(Por Ivana Fux) – El peronismo tuvo un martes de catarsis, intentos de reacomodamientos y fotos de reuniones cumbre. El partido, como frente, quedó más de treinta puntos por debajo de la actual coalición opositora. La derrota disparó recriminaciones, reproches y pases de facturas. Con el correr de las horas, el oficialismo intentó recuperar el aliento y desplegó una serie de encuentros para tratar de definir una estrategia que permita mejorar los resultados de cara a las elecciones generales de setiembre.
Cumbres y fotos en el PJ provincial para intentar recuperar el aliento
Durante la mañana, conversaron en la sede partidaria los -hasta el domingo- cuatro precandidatos para la gobernación con sus respectivas compañeras de fórmula. Marcelo Lewandowski, Marcos Cleri, Eduardo Toniolli y Leandro Busatto hablaron durante más de dos horas. Lewandowski se reunió, después, con Omar Perotti en Casa de Gobierno. Fue el primer encuentro cara a cara tras el revés electoral del domingo. Ambos caminaron, luego, una cuadra a la par hasta llegar al recinto sindical en el que aguardaban los 27 integrantes de la lista de candidatos a diputados que lidera el propio Perotti. Fue la primera aparición conjunta que protagonizaron ambos de manera pública.
Entre canapés y alfajores
El cónclave empezó con una hora de retraso y se extendió por casi tres. Terminó consumiendo una siesta soleada, que volvió más que necesario un elogiado catering -“más comida que ideas”, resumió de manera descarnada uno de los presentes-. Todos, esencialmente los referentes de sectores disidentes valoraron la convocatoria del gobernador. Pero no por ello ahorraron críticas. Hubo reclamos y planteos.
Otro rumbo
Varios de los presentes plantearon la necesidad de apelar a las herramientas que posee el peronismo en su condición de oficialismo, para desplegar acciones concretas a inmediatas. Pero la petición -para ampliar Billetera Santa Fe, por ejemplo- confrontó con el diagnóstico del ministro de Economía y también candidato a diputado, Walter Agosto, quien antepuso una situación económica de la provincia a la que describió como “deficitaria”.
La actual vicegobernadora, Alejandra Rodenas, pidió apoyo para los senadores que en varios departamentos ven amenazada la retención de sus bancas, pero paradójicamente, se les requirió a esos mismos legisladores una correspondencia en el trabajo territorial. Los números del domingo demuestran una proporción de votos significativamente menor para la categoría gobernador respecto de la de senadores, aun siendo del mismo partido.
Predominó la percepción de que el peronismo tuvo una campaña improvisada, con una fórmula -la de Lewandowski/Frana- que quedó prácticamente con un trabajo en soledad; y se reclamó frente a ello un mayor grado de profesionalización para el nuevo proceso electoral que se avecina.
Del encuentro, también participó el presidente del partido. Ricardo Olivera había sido uno de los primeros en enumerar, a horas de la derrota, la sucesión de errores cometidos. Definición tardía del candidato (en el caso de Lewandowski, cuando Pullaro venía recorriendo la provincia desde hacía un año), ausencia de trabajo territorial (no hubo un correlato en la categoría gobernador de los resultados que sí lograron los senadores), e insistencia sobre un mensaje anclado en derechos adquiridos (Boleto Estudiantil Gratuito, Billetera Santa Fe…. “Cada uno hizo la suya y otros no hicieron nada”, dijo el lunes Olivera como cierre de su análisis.
El encuentro de este martes terminó con el compromiso de sumar esfuerzos para remontar los resultados, aunque no quedó claro siquiera quién será el jefe de una campaña que tendrá al gobernador fuera del país por una gira comercial que lo encontrará en India durante los próximos diez días.