Cooperativas eléctricas, cansadas del trato desigual en la provincia
Las cooperativas distribuidoras de electricidad, que en General López son determinantes en la prestación del servicio eléctrico, en los últimos años intensificaron sus reclamos de trato igualitario a la Provincia, ya que con los impuestos de los santafesinos, incluidos los habitantes de este departamento, el Tesoro favorece a los usuarios de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) con subsidios al consumo (desde parque industriales hasta clubes, jubilados y grupos vulnerables) o con financiación de obras, en tanto que las cooperativas de servicios no reciben similares beneficios.
Por estos días, en que la EPE está solicitando un ajuste promedio del 33,8 por ciento en las tarifas luego de dos años sin aumentos, se desarrolló semanas atrás una audiencia pública virtual donde los distintos actores del sistema energético y asociaciones de usuarios y consumidores manifestaron sus posturas al respecto, y entre ellos se destacaron los pronunciamientos de la Federación Santafesina de Cooperativas Eléctricas, Obras y Servicios Públicos (Fescoe), en la cual se inscribe la Cooperativa de Electricidad de Venado Tuerto, y el Centro Regional para el Desarrollo del Sur de Santa Fe, quienes no sólo sentaron posición sobre el pedido de incremento tarifario, sino que aprovecharon la presencia de altos funcionarios provinciales para insistir en sus históricos pedidos de ecuanimidad.
Mirada más atenta
Consultado por Sur24 el presidente del Centro Regional para el Desarrollo del Sur de Santa Fe, Germán Casalino, insistió con el concepto vertido en la audiencia pública virtual del mes pasado, respecto de la adecuación tarifaria propuesta por la EPE, a la que consideró “razonable y digna de apoyo”, y destacó el hecho de que la empresa se encuentre trabajando en la modernización de los criterios que definen la tarifa, incorporando la diferenciación por calidad de servicio prestado. “Desde el sur provincial necesitamos una mirada un poco más atenta hacia nuestra región”, subrayó Casalino, aun cuando destacó el rol invalorable de la Sucursal Sur de la EPE. Papeles en mano, el dirigente observó que “del plan de inversión presentado por la EPE, sólo el tres por ciento de la totalidad de los recursos están destinados a nuestro departamento (General López). Esto, resulta justo aclararlo, es una cuestión histórica y no atribuible exclusivamente a esta gestión. Hace años que sufrimos este mal que conspira contra la posibilidad de tener un servicio eléctrico como el que nos merecemos”.
“Otra cuestión importante, que también mencioné en la audiencia pública, es que el 20 por ciento de dicho plan de obras de la EPE se hace con aportes del Tesoro provincial, cuyos beneficios sólo recibirán la empresa y sus usuarios, y no así el resto de las distribuidoras cooperativas que nos encontramos en el sur santafesino, y que brindamos servicios a la mitad de las localidades de la región. En este punto -continuó- solicité que tuvieran en cuenta esta situación. Incluso cité un par de datos que surgieron del propio informe de la EPE: uno es que de las 48 obras planificadas para 2021 ninguna está destinada al departamento General López, y el otro es que si bien hay 26 obras que se encuentran en ejecución, sólo una corresponde a nuestro territorio, que es la línea en el tramo Firmat-Carreras. Después de enumerar estos antecedentes, cerré mi intervención pidiendo que en el plan de obras se incluyan obras que beneficien la calidad del servicio en nuestro sur-sur provincial”, completó.
Trabajo conjunto
Mientras tanto, el presidente de la Fescoe, Federico Ferrero, expresó que la actualización solicitada por la empresa es “lógica” para equilibrar los números del VAD (Valor Agregado de Distribución) y admitió que el sistema eléctrico necesita “ser sustentable”.
En cuanto al informe de la EPE que respalda dicho pedido, en la audiencia el dirigente solicitó información más precisa respecto de qué obras, a lo largo del corriente año, puede significar algún beneficio para las cooperativas, así como otras precisiones técnicas sobre el VAD que la EPE aplica a las cooperativas a las que les vende energía. Además ofreció un “trabajo conjunto” para lograr una mayor equidad entre “clientes de la EPE y los asociados de nuestras entidades” a los efectos de que “podamos garantizar igualdad de condiciones en el servicio eléctrico entre todos los habitantes de la provincia”. También se planteó la necesidad de alcanzar “una tarifa plana” que concilie las diferencias de costos de distribución que tienen la EPE y las cooperativas, lo que implica crear “un fondo compensador” que equipare al sector cooperativo con los subsidios del sector público a la empresa estatal.
Sin embargo, pese a los reproches, Ferrero exaltó que la EPE firmó un “convenio único en el país” con las cooperativas eléctricas en el peor momento de la pandemia, cuando crecía la morosidad y un decreto nacional impedía el corte de los servicios. “Las cooperativas alertamos en ese entonces que no podríamos pagarle a la EPE el ciento por ciento de la factura de compra energía en tiempo y forma. Y luego de una serie de gestiones se culminó con la firma de un convenio entre las dos federaciones de cooperativas, la empresa y el Ministerio de Infraestructura santafesino, a los efectos de contar con facilidades”, reconoció el cooperativista.