Inflación, inversiones por el piso y crisis
El mercado de seguros de Argentina: desafíos y perspectivas ante una compleja realidad
Las compañías aseguradoras transitan por un presente con múltiples complejidades. Los asegurados optan por opciones más económicas y se hace notoria la baja de coberturas contra todo riesgo a opciones como terceros completo. Además, la falta de repuestos, el constante aumento en el costo de los vehículos y las inversiones que impone la Superintendencia de Seguros de la Nación desembocan en pérdidas técnicas y financieras que requieren de grandes esfuerzos de las empresas para dar respuestas a los clientes.
En medio de un contexto económico desafiante en Argentina, las compañías de seguros enfrentan una serie de dificultades que impactan tanto en su funcionamiento interno como en la prestación de servicios a los asegurados. Para arrojar luz sobre esta situación, desde Sur24 mantuvimos una entrevista exclusiva con Luis Jorge Ferro, gerente general de Cooperación Seguros, una de las aseguradoras más importantes del país.
En la conversación, Ferro destacó varios puntos clave que reflejan la realidad actual del mercado asegurador argentino. En primer lugar, señaló que la situación económica ha llevado a una tendencia preocupante de recortar gastos por parte de los asegurados, siendo el seguro de vehículos uno de los primeros rubros afectados. Esto se refleja en una disminución de la cobertura, con un traslado de los seguros más costosos, como el “todo riesgo”, a opciones más económicas, como el “tercero completo”.
“Cuando pasan estas situaciones económicas como la que se está viviendo hoy, en general la gente el primer recorte que puede hacer es en el seguro, porque los otros son servicios esenciales que sí o sí los tienen que abonar, como obra social, luz, gas, etc. Nosotros notamos que Argentina, cada 10 años, viene teniendo estos problemas. Siempre hay una pequeña caída en los vehículos, sea por cambio en la cobertura o porque la gente prefiere cambiar la unidad a otras más pequeñas, pero lo que estamos viviendo en estos tiempos es algo que no lo vivimos antes y esto se traduce en una enorme complejidad”, destacó Ferro.
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A modo de ejemplo, las estadísticas marcan que, en su compañía, se ha disminuido la cobertura contra todo riesgo “en un 5%, que, en la cartera de Cooperación Seguros, que tiene 300 mil vehículos asegurados, representa más o menos unas 1.500 unidades”, aunque subrayan que aquellos que antes podían pagar el todo riesgo, ahora disminuyen la cobertura a lo que se llama tercero completo. “Nosotros tenemos la suerte que nuestra zona de comercialización está en la Pampa Húmeda, donde tracciona el campo y el transporte de cereales y creo que a eso hace a que la pérdida no sea tan significativa”.
Inflación y faltantes
Además, Ferro mencionó el impacto directo de la inflación en el sector, especialmente en lo que respecta al aumento de los costos de los repuestos de vehículos, un fenómeno que dificulta el cálculo preciso de las primas de seguros y la reposición de vehículos dañados, lo que representa un desafío adicional para las aseguradoras y los asegurados.
En ese sentido, Ferro aseguró que, escuchando a economistas en la cámara empresaria de la que son parte, en el mes de abril “debería producirse una baja importante de la inflación, pero todo va a estar marcado en base a lo que vaya pasando en la economía del día a día. Nosotros tenemos un componente que sí nos preocupa, y es el tema de los repuestos de los vehículos, amén de haber aumentado por arriba de la inflación”, reflejando que hay algunos de ellos que han subido “un 300 o 400 por ciento, y en muchos casos no se consiguen en el mercado”.
“En nuestro taller tenemos unos 60 vehículos parados por falta de repuestos, y muchos de ellos son vehículos que se vendieron muchísimo en la Argentina. Sin embargo, no se pueden conseguir repuestos”, enfatizó.
A esta complejidad se le suma la falta de precios orientativos de las piezas de los vehículos y la duplicación de los costos judiciales, lo que dificulta poder calcular técnicamente “lo que tenemos que cobrar en el seguro, eso se está haciendo medio imposible”.
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“Nosotros estamos facturando las póliza cuatrimestralmente, pero lamentablemente tendríamos que bajar esos tiempos de facturación y llevarlo a mensual, entonces yo cobro la prima que correspondiera por mes y además aumento la suma asegurada, para que el cliente no quede desprotegido, porque a una inflación del 25 o 30 por ciento, en un vehículo que vale uno o dos millones de pesos, si no vivimos aumentándole la suma asegurada y se lo roban, puede llegar a cobrar el 50 por ciento del valor real”, informó el gerente general de Cooperación Seguros.
Además, remarcó que, ante este escenario, tuvieron que armar un equipo que cada 60 días revisan “el 100 por ciento de la cartera, y además le pedimos a nuestros socios estratégicos, que son los productores de seguros, que no se confían tanto en los valores de la aseguradora, porque nosotros no conocemos al asegurado, por lo tanto existen algunos problemas con los combinados familiares, porque a lo mejor yo tengo un televisor asegurado en 150.000 pesos y reponerlo cuesta entre 500 y 600 mil pesos”.
Motos
En cuanto a las motocicletas, Ferro destacó la alta siniestralidad en este tipo de vehículos, especialmente durante el verano por su mayor uso, reflejando que “se venden más seguros cuando hay controles estrictos por parte de la Municipalidad, cosa que se esta dando en muchas ciudades, pero los problemas surgen cuando se relajan los controles, lo que lleva a una alta tasa de anulaciones de pólizas”, añadiendo que, igualmente, “se está tomando una mayor conciencia aseguradora de las motos”.
“Lo que se está haciendo es tratar de vender no solamente en una cobertura de responsabilidad civil, sino también de robo de la moto. Cada vez que hay un siniestro, nuestra filosofía es ir rápidamente a la atención del accidentado, pero en 50.000 motos aseguradas, los juicios que nosotros tenemos son muy pocos".
En cuanto a las subas en las cuotas de los seguros, el dirigente analizó que “aumenta mucho porque las sumas aseguradas de los vehículos aumentan. Siempre las tasas de primas se fijan en función del valor asegurado. En este último tiempo, si uno toma los recientes 8 o 9 meses, estamos más o menos entre 150 y el 160 por ciento de incremento".
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Esfuerzos para mantener reservas
En términos financieros, Ferro reconoció las dificultades que enfrentan las aseguradoras para mantener reservas suficientes para cubrir siniestros, especialmente en un contexto de competencia que lleva a la reducción de precios de las primas. Esto se suma a la complejidad operativa de monitorear y ajustar las tarifas de esas primas en un entorno de alta inflación y aumento de los costos de repuestos y sumas aseguradas.
“Tenemos un descalce, porque hoy lo que nosotros podemos medianamente dimensionar son los precios de los vehículos, que cada 60 días lo revisamos, pero hay otros tipos de transporte, como taxis y remises, que ante la alta siniestralidad que tienen se hace imposible saber lo que realmente deberíamos cobrar”.
A este combo, se le suma el problema de las inversiones. En este aspecto, la Superintendencia de la Nación es la que da el marco regulatorio e impone a las compañías las normas, diciéndoles en que deben invertir su dinero. “No podemos invertir en cualquier cosa. En nuestro caso, como todo el mercado asegurador, estamos obligados a comprar títulos del Estado, que hoy están en el piso, entonces uno espera tener rentabilidad financiera para poder acomodar la parte de la pérdida técnica que uno tiene porque las primas hoy no alcanzan para poder afrontar la gran siniestralidad que se tiene, entonces se da este fenómeno que tenemos un resultado técnico del negocio negativo y un resultado financiero también negativo y estamos trabajando en cómo bajar los costos”.
En última instancia, Ferro expresó la esperanza de que, a medida que la economía argentina encuentre su rumbo, las condiciones para las aseguradoras mejoren. Mientras tanto, la prioridad principal sigue siendo cuidar de los asegurados y adaptarse a las condiciones económicas y operativas cambiantes.