En Argentina, un equipo de emprendedores ha creado una aplicación revolucionaria llamada “Dillo”, con el propósito de eliminar las barreras de comunicación para las personas con discapacidad auditiva. La aplicación, que transforma texto y audio en lenguaje de señas y viceversa, ha sido recibida con entusiasmo por la comunidad sorda, que anhelaba una solución innovadora para interactuar con su entorno sin dificultades.
Desarrollan “Dillo”, una aplicación que permite la comunicación con personas sordas
La Confederación Argentina de Sordos (CAS) estima que alrededor del 18% de las discapacidades en el país están relacionadas con la dificultad auditiva. Según los datos disponibles hasta el último censo nacional en 2010, se reportaron 945,168 hogares con al menos una persona con limitación auditiva permanente. Aunque no existen cifras actualizadas, se estima que entre 700 y 2,100 niños argentinos padecen hipoacusia.
Ante esta problemática y con el objetivo de fomentar la inclusión, Manuel Flores y sus socios Gabriel Butto y Felipe Moreno se embarcaron en el desarrollo de Dillo en el año 2022. Con una inversión propia cercana a los U$S 100,000, lanzaron una versión beta de la aplicación que traduce el lenguaje de señas en tiempo real.
En la actualidad, Dillo funciona de forma gratuita en una plataforma web accesible a través de solicitud de acceso mediante correo electrónico. La aplicación utiliza la cámara de un dispositivo (como computadora, celular o tablet) para captar los movimientos y gestos de las personas sordas y traducirlos a texto. De manera inversa, la persona que no tiene dificultades auditivas puede ingresar texto o audio, y un avatar se encarga de traducir el mensaje al lenguaje de señas, permitiendo así una comunicación fluida.
Con la mirada puesta en ampliar el alcance de Dillo, los emprendedores planean implementar la aplicación en escuelas, universidades, hospitales y locales comerciales. En hospitales, por ejemplo, podrían colocarse dispositivos con cámaras que permitan a las personas sordas expresarse y recibir instrucciones en lenguaje de señas. Lo mismo podría hacerse en comercios, bancos y entidades gubernamentales, al incorporar códigos QR para acceder a la aplicación.
Butto, uno de los cocreadores de la aplicación, destaca que Dillo no solo beneficia a las personas sordas, sino también a aquellos que no tienen la necesidad de utilizarla, ya que puede generar mayor empatía y facilitar la interacción con quienes sí la necesitan. Además, el equipo está desarrollando un juego para la aplicación con el objetivo de unir a las personas que requieren de Dillo con las que no, fomentando así la inclusión y la formación de una comunidad cohesionada.
En los próximos meses, los emprendedores tienen previsto lanzar Dillo en las tiendas de aplicaciones Play Store (Android) y App Store (iOS) para su descarga. Inicialmente, la aplicación será gratuita, pero con algunas funcionalidades adicionales de pago. Para que la app funcione a nivel nacional e internacional en dispositivos móviles, buscarán atraer inversores con una meta de capital de U$S 100,000.
Además, invitan a personas e instituciones interesadas a utilizar la herramienta a través de su página web https://dillo.ar/.