La entrada en vigencia del Nuevo Sistema Penal de Santa Fe -febrero de 2014- con el desembarco de la oralidad como puntal y de los fiscales como actores principales, trajo aparejado el nacimiento de la institución que hoy los representa y es la Asociación de Fiscales de Santa Fe.
Fiscales reclaman “coraje institucional” e “idoneidad moral” a las nuevas autoridades
Recambio de autoridades, equiparación de funciones y régimen disciplinario, son las principales temáticas que, sumadas a la coyuntura de violencia disparada en el sur provincial, atañe a la labor cotidiana del conjunto de funcionarios públicos agrupados en la naciente entidad.
A la cabeza, los fiscales Ana Laura Gioria y Agustín María Nigro, en sus respectivos roles de presidenta y secretario de la asociación, dieron cuenta de sus inquietudes, expectativas y desafíos para el año que corre.
-¿Cuáles fueron las primeras inquietudes para la conformación de la asociación?
-El MPA es una institución relativamente joven, se puso en marcha en febrero de 2014 y su evolución hizo necesario que los fiscales tengamos algún grado de representación, tanto para hablar con las autoridades superiores de la institución como para tener una voz hacia la comunidad.
Hay tres temas de agenda muy presentes, que para nosotros son fundamentales, que están vinculados en primer lugar al régimen disciplinario: hemos hecho expresiones públicas al respecto y participamos en audiencia pública en agosto del año pasado. También la equiparación entre fiscales adjuntos y titulares: hay una actuación judicial en marcha que nuclea a fiscales adjuntos y defensores de toda la provincial. Y un tema muy importante sobre el cual estuvimos trabajando todo el año pasado, refiere al concurso de autoridades superiores: este último adquirió más relevancia porque es inminente la renovación.
Los tres temas que nosotros mencionamos hacen al nombramiento de los funcionarios, cuál es la carrera fiscal que se diseña y cómo tienen que rendir cuentas esos funcionarios. Y lo hicimos en relación con los fiscales de grado, manteniendo conversaciones con la Legislatura y el Ejecutivo y lo hacemos ahora respecto de las autoridades superiores porque creemos que es el momento crucial en la decisión de cuál va a ser el MPA del futuro, por los próximos 6 años.
-¿Qué es lo que esperan que suceda con las nuevas autoridades?
Antes de qué conducción esperamos, nos preocupa cómo elegimos a quienes nos van a conducir. Es tan importante quiénes son las personas a cuál va a ser el proceso. De hecho se armó una comisión conjunta con Rosario. Y obviamente nosotros pensamos en transparencia, capacidad técnica e idoneidad profesional y moral.
Quien emerja como autoridad superior tiene que estar legitimado por quienes integramos el MPA, pero fundamentalmente frente a la sociedad. Son cargos de fundamental trascendencia para la provincia de Santa Fe, por eso no sólo hace falta una persona que sepa, sino que además tenga el coraje necesario para liderar una institución que hoy tiene un rol fundamental. La palabra de ‘coraje institucional’ tiene que ser adecuadamente encarnada.
Pero, cómo hacemos para elegir esas personas. El plan de trabajo tiene que ser evaluado por un jurado, pero tiene que ser conocido por quienes integramos actualmente el MPA y allí radica la preocupaciones que le hicimos ver al Ejecutivo y a los legisladores. El plan de trabajo tiene que decir cuál va a ser el diseño institucional; cuáles son las líneas directrices; cómo se va a atacar el delito de funcionario público y de corrupción, por ejemplo. Hoy el concurso no exige que haya una registración al respecto.
Además tienen que dar cuenta de la historia del MPA. Nosotros ya hemos tenido dificultades en ese aspecto, por lo que a partir de ese diseño, tener en cuenta cuáles son los recurso necesarios. Cuando hay una política pública concreta se pueden asignar los recursos. No se puede pensar una política de persecución criminal sin tener en cuenta los recursos. Y ahí se mecha con la agenda de la asociación y nos preguntamos si somos una cantidad de fiscales suficientes o insuficientes para esa agenda de trabajo.
Quisiéramos que aparezcan personas como resultado de este proceso de selección de este concurso que tengan el coraje suficiente con un plan de trabajo sólido y que ubique al MPA como una institución modelo.
-¿En qué instancia está el reclamo de equiparación?
Existe un reclamo judicial en marcha. Se inició como un recurso de amparo que presentamos la mayoría de fiscales y defensores adjuntos de la provincia, que tuvo sentencia favorable ante la justicia civil de distrito de Santa Fe pero que no se hizo efectivo.
La sentencia no tuvo ejecutoriedad en ese momento, porque la Corte determinó readecuar el trámite hacia un contencioso administrativo. Entonces tuvimos que presentar una nueva demanda ante la Cámara en lo Contencioso Administrativo; ya se sustanció todo el procedimiento y estamos esperando el fallo, que después tendrá instancias de apelación.
-¿Quién podría no estar de acuerdo con un reclamo que surge legítimo?
No se trata de estar en contra, la Corte juega el rol de ordenador. En la Legislatura el proyecto (de equiparación) tuvo media sanción (en el Senado) y luego en Diputados no avanzó. Todo el mundo dice que sí, que tenemos razón pero no se abre el camino.
No creemos que la limitante sea una cuestión presupuestaria, porque no es relevante en el presupuesto del Poder Judicial y hace al criterio de Justicia: todos sabemos que los fiscales titulares y adjuntos trabajamos en igualdad de condiciones, sufrimos las mismas cosas y tenemos las mismas responsabilidades.
-¿Qué postura tiene la Asoc. respecto de las intimidaciones públicas y privadas a fiscales de toda la provincia?
Todas son inaceptables, pero no es lo mismo hablar de balaceras, sobre todo como ocurre en la zona sur, que algún episodio aislado dentro de una sala de audiencias, donde solicitamos la responsabilidad de los magistrados para poner orden y tratar de evitar manifestaciones inadecuadas o agresiones y así lo hicimos saber.
Otra cosa es cuando los fiscales estamos siendo sometidos a un grado de presión de la criminalidad organizada. Ahí el grado de virulencia y peligro para las personas -porque detrás del funcionario están las familias-, se pone muy preocupante y es un poco la situación de seguridad que atraviesa a Santa Fe.
Nosotros vivimos en la misma ciudad, recorremos los mismos espacios y además estamos expuestos porque hacemos una actividad vinculada a tratar de encarcelar a personas que cometen delitos. Hace falta mejorar todos los aspectos de la seguridad inclusive la que hace a la seguridad de los funcionarios.
En la ciudad de Santa Fe ha habido episodios de violencia vinculados a causas por abusos sexuales en la puerta de tribunales y por eso se ha pedido cambiar el lugar de ingreso al edificio. La verdad que no deja de preocuparnos y ocuparnos todos los días, pero cuando el crimen organizado golpea tu puerta el miedo persona aparece.
-¿Qué postura tienen sobre la exposición mediática?
Hay que conjugar la necesidad de dar publicidad a la actividad del MPA, porque eso hace a la transparencia y porque la gente tiene que conocer lo que el hacemos, pero con el necesario margen de privacidad que merecemos y necesitamos los funcionarios. Una buena práctica es difundir los pasos o hitos procesales que puedan interesar a la sociedad, sin mencionar nombres propios y sin la necesidad de la exposición de la imagen.
Lo trabajamos con la Fiscalía Regional que fue receptiva al planteo, para que el sujeto de esa comunicación pública sea el propio MPA y no la persona. Porque cuando un fiscal es efectivo y logra un éxito procesal en realidad el que triunfa en esa actividad es la propia institución.
Y cuando hay dificultades también, más allá de las rendiciones de cuentas individuales de cada uno, entendemos que quien debe capitalizar el reconocimiento es el MPA en su conjunto y de esa manera tiene que ser diseñada la actividad.
Comisión Directiva
La Asociación de Fiscales de Santa Fe la conforman: Ana Laura Gioria (presidenta); Agustín Nigro (secretario); Barbara Ilera (Órgano de Rendición de Cuentas); Marcelo Fontana (Órgano de Rendición de Cuentas); Jorgelina Moser Ferro (tesorera); Gabriela Arri, Alejandro Benítez, Roberto Apullán y Gonzalo Iglesias (vocales).
41 fiscales
Son los que ejercen actualmente sus funciones como titulares y adjuntos en la Primera Circunscripción Judicial que comprende a las ciudades de Santa Fe y zona metropolitana, San Jorge, San Javier, San Justo, Esperanza y Coronda.
Dos en la provincia
En la provincia de Santa Fe hay dos asociaciones de fiscales que se desempeñan en el marco del Ministerio Público de a Acusación (MPA) y se encuentran en los dos polos urbanos más grandes: Santa Fe y Rosario.
“Tenemos la aspiración de que se incorporen los colegas de Rafaela y Reconquista. Dejamos abierta esa posibilidad pero nunca la formalizamos”, señaló la Dra. Ana Laura Gioria, que se desempeña en la Unidad Fiscal de Homicidios de Santa Fe y preside la asociación local.
“La idea durante todo el 2022 fue tejer esos lazos”, amplió el fiscal Agustín María Nigro (Oficina de Delitos Informáticos), quien actualmente es secretario de la joven institución. “Hemos hablado bastante con nuestros pares de Rafaela y avanzado en diálogo con la asociación de Rosario. Hay mucha agenda en común, y más allá de las diferencias territoriales y la idiosincrasia, el grueso de los temas atañen al conjunto de los fiscales de la provincia”, apuntó.
“La historia es relativamente corta”, recordó Gioria. En la primera circunscripción “empezó a conformarla el fiscal Estanislao Giavedoni” tras la puesta en marcha del nuevo sistema en 2014; “luego a partir de octubre de 2021 se hizo un proceso de normalización y se conformó una nueva comisión directiva por unanimidad de quienes participamos”.
“La adhesión es voluntaria, no está el 100 % de los colegas adheridos” pero “actualmente la mayoría se encuentra asociada”, informaron.
