El fin de una era
En el auge del streaming, agoniza la ficción nacional en la TV abierta
La migración de ficciones a las plataformas transformó el panorama televisivo argentino. Con la televisión abierta relegada a la repetición de contenidos, ¿qué futuro le espera a la ficción nacional?
(Por Juan Ignacio Novak) - A principios de los ‘90 la ficción nacional en televisión abierta atravesaba un momento de auge. Carlín Calvo y Pablo Rago hacían de las suyas en “Amigos son los amigos” y el público respondía con fervor a sus andanzas. Y “Grande Pa”, la legendaria novela protagonizada por Arturo Puig y sus “chancles” lograba algo que hoy parece inconcebible, dadas las nuevas formas de consumo: más de 60 puntos de rating en el prime time de Telefé. Todo lo contrario a lo que ocurre 34 años más tarde, cuando la ficción prácticamente se extinguió en los canales televisivos, que apuestan a otros formatos.
"Grande pa". Foto: Telefé
La televisión argentina atraviesa una transformación sin precedentes. La finalización de la serie “Buenos chicos” el 30 de noviembre de 2023 marcó el cierre de un ciclo para la productora Polka, pero también simboliza un cambio radical en la producción de ficción a nivel nacional. Esto puso en evidencia la creciente migración de contenido audiovisual de la televisión abierta hacia las plataformas de streaming, un fenómeno en constante dinamismo que reconfigura el panorama de los medios en Argentina.
Tras la grabación de “Buenos chicos”, la TV abierta en Argentina cesó casi por completo la producción de nuevos contenidos dramáticos. De hecho, la Asociación Argentina de Actores y Actrices, en un comunicado de prensa difundido en julio pasado, alertó respecto a que la televisión abierta quedó reducida a la mera repetición de contenidos, mientras que la mayoría de las historias argentinas se producen para plataformas de streaming como Netflix, Prime Video y Disney+.
"Buenos chicos". Foto: Pol-Ka Producciones
El matiz que plantea el organismo es que, a nivel internacional, se observa que países como Brasil, Colombia, Estados Unidos y España mantienen una robusta producción de ficciones para televisión abierta. Sin embargo, en Argentina, la situación se tornó particularmente precaria. El cambio hacia plataformas de streaming modificó el lugar de origen del contenido, pero al mismo tiempo redefinió la relación entre la televisión tradicional y las nuevas formas de distribución digital. Lo cual obliga a toda esta industria a adecuarse a los nuevos parámetros.
El proceso de transición de la ficción de la televisión abierta a las plataformas es gradual, pero contundente. Telefé, uno de los principales canales de televisión argentina, comenzó a adaptar su estrategia para incluir contenidos producidos originalmente para plataformas de streaming. Series como “El Encargado”, protagonizada por Guillermo Francella y Gabriel “El Puma” Goity, y “Santa Evita”, basada en el libro de Tomás Eloy Martínez y protagonizada por Natalia Oreiro, son ejemplos claros de esta tendencia.
“El encargado”. Foto: Disney+
El fenómeno también se refleja en la programación de El Trece, que incorporó producciones de streaming de probado éxito, como “Noticias de un secuestro”, basada en la novela homónima de Gabriel García Márquez. Este tipo de contenido, producido inicialmente para plataformas digitales, está encontrando una nueva audiencia a través de la televisión tradicional, aunque la mayoría de la producción de ficción se sigue realizando en el ámbito del streaming.
El cierre de la productora Polka, que fue una figura central en la producción de ficciones para TV abierta durante casi 30 años, con éxitos como “Gasoleros” y “Soy gitano” es apenas un botón de muestra del alcance de estas transformaciones.
"Noticia de un secuestro". Foto: Amazon Prime Video
Desconcierto y búsquedas
Martín Becerra, académico y experto en medios, respondió ante la consulta de El Litoral que hoy asistimos a una migración de dispositivos de uso, acceso y consumo de contenidos audiovisuales. “Si bien el televisor sigue ocupando un lugar importante, hay una competencia creciente de otras pantallas, mayormente móviles. Además, el contenido que vemos y usamos en el televisor no sólo está provisto por las emisiones lineales de la televisión abierta tradicional y las señales de la grilla de la televisión paga, sino por servicios a demanda, juegos en línea, canales de streaming en plataformas como YouTube”.
"Santa Evita". Foto: Disney+
“Estos cambios golpean los ingresos de la televisión abierta y marcan un momento de desconcierto en toda la industria audiovisual, que busca nuevos modelos de sostenibilidad para producciones que, al mismo tiempo, deben adaptarse a los gustos mutantes de las audiencias cada vez más segmentadas, excepto en grandes eventos en directo como pueden ser los Juegos Olímpicos u otras competencias deportivas”, finalizó.