Por decreto la Empresa Provincial de la Energía (EPE) es la que le da forma a una iniciativa que apunta a incentivar la generación de energías limpias por iniciativa privada. Con la firma de Omar Perotti, en el año 2020 se le dio forma al Programa Energía Renovable para el Ambiente (ERA).
El plan para crear consorcios privados y generar energía renovable empieza a dar frutos en Santa Fe
El esquema está cerca de dar a luz el primer contrato que estará firmado por empresas privadas no vinculadas al rubro de la generación eléctrica. El convenio integra además a un parque industrial de gestión privada.
El acuerdo en cuestión tiene como premisa que las compañías participantes compensarán sus consumos eléctricos a partir de una producción de 50 kW. La iniciativa cuenta con un antecedente. En la localidad de María Teresa existe un consorcio que aporta 30 kW al sistema interconectado y está integrado por entidades que no tienen base privada.
La novedad ahora es la del un pool de empresas que se organizaron para costear la inversión y alivianar sus gastos eléctricos. “Del contrato puede participar cualquier organización que invierta en los equipos y a los fines de la normativa, no interesa dónde está el panel solar, basta con que se instale dentro del área de la red de distribución de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), en este caso”.
El encomillado pertenece al ingeniero Fernando Lombardo, uno de los accionistas de Energiu, la compañía que aportará el equipamiento tecnológico para el sistema de generación y que ya colocó la infraestructura en María Teresa.
Lo interesante de la iniciativa que promueve el gobierno provincial es que abre la posibilidad, por iniciativa privada, de que sea más de una empresa las que generen electricidad en el inmueble de tal o cual empresa. En el caso de la energía fotovoltaica, el panel puede estar en cualquier sitio.
Los paneles se montarán en una de las empresas que integran el Parque Industrial San Lorenzo, loteo de gestión privada donde además están instaladas otras dos industrias que se suman al contrato.
“Lo interesante es que la inversión de capital tiene escala. No es lo mismo invertir para generar 3 kW para el consumo de una sola empresa que participar en desembolso colectivo ya que se licúan muchos costos fijos, en primer lugar”, graficó Lombardo.
El programa además es superador para las empresas que integran el pool por su eficiencia debido a que la inversión conjunta posibilita costear equipos de alta potencia que para una firma en forma autónoma sería más complejo de afrontar. “Por último tenés otra ganancia que tiene que ver con la gestión del mantenimiento de esa instalación. De esta forma hablamos de una cuota de eficiencia del orden del 30% respecto de la proliferación de sistemas más chicos que generen lo mismo de manera aislada uno de otro, respecto del sistema colectivo”, puntualizó.
Respecto de los plazos de obra, una vez suscrito el convenio se conocerán los nombres de las empresas participantes y calculan que máximo en cuatro meses estarán los equipo en funcionamiento.