Aumenta la carne, ¿baja la demanda?

Las últimas ruedas de comercialización ganadera muestran subas significativas en los precios de los animales que ya empieza a verse reflejado en los mostradores, a tal punto que este martes circuló rápidamente la información sobre una posible suspensión de las exportaciones, medida que finalmente habría quedado desestimada.

De todos modos, para entender un poco mejor lo que sucede específicamente en este sector, el consignatario de hacienda, Esteban Boyle recordó que durante todo el año pasado, el precio del animal vivo estuvo parado y quedaron muy atrás en comparación con la inflación que superó el 100 o 120 por ciento.

“Vemos que hay un aumento, pero hay que entenderlo como una actualización del precio en un contexto inflacionario muy complicado. A ello tenemos que sumarle lo que sucedió a principio de agosto con el 'dólar maíz', esta desesperación del gobierno nacional de juntar dólares, haciendo que los insumos veterinarios o la alimentación suba”, resumió.

Boyle resaltó que el dólar tiene una injerencia directa en el precio de la hacienda, como sucedió con el precio del maíz a partir de la modificación de esta cotización, más aún “cuando sabemos que hoy en día el 80 o 90 por ciento de la carne que comemos proviene de feedlot”, explicó. Y añadió: “Recién hoy podemos decir que el valor del novillo en pie, que pasó de 600 a 1000 pesos el kilo, se actualizó de acuerdo a la inflación”.

Seguidamente remarcó que esta modificación en los valores se empezará a trasladar a los mostradores, donde los diferentes cortes de carne tendrán subas significativas. “A principios de mes un matambre que costaba 2.700 pesos el kilo se fue a 3.300 y hoy ese mismo corte lo van a encontrar a 3.600 o 3.700 pesos. La media res que le bajabas al carnicero la semana pasada a 1.200 o 1.300 pesos, esta semana les va a llegar a 1.800, 1.900 pesos”, aseveró.

Para el productor, otro de los factores a tener en cuenta será el comportamiento de los consumidores ya que la ley de oferta y demanda es una de las encargadas de regular el valor de este producto.

Cierre de exportaciones

Por otro lado y haciendo referencia a la noticia de una posible suspensión de las exportaciones, Boyle exclamó: “Es la peor decisión que se puede tomar, porque necesitamos dólares y lo que no debés hacer es cerrar las ventas al exterior; además del acuerdo que tenés con los frigoríficos exportadores que dejan los cortes populares, sobre todo el asado, para la venta en el país a precios accesibles”.