentra su origen, precisamente, en la rivalidad de las dos corrientes mencionadas: de un lado Pullaro; del otro, Losada y Scarpín. Los dos sectores terminaron enfrentados a partir del enfoque que ambos tuvieron – paradójicamente- sobre el mismo tema: la seguridad. El ex ministro anunció que tras las amenazas narcos recibidas, tramitará la portación de armas para transitar de ese modo, armado, su campaña. El senador nacional, en un juego cacofónico con su apellido, centró su publicidad gráfica en un escarpín que intenta bloquear el disparo de un arma. Una confrontación de modelos respecto de cómo se debería encarar la problemática de la violencia e inseguridad. Losada no lanzó formalmente su campaña, todavía, pero se alineó con su declaración al sí ya lanzado Dionisio Scarpín. “No podemos instalar la justicia por mano propia”, dijo la legisladora consultada sobre la decisión de Pullaro. La senadora nacional confirmará en las próximas semanas el anuncio que precipitadamente ya formuló Mario Barletta, cuando anticipó sin titubeos que Losada competirá por la gobernación. En paralelo, ya se ensayan sus posibles equipos de gobierno y los que la acompañan y canalizan su trabajo sobre la temática de la seguridad, hasta han comenzado a tomar contacto con las actuales autoridades del área.
En espera y con pocas definiciones se encuentra, mientras tanto, el peronismo. Esta semana, la mesa chica del partido comenzará a determinar el temario del congreso que deliberará el 22 de abril y que tendrá como principal cometido, aprobar su política de alianza. Hasta aquí, se mantienen los pre candidatos lanzados – Roberto Mirabella, Leandro Busatto, Marcos Cleri, Eduardo Toniolli- como también, la incógnita respecto de cuál será la estrategia electoral de Omar Perotti.