La ministra salió al cruce de las críticas
Bullrich en el Congreso: "No nos van a parar, es todo o no es nada"
La ministra de Seguridad, , salió al cruce de las filosas críticas opositoras que recibió durante su presentación en la Cámara de Diputados y aseguró que no los "van a parar" porque para el Gobierno "es todo o no es nada", y sostuvo que "la Argentina así no sigue".
Al exponer en un plenario de comisiones de Legislación General, Presupuesto y Asuntos Constitucionales, la funcionaria le contestó a sus detractores, y aseguró que la apuesta del oficialismo es generar un "capitalismo con reglas", dejando atrás el "capitalismo de amigos", y con un Estado que se desprenda de "las burocracias inútiles".
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"Si no les gusta, será una discusión teórica pero no nos van a parar. Es todo o no es nada, porque la Argentina así no sigue", arremetió con vehemencia y alzando la voz.
Según sostuvo, "tomar el toro por las astas es salir del capitalismo de amigos para un capitalismo con reglas".
"¿No le gusta el plan económico? Arme otro", contestó desafiante, ante una pregunta previa que le había formulado la diputada del Frente de Izquierda Myriam Bregman.
Sobre las manifestaciones sociales, aseguró que "el derecho a la protesta está intacto", garantizó que se puede "protestar todo lo que se quiera", y explicó que "lo que no se puede es cortar la calle".
"Claro se lo digo, clarito como el agua", enfatizó, y agregó que hay "46 millones de argentinos que no aguantan más vivir en un país tomado".
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"Queremos un país ordenado donde los derechos de uno no aplasten los derechos de otro", apuntó.
También embistió contra los gobernadores del PJ por haberse "enterrado" votando la eliminación del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría. "Ahora le piden al presidente que los desentierre", completó.
Ante el comentario, se generó una ola de murmullos y varios diputados opositores le recordaron que Javier Milei había votado como diputado nacional a favor de la quita de Ganancias, lo que generó un momento incómodo para la ministra.
"Bueno, él siempre vota la baja de impuestos", dijo Bullrich para salir del paso, sonrojada y nerviosa.
"Ni que fueran el mismo Gobierno", murmuró con sorna la diputada de Unión por la Patria Paula Penacca, desde el fondo de la sala, intercambiando una mirada cómplice con el titular de su bloque, Germán Martínez.
Sobre la legítima defensa y la responsabilidad de las fuerzas de seguridad de actuar contra la delincuencia, Bullrich precisó a qué se refería cuando mencionó la portación ilegal de "armas impropias"
"¿Quieren saber que son armas impropias? Un mortero en el medio de la plaza de los dos Congresos es un arma impropia", soltó, en medio de una ovación de los diputados de La Libertad Avanza y del PRO.
"Denlo por retirado"
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció ayer en la Cámara de Diputados que el Gobierno decidió retirar de la ley de "Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" la obligación de pedir permiso a las autoridades para la realización de reuniones de tres o más personas en espacios públicos.
"Les vengo a decir que es nuestro objetivo retirar ese artículo directamente porque está suficientemente explicado en otros artículos", explicó la funcionaria sobre el polémico artículo 331 que para la oposición representaba un grave peligro que lesionaba el legítimo y constitucional derecho a la protesta", dijo al comienzo de su alocución.
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"Al haberse generado una confusión pensamos que es mejorar retirarlo. Denlo por retirado", sostuvo Bullrich, que aclaró que se trataba de un asunto ya regulado por la Ley de Tránsito.
"Al haberse interpretado de otra manera, mejor retirarlo directamente", insistió al participar de un plenario de comisiones en la Cámara de Diputados donde se trata la ley ómnibus.
A través del artículo 331 del proyecto, el Gobierno definía a la reunión o manifestación como una "congregación intencional y temporal de tres o más personas en un espacio público".
Según estaba estipulado en la ley ómnibus, estas reuniones o manifestaciones debían ser notificadas al menos 48 horas antes de su realización ante Ministerio de Seguridad, que se guardaría la potestad de autorizar o rechazar la convocatoria.
En el pedido debían figurar las características de la manifestación, los datos de la persona u organización que la convoca especificando "nombres y datos personales", la finalidad, el recorrido de la marcha, el tiempo de duración y la cantidad estimada de participantes.
Sobre las manifestaciones sociales, Bullrich aseguró que "el derecho a la protesta está intacto", garantizó que se puede "protestar todo lo que se quiera", y explicó que "lo que no se puede es cortar la calle".
Contra el paro
La ministra aprovechó para desacreditar el paro general al que convocó la CGT para el 24 de enero próximo. "¿Un paro es avisar con un mes de anticipación para la segunda quincena de enero? Parece un chiste", lanzó. Y además le pidió al diputado nacional de Unión por la Patria y líder de La Bancaria, Sergio Palazzo, que la Confederación General del Trabajo (CGT) "levante el paro".