Catalina Echevarría: visibilización de la mujer que hizo la bandera
(Por Ana Inés Dobal) – Otra perspectiva permite conocer y resaltar el rol femenino en la creación de nuestro emblema nacional. Profundizar en esta realidad silenciosa, aporta protagonismo a heroínas de carne y hueso que históricamente han permanecido en el anonimato de nuestra gesta patriótica. María Catalina Echevarría confeccionó la primera bandera argentina y en el marco de la fecha patria reflexionamos sobre esta mirada.
“No se puede crear nada sin amor y tenemos ese don”. Si pensamos en la Bandera, es inevitable recordar a Belgrano. Sin embargo, existe otro nombre protagónico que mucho tuvo que ver con su creación: María Catalina Echevarría, que junto a otras dos mujeres, cuyos nombres no se conocen, confeccionaron con sus manos la primera bandera nacional.
Creadora rosarina
En el día en el que se celebra al emblema nacional de nuestra patria compartimos otro patrimonio con nombre y apellido. María Catalina nació en 1782 en Rosario. Era hija de inmigrantes vascos y hermana de un amigo de Belgrano. Fue durante una estancia del prócer en la casa de María Catalina que le encomendó la tarea.
La historia menos conocida cuenta que ella compró telas, unió los retazos celeste y blanco y agregó hilos dorados a la terminación. Una tarea artesanal que demandó al menos cinco días y para la que necesitó asistencia de dos vecinas.
María Catalina no solo habría confeccionado la primera bandera argentina, sino que habría sido también quien asistió a la ceremonia de jura, a orillas del Paraná y frente a las baterías de artillería Independencia y Libertad. Esto es llamativo porque las mujeres no participaban de esta clase de actos.
Madre de la patria
Soledad Rigonat, psicóloga gestáltica.
María Catalina Echevarría consiguió representar en tela nuestra bandera nacional. También ayudó a consagrar a Belgrano. No obstante, durante doscientos años en los homenajes nunca se la tuvo en cuenta. Una placa colocada en el pasaje Juramento, a metros del Monumento Nacional a la Bandera en Rosario, se convirtió en el primer recuerdo formal que se le realizó en su ciudad natal.
“En esa época las mujeres no formaban parte de la escena pública, pero hoy podemos repensar estas historias, ponernos las ‘lentes del género’ para observar los modos en que ellas también fueron partícipes de la construcción de nuestra Patria”, destaca el muro de Facebook de educ.ar compartiendo su historia el 20 de junio.
Es evidente cómo el patriarcado instaurado en todas las capas de la sociedad por años, ha invisibilizado, truncado y destruido nuestros dones como mujeres. Se habla naturalmente de los padres de la patria, pero no se habla de las madres de la patria, y si no hay madre y padre, no hay vida posible.
Sobre la integración de esta mirada ampliada de la vida, dialogamos con la psicóloga gestáltica Soledad Rigonat (matrícula 7937), quien manifiesta con claridad que hablar de vida sin considerar tanto a padres como a madres es imposible. “Cuando hablo de vida no solo me refiero a un ser humano, sino a un proyecto, un sueño, una creación o una idea, una comunidad, una sociedad y un país”.
Nueva perspectiva
“Es como la vida misma, para generarla necesitamos de un hombre y una mujer, necesitamos de una madre y un padre. Y la historia machista la ha escrito borrando o diluyendo en el olvido una función tan importante como es la que sólo podemos generar y producir por nuestros dones, las mujeres”, fundamentó Rigonat.
“Como Catalina, que es igual de importante que Belgrano, aunque se intente correr u ocultar, es importante porque es. Y éste, desde mi mirada, es el desafío del feminismo al que yo adscribo”, comparte la profesional, y agrega: “No se trata de invisibilizar al otro, hay una gran diferencia entre el ejercicio del poder del patriarcado y el ejercicio del poder del movimiento feminista, al menos al que yo adhiero (como mujer, como mamá, como hija, como hermana y como psicóloga)”.
“El patriarcado propone un ejercicio del poder que es el dominio del otro. El movimiento feminista desde el cual yo estoy percibiendo el mundo, define el ejercicio del poder como la potencia, y esa es la gran diferencia”, evidenciada en este ejemplo histórico no tan conocido, con Catalina mostrando el poder que tiene que ver con nuestra esencia femenina de gestar, parir, sostener, nutrir, y haciéndolo ella, nada menos que, con la bandera nacional argentina que hoy nos representa. No se puede crear nada sin amor y tenemos ese don”, cierra la mamá de Luna, convencida e invitando a cada lector a reflexionar sobre nuestra mirada.
Acto en Rufino
Como cada año, en el Día de la Bandera -feriado nacional- el intendente Natalio Lattanzi participó del acto oficial en la Escuela N° 669 “General Manuel Belgrano” de nuestra ciudad, donde los chicos de cuarto grado de todas las escuelas de Rufino realizaron su promesa a la Bandera. La Municipalidad local, luego del acto, agradeció a las autoridades y docentes de la institución y a los alumnos que participaron en el evento patrio.