Comercios piden al Gobierno Nacional que se suspenda el feriado puente del 24 de mayo para “darle un respiro al sector”
Desde la Asociación de Centros Comerciales del Sur de Santa Fe (Adeessa), realizaron un pedido al gobierno nacional para que se suspenda la decisión de declarar el próximo 24 de mayo como feriado puente y poder trabajar normalmente en este contexto de restricciones por la pandemia de coronavirus.
Básicamente, el pedido de Adeessa se basa en que los feriados puentes fueron concebidos para favorecer al turismo rubro que presenta muchas limitaciones por estos días para su desarrollo.
En diálogo con Sur24, el presidente del Centro Comercial e Industrial de Venado Tuerto, Luis Pagnoni dio detalles del pedido elevado al Gobierno Nacional por la entidad que los agrupa. “Recordemos que por los cierres a causa de la pandemia, desde el año pasado muchos comercios quedaron en el camino y otros que pudieron volver a abrir también sufrieron con los cierres y la baja de las ventas porque, al limitar los horarios que en un momento fue a partir de las 17, se vieron deterioradas sus economías, agravado por una crisis que viene de hace años y que se ha agravado por el contexto inflacionario que tenemos y por la pérdida del poder adquisitivo del consumidor”, manifestó el comerciante.
Además, Pagnoni sostuvo que este pedido es para “poder trabajar y darle un pequeño respiro al sector aunque sea un día. Esta es una preocupación no solo de la parte patronal, sino que también afecta a los empleados porque cuando se cerraron los otros comercios el año pasado no quedó solo el dueño sin trabajo, sino que también quedaron empleados en la calle”, añadiendo que “es una manera de defender las fuentes laborales. Los feriados puentes fueron creados por el turismo, actividad que en este momento de pandemia no se puede explotar como quisieran porque la gente, al estar limitada en los horarios y tantas condiciones que hay ahora, no viajan como se veía antes”.
Comercio local
Seguidamente, y consultado por la realidad del comercio local y la afectación que tuvo sobre las ventas de los negocios las restricciones horarias para la circulación, Pagnoni indicó que “después de las 19 el nivel de circulación merma y ya para las 20 en la calle no queda nadie. La realidad indica que la gente ha perdido poder adquisitivo y cuando eso pasa es lógico que la gente ande menos; cuando la gente tiene plata sale y gasta pero cuando se le reduce la cantidad de dinero no lo hace, porque no tiene sentido salir. Los más afectados seguramente son los bares y restaurantes”.