Evitar un masivo ataque de Irán a Israel: el objetivo de Estados Unidos

Estados Unidos mantenía este martes negociaciones contrarreloj para evitar que Irán inicie en las próximas horas un ataque contra Israel que genere una regionalización del conflicto y un paso previo a una guerra. La reacción iraní tiene relación con el asesinato del líder militar de Hezbolá, Fuad Shuk, en Beirut (Líbano) el pasado 30 de julio, cometido por Israel. Hassan Nasrallah, líder político de la referida organización chií y cabeza más visible de la misma, aseguró que con este crimen se había entrado "en una nueva etapa del conflicto" y responderían de forma "inevitable" a la agresión israelí.

Estados Unidos interceptó la idea de Irán de atacar en las próximas horas no solo la Franja de Gaza sino directamente Tel Aviv, aprovechando que ese país conmemora Tishá B`Av, el día en que lloraron la destrucción de los dos templos. El régimen de la República Islámica aprovecharía cuando todos duermen para perpetrar un ataque por sorpresa, como ocurrió con el grupo Hamás el 7 de octubre del año pasado. La inteligencia israelí está al tanto de ese posible avance iraní, pero son los Estados Unidos los que negocian contrarreloj para evitarlo, porque de ocurrir se estaría a las puertas de una Tercera Guerra Mundial, con una distribución de las máximas potencias mundiales tomando posición por una u otra nación.

En ese sentido, Rusia, China, Corea del Norte y los países árabes, a excepción de Jordania (que responde a Tel Aviv) y Egipto (por ahora neutral), estarían del lado iraní, mientras que la OTAN y otras potencias de Occidente se ubicarían del bando israelí. Otro misterio sería Turquía, atada al Tratado del Atlántico Norte, pero vinculada a la causa de Palestina y con relaciones en los BRICS, cuyos países (India, Brasil, Sudáfrica, Rusia y China) respaldarían a Irán. En las próximas horas se verá si las gestiones de Estados Unidos por frenar la escalada de conflicto da resultado o si se trata de intento tibio por hacerlo.

Bombardeo del brazo armado de Hamás

Las brigadas Al-Qasam, el brazo armado de Hamás, anunció en la víspera que atacaron la ciudad israelí de Tel Aviv y sus suburbios con dos cohetes M90. Se escuchó una explosión en en Tel Aviv pero no hubo informes de víctimas, informaron medios israelíes. Según el Ejército de Israel, el cohete disparado desde la Franja de Gaza cayó en el mar frente a Tel Aviv, mientras militantes del brazo armado de Hamás anunciaban su primer ataque contra la ciudad en meses.

"Hace unos momentos, un proyectil que había sido identificado procedente de la Franja de Gaza cayó en el espacio marítimo del centro de Israel", indicó el comunicado del Ejército israelí. Un periodista de AFP confirmó la información, al comentar que había "oído un estallido en la ciudad". El ejército añadió que "simultáneamente, se identificó otro proyectil que no cruzó a territorio israelí". El brazo armado de Hamás, las Brigadas Ezzedine Al Qassam, indicó que disparó dos cohetes M90 contra Tel Aviv, su primer ataque contra esta ciudad israelí desde mayo.

"Las Brigadas Al Qassam bombardearon la ciudad de Tel Aviv y sus suburbios con dos misiles M90 en respuesta a las masacres sionistas contra civiles y el desplazamiento deliberado de nuestro pueblo", reza el comunicado del grupo. El ataque se produjo en un momento en que Israel se encuentra en estado de máxima alerta ante las amenazas de Irán y sus aliados regionales en Líbano, Irak y Yemen, que prometieron responder a los asesinatos de altos cargos de Hamás y del grupo libanés Hezbolá.

Las FDI aseguran haber abatido a un centenar de milicianos

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI, el Ejército israelí) indicó este martes que ha abatido a unos 100 presuntos milicianos palestinos en los últimos días en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, donde Israel mantiene una criticada ofensiva desde principios de mayo que ha desplazado a más de un millón de personas. Además, los soldados destruyeron armamento y cientos de infraestructuras que estaban siendo utilizadas por los combatientes, según un comunicado. "Los soldados se enfrascaron en un tiroteo con una célula terrorista que se atrincheró en un apartamento en el corazón de un barrio civil y lograron eliminar a los terroristas", dijo el ejército, que además publicó imágenes de las operaciones grabadas con un dron.

La incursión israelí en Rafah, donde se refugiaban más de un millón y medio de palestinos que habían huido de los combates en otros puntos del territorio gazatí, obligó a cerrar el paso fronterizo hacia Egipto, que permanece clausurado desde entonces, y por donde antes entraba gran parte de la ayuda humanitaria al enclave. Casi 40.000 personas han muerto y unas 92.240 han resultado heridas en el enclave palestino desde el comienzo del conflicto en octubre del año pasado, según las últimas cifras del Ministerio de Salud local, que es controlado por el grupo terrorista palestino Hamás.

Encuentro entre Putin y Abbas en Rusia

El presidente ruso Vladimir Putin y su par Mahmud Abbas, titular de la Autoridad Nacional Palestina, dieron comienzo este martes a un encuentro bilateral en Novo-Ogariovo, la residencia oficial del jefe del Kremlin, según informó el gobierno anfitrión. "En Novo-Ogariovo se llevan a cabo las conversaciones ruso-palestinas", indicó la Oficina de la Presidencia de Rusia en su canal de Telegram, donde publicó una foto de ambos presidentes y los demás participantes de ambas delegaciones.

El presidente ruso dio la bienvenida a Abbas, al recordar que no se veían personalmente desde hace dos años. "Todos saben bien que Rusia ahora, lamentablemente, debe defender sus intereses, proteger a su gente con las armas en las manos, pero no dejamos pasar por alto lo que sucede en Palestina", aseguró. Putin añadió que Rusia observa "con gran dolor y preocupación la catástrofe humanitaria que tiene lugar en Palestina".

"Por nuestra parte, hacemos todo para apoyar al pueblo palestino", afirmó, al señalar que Rusia envió alrededor de 700 toneladas de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. "Ante todo, naturalmente, sufrimos por las pérdidas entre la población civil. Según la ONU ya son 40.000 personas, y sobre todo, mujeres y niños", indicó.