Cultura disruptiva: Cross, una serie con mirada queer que celebra la diversidad
Desde hace unos días, la plataforma de contenidos Flow permite disfrutar de la serie Cross, producida por el canal UN3 de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF). La ficción tiene como protagonista a José Luis (Mirna), crossdressers y líder de “La Banda del Golden Cross”, un grupo de hombres que se reúne para explorar su lado femenino en clandestinidad. El dato para el sur provincial, es que el trabajo cuenta con la participación del actor oriundo de Elortondo, Lucas Bianchini, que también fue co-autor de la ficción junto a Martín Vatenberg.
Cross es una serie corta que explora el deseo y las emociones de hombres que gozan y se realizan a sí mismos sacando afuera su costado femenino. Pero además de eso, es una historia sobre la amistad, en un mundo donde las minorías buscan visibilidad.
Las crossdressers defienden la clandestinidad de su práctica. El precio que a veces se paga por el ocultamiento es demasiado alto. ¿Cuán libres podemos ser si escondemos aquello que nos define? Es una de las tantas reflexiones que surgen a lo largo de 8 capítulos.
En el caso concreto de Bianchini, su personaje es Alba, la más joven del grupo de protagonistas principales. Una cross de carácter, que no se inmuta con la mirada ajena. “Es una integrante de la banda cross que a diferencia de las otras, encontró en la práctica del crossdressing un medio para iniciar el camino de construcción de su identidad. De hecho, es una cross que está en proceso de transición, dispuesta a dejar a Gerardo (su lado A) para siempre”, contó en una entrevista a este medio.
Multifacético -además de actor es autor, director, diseñador y “anti-influencer”-, reconoció que se sorprendieron con la diversidad del universo cross donde hay “héteros, gays, bisexuales, crossbianas, cross que sienten atracción por otras cross”, y también una diversidad respecto a clases sociales y profesiones. “Se nuclean por el gusto de explorar el universo femenino de la práctica y eso no tiene que ver con la sexualidad. Las define su identidad dividida entre un lado A y B de sus vidas”.
La gestación
Allá por 2014, Lucas Bianchini junto a Martín Vatenberg, se encontraban realizando en el Paseo La Plaza (Capital Federal) “Morite de envidia”, una obra de teatro de su autoría donde ambos actuaban. “Representábamos a Dora y Mónica, dos actrices decadentes en busca de un poco de reconocimiento por parte del mundo del espectáculo. La cuestión era que hacíamos la obra totalmente ‘montados’ y antes de cada función volanteábamos en la puerta del teatro. La gente se nos acercaba mucho porque éramos muy llamativos y hacíamos un lío importante”, recordó.
En una oportunidad, un hombre trajeado se le acercó a Martín y le pidió su usuario de Facebook. “Accedió creyendo que el señor tenía otras intenciones. Pero para su sorpresa, cuando le mandó su solicitud de amistad y lo aceptó, descubrió que la persona de traje y corbata posaba en su foto de perfil completamente ‘montado’ y con un nombre femenino de fantasía. Era crossdresser”.
Intrigado, Martín lo conoció y el mundo cross se abrió ante sus ojos: “Ambos quedamos maravillados con el tema y fue inevitable llenarnos de preguntas. Martín ya era director de cine y se le ocurrió iniciar un proyecto audiovisual con unos compañeros de carrera. En paralelo, por cuestiones de la vida, yo empiezo a cursar la carrera de dirección de cine. Para cuando me recibo, Martín ya había avanzado lo suficiente con la idea de la serie y había conseguido los fondos para realizarla”.
Lo que siguió, es el proceso de escritura entre ambos. “Es ahí donde me meto de lleno en el mundo del crossdressing, una práctica a través de la cual hombres, en su mayoría, independientemente de su elección sexual, se permiten explorar su lado femenino, su lado B, a través de la transformación total e impulsados por la atracción que le genera descubrir ese costado en ellos”. Así es que al incorporarse Lucas, la serie ya había ganado el concurso de desarrollo de series web en el INCAA y la UN3 estaba adentro del proyecto. “En 3 meses la escribimos, en un mes se pre-produjo y en dos semanas ‘intensas’ se rodó”.
Durante los 3 meses que llevó la escritura, tuvieron varias entrevistas con crossdressers reales, que abrieron las puertas de ese mundo, brindándose desinteresadamente. Ahí comenzaron a notar que había diferentes motivaciones y perfiles.
Pero si bien las chicas cross tenían distintas motivaciones que las llevaba a esto, todas coincidían en algo: la clandestinidad y el anonimato. “Nos iluminamos cuando descubrimos un posteo donde una cross contaba muy angustiada que ‘había pasado lo peor’, porque ‘había sido descubierta por su familia’. Los comentarios que seguían al posteo eran de diferentes cross que alentaban con fuerzas a que siga adelante, que era algo que iba a pasar, que contaban con ellas para lo que necesite. Tenían un tono drástico, como de fatalidad”, describió. Ahí fue cuando coincidieron con Martín en que ese era el conflicto de la serie.
Maqueteando
Inspirados en el protagonista del posteo, con el que tuvieron varias reuniones, surgió el personaje principal. Un hombre casado, con dos hijos. Un profesional en su lado A, con el que cualquier espectador podría reconocer rápidamente, porque responde al modelo heteronormativo clásico.
“Nuestro protagonista es cross y vive su lado B de manera clandestina, a espaldas de sus afectos. A raíz de un hecho puntual donde corre peligro su secreto y, por miedo a que su familia lo descubra, decide dejar de ser cross para siempre”.
La idea principal es mucho más que la historia de un grupo de hombres que se reúne para explorar su lado femenino en clandestinidad. “Desde una mirada queer la serie invita a través del crossdresing a repensarnos y a desarmar arquetipos que tenemos arraigados desde hace años. Además, es una serie que habla sobre la amistad, la familia y sobre cómo se reconfiguran esos vínculos cuando pasa algo trascendental. Habla de libertad, diversidad y de cómo creemos a veces que nuestras propias elecciones o gustos pueden herir a otros y por eso las reprimimos”, agregó.
Para Bianchini, lo que pasa con el crossdressing, -o por lo menos lo que siente-, es que al practicarlo se abre una puerta y es inevitable que aparezca la exploración, el deseo y las emociones: “Lo que la serie cuenta es cómo esa exploración se vuelve común en un grupo de hombres que conforman una comunidad. Y como toda comunidad, es diversa. Ser cross es sinónimo de diversidad. Hay tantas maneras de ser cross como cross hay en el mundo y en la vida. Por eso los invito a ver la serie, para que descubran las diferentes maneras de ser crossdressers en el planeta. Y estoy seguro que nos quedamos cortos”.
Además
Cross cuenta además con las actuaciones de Rafael Federman quien protagonizó la película que representó a Argentina en los Premios Óscar 2021, “Los sonámbulos”, junto a Érica Rivas, Daniel Hendler, Luis Ziembrowski y Marilú Marini. El actor Guillermo Arengo, nominado a los premios Martín Fierro por su trabajo en el unitario “Tratame bien”, junto a Julio Chávez y Cecilia Roth. La actriz Valeria Lois quien protagonizó junto a Rita Cortese el film “Las Siamesas” de Paula Hernández, ganadora del Premio “Flow” al Cine Argentino y una gran cantidad de series como “Pequeña Victoria”, “Guapas”. Marcelo Subiotto que estuvo en películas como “Me casé con un boludo”, “La luz incidente” y “Animal”, y ganó el Premio Sur al Mejor Actor Revelación en 2017. El elenco de Cross lo completan Gaby Ferrero, José María Marcos y Marcos Montes.
La serie Cross se incorpora a las diferentes propuestas de entretenimiento disponibles en Flow, como TV en vivo y contenidos a demanda de series, películas, documentales, gaming y música, que ofrece la mejor y completa experiencia multipantalla. Además, se encuentra disponible para todos los clientes de Cablevisión, a través del Canal 1 de Cablevisión HD o a través de la App de Flow, que pueden descargar en forma gratuita en cualquier dispositivo, ingresando con el usuario de Cablevisión.