En la provincia, el 85% de los condenados vuelve a delinquir cuando recupera la libertad

El crimen del comerciante de barrio Belgrano en la capital santafesina derivó en una discusión respecto de qué aporta el sistema penitenciario en términos de recuperación de los internos. Porque uno de los datos confirmados en las últimas horas fue que el homicida había cumplido una condena por otro crimen, y había recuperado la libertad hacía nueve meses. Frente a ello, la actual Defensora General de la provincia, Jaqueline Balangione, reveló que el 85% de los condenados de la provincia que son liberados terminan reincidiendo.

Consultado al respecto, el ministro de Seguridad de Santa Fe, Claudio Brilloni, admitió la problemática y confesó que encontró “sumamente debilitada” un área destinada al acompañamiento de los internos que recuperan la libertad, como es el Patronato del Liberado.

“Lo que estamos haciendo en este momento -contó- es reforzar y potenciar esa Dirección que está dentro de la órbita de nuestro Ministerio. La verdad, les digo sinceramente, hemos encontrado una Dirección que está muy debilitada y que no tiene los recursos. Hay 10.500 personas que tenemos que controlar a través de esta Dirección conforme los mandatos de los jueces de ejecución penal, por lo que tenemos que potenciar el área con vehículos y empleados; darle la entidad y la fuerza suficiente como para poder llevar adelante este trabajo”, mencionó.

Transitoria y condicional

Asimismo, contó que se han registrado casos de “personas que tienen libertad condicional o transitoria, y que no solamente han reincidido, sino que el año pasado -por ejemplo- en la ciudad de Rosario, de los 288 muertos que tuvimos, 22 eran personas que estaban en esa condición. Por lo tanto -afirmó-, tenemos una titánica tarea. Tenemos la fuerza y tenemos la experiencia y la sapiencia para poder llevar adelante todos estos trabajos. Y concretamente, considero que hay que poner en valor también esta Dirección de Patronato de Liberados -insistió- para poder llevar adelante el control debido, y poder evitar todo tipo de hechos negativos”.

Aun así, admitió ante la consulta de El Litoral, que el sistema penitenciario requiere un cambio de raíz, porque es indiscutible que los penales no garantizan actualmente la reinserción social.

“Sí, por supuesto -reconoció el ministro-; y no solamente necesitamos un cambio dentro de las cárceles, sino también extramuros. Si tenemos una persona adicta, obviamente que también tenemos que atenderla, no solamente aquel que comete un hecho delictivo. Tenemos que ver el tratamiento y la asistencia que hacemos post salida de un establecimiento carcelario. Estamos trabajando también para reformular aspectos que tienen que ver con el Servicio Penitenciario, como la incorporación de mecanismos de control”.

En el mismo sentido, mencionó que “prontamente vamos a tener un servicio de inhibición de comunicaciones, pero hay que evaluar cuáles son sus impactos porque no queremos atentar contra las normas y garantías constitucionales respecto de que las cárceles deben ser lugares de rehabilitación y recuperación para que cuando salga, este interno que está cumpliendo una condena, vuelva a la sociedad siendo una personal de bien”.

En otro orden, y consultado sobre los ingresos del personal tanto policial como penitenciario, Brilloni dijo que no han definido aún de cuánto será la mejora para el personal, y que deriva de la política salarial acordada con otros sectores del estado. “Estamos trabajando porque somos conscientes de los problemas de salario, de los servicios adicionales y de las horas OSPE o SAC (horas extras), pero todavía no está cerrado. Quedan algunas cuestiones que todavía hay que dilucidar”, planteó.

Finalmente, e indagado por El Litoral a propósito de los uniformes de las fuerzas, Brilloni dijo que “por ahora, se seguirá dando un suplemento extra para que se compren la indumentaria. Estamos trabajando también -acotó- con el desarrollo de un proyecto para unificar no solamente el color de la ropa, sino el tipo de tela, porque a veces el uniforme es caliente en verano y frío en invierno. E iniciamos las gestiones para la compra de borceguíes”, concluyó.