Refuerzo alimenticio
Consecuencia de la crisis: en Venado aumentó la demanda social
El presidente del Concejo Juan Ignacio Pellegrini comentó que pasaron de entregar 800 a 900 bolsones de alimentos semanales. También sostuvo que, en invierno, los pedidos son más frecuentes.
Días atrás, el Concejo de Venado Tuerto aprobó por unanimidad el Presupuesto municipal 2024 por más de 30 mil millones de pesos, donde se establecen las obras y proyectos a desarrollar durante el corriente año.
Una de las partidas que requirió una importante actualización y que fue uno de los puntos centrales del abordaje que hicieron en conjunto los ediles con el secretario de Desarrollo Económico del gobierno local, Luis Viskovic, fue Acción Social, a partir de un aumento en la demanda por parte de los vecinos y que seguirá incrementándose con el correr de los días, por una cuestión estacional, con la llegada de las temperaturas más bajas se acrecientan las necesidades, tanto alimenticia como de abrigo y garrafas para calefaccionar los hogares.
“La Municipalidad tiene muchos estados cíclicos, con intervenciones que se modifican de acuerdo a la época del año. En verano con los planes de empleo temporario para el mantenimiento de plazas, parques y paseo, o para el corte de pasto, y en invierno con la demanda social”, explicó el presidente del Concejo Juan Ignacio Pellegrini.
Puede interesarte
“Cuando iniciamos la gestión en diciembre de 2019 se entregaban 400 bolsones alimenticios por semana; cantidad que se elevó a 1.500 en 2020, durante la pandemia por Covid-19. La demanda luego se estabilizó en 800 semanales. A partir de este año, la cantidad ascendió a 900 bolsones, lo que implica una asistencia directa a familias que lo necesitan”, remarcó el concejal del oficialismo, considerando que “no es mucho para una ciudad como Venado Tuerto, incluso estamos muy debajo de la media de otras ciudades similares”.
Seguidamente, el legislador insistió que, posiblemente, ese número aumente en los próximos días, sabiendo que las solicitudes en invierno son mayores, ya que al refuerzo alimenticio se le suma pedidos para afrontar facturas de servicios, ayudas con garrafas, frazadas, abrigos, entre otras necesidades.