Elortondo: dictan curso gratuito de Lengua de Señas Argentinas
La Comuna de Elortondo, dio inicio a un nuevo curso gratuito abierto al pueblo. Esta vez, la gestión de María Isabel Bosco, impulsa la formación en Lengua de Señas Argentinas. Es dictado por la capacitadora, profesora de Sordos e Hipoacúsicos, María de Luján Bercovich; el co formador, Fabián González; sumado a la profesora de Educación Especial, Yanina Gutiérrez, impulsora de la iniciativa y formada en discapacidad auditiva.
Gutiérrez, contó que la propuesta surgió de su trabajo en la Escuela de Sordos e Hipoacúsicos de Venado tuerto, donde conoció a la profesora María de Lujan Bercovich, (Marilú), que desde hace 11 años dicta el taller de Lengua de Señas Argentinas, en diferentes bibliotecas de esa ciudad. “Acerqué la idea a la comuna, la cual la recibe de manera muy positiva y abierta, desde un principio mostraron disponibilidad, y eso ayuda muchísimo. Nos dispusieron del lugar para el taller, y de todo el material necesario para poder realizarlo”, aseveró.
“Me atrajo la idea de que Marilú viniese a Elortondo a dar ese taller, por varias razones. La primera es que resulta necesario que la comunidad tenga la posibilidad de aprender a comunicarse, en este caso, con personas con discapacidad auditiva, a través del taller. En ese acto ya estaríamos aprendiendo para poder hablar de inclusión”, dijo en primer lugar.
“En el taller no solo aprendemos las señas, sino que implica aprender a mirar a ese ‘otro’ reduciendo una barrera que es la de no poder comunicarnos con alguien sordo”, valoró. Además, remarcó que están en proceso de poder “tomar lo distinto” y reconocer lo que hay en común.
“En ese acto nos enriquecemos todos. Aprendemos a comunicarnos con el cuerpo, a mirar, observar y saber qué hacer en determinadas situaciones en donde alguien no siempre tiene voz”, dijo.
En esta línea, ponderó que el grupo que participa del taller, es “predispuesto y diverso”, destacando que participan personal de la salud como psicólogos, kinesiólogos y terapista ocupacional; personal de bomberos; policías; docentes; estudiantes de primaria y secundaria, entre otros.
“Apenas abrimos la inscripción para el taller, en 24 horas superamos las 60 personas, luego por cuestiones personales de cada uno, se fueron dando de baja, y se fue agregando a la gente que había quedado en lista de espera. Hoy ya no hay más cupos para sumarse”, aclaró.