Galnares, Roma y Taddia: probable puja de tres postulantes por dos concejalías
Las primarias del 12 de septiembre, además del ordenamiento de listas y la exclusión de los que no alcanzaron el piso mínimo, sirvieron para que cada fuerza política mostrara sus números. Y Primero Venado fue contundente con más del 50 % de los votos, justificando con creces sus expectativas de adjudicarse cuatro de las cinco bancas en las generales.
Con un módico 64 por ciento de votantes en las PASO, se aguarda para el 14 de noviembre, al menos, un 75 por ciento de participación. También una merma de los numerosos votos nulos por desconocimiento del mecanismo de votación con la boleta única. Allí habrá varios miles de nuevos electores que se disputarán, en mayor medida, todos aquellos que cuentan con posibilidades de acceder a las preciadas concejalías.
Así como el oficialismo (50,68%) se plantó entre tres y cuatro bancas, el aún tambaleante Frente de Todos (10,69%) oscila entre retener la que cede y quedarse con las manos vacías en una renovación legislativa por primera vez desde el ’83.
Al mismo tiempo, el otro sector que dará la batalla final por un sillón en Sarmiento y Alem es Ciudad Futura (12,26%), el segundo más votado de las primarias y artífice en su estreno electoral de un batacazo con aviso.
Los que no se rinden, aunque corren desde atrás, son Juntos por el Cambio (sectores del PRO no alineados en Primero Venado), que sumaron el 8,24% de los sufragios con tres fracciones, y el Impulso Progresista de Diego Milardovich, que en un promisorio debut como solista reunió un 7,25%.
Pregunta del millón
La pregunta del millón, en el inicio de la campaña hacia el 14-N, es de dónde van a sacar los votos, cada uno de los protagonistas, para lograr sus objetivos. Sin dudas, además de los varios miles que no votaron en las PASO y sí lo harán en la general, habrá búsquedas más específicas y sofisticadas.
Primero Venado, por ejemplo, apuntaría como prioridad a los votantes del PRO que tributaron a Juntos por el Cambio, usando el argumento del voto útil, siempre influyente cuando se juega por los puntos. Un dato a tener en cuenta es que los seguidores locales del partido que preside Patricia Bullrich sacaron más de 8 mil votos en las legislativas de 2017 y ahora cayeron a 3 mil (con el sello propio), con lo cual el oficialismo intensificaría el operativo succión en este período.
También intentarían reconquistar unos cuantos díscolos del socialismo que en las primarias huyeron presurosos hacia los brazos abiertos de Milardovich y Taddia.
Salvar el honor
El PJ, pese a presentar un buen candidato como Sebastián Roma, está al filo de la cornisa. Aunque los más optimistas confían en la contención de los votos del camporista Nicolás Villalba, que darían al conjunto del Frente de Todos un caudal suficiente para salvar el honor. Sin embargo, la crisis política que sufre la coalición gobernante (con el Presidente capitulando ante su vice), sumada a la ruptura entre Agustín Rossi, referente de la lista de Villalba, y Omar Perotti, líder de Roma en Hacemos Santa Fe, no crean el mejor clima interno para asegurar esas buenas convivencias.
Aún se habla del escaso respaldo a Roma desde la Provincia. “Nos faltó tiempo para visitar los barrios”, trató de justificar el postulante con su habitual corrección, pero la verdad es que, sobre todo, le faltó ayuda desde más arriba para competir contra el aparato municipal y la coordinada militancia de Ciudad Futura. Ya nadie gana con el nombre, ni siquiera el PJ.
A los codazos
En tanto, el sector de Taddia atraería votantes de Soberanía Popular -cuyo referente provincial es Carlos Del Frade-, que están fuera de la pugna local de noviembre y vienen de ser aliados de Ciudad Futura en la Legislatura santafesina. Como Primero Venado, este sector también buscará seducir voluntades socialistas que acompañaron en las PASO al Impulso Progresista, una vez más apelando a la funcional estrategia del voto útil. Incluso no descartan captar votos de Villalba.
Desde ya que Milardovich y María Luz Barraza Atencio (JxC) no sólo defenderán sus votos de los intentos de arrebato de sus rivales, sino que también pretenderán sumar otros nuevos, aunque con la dificultad de partir en desventaja numérica respecto de Taddia y Roma, los cuales podrían protagonizar una atractiva competencia de tres, junto con Sofía Galnares –número 4 del oficialismo-, por la cuarta y quinta banca, asumiendo que Primero Venado, a estas alturas, con Juan Ignacio Pellegrini, Verónica Ruiz y Nahuel Pasquinelli, ya le puso nombre y apellido a tres concejalías.