Enrique Cruz (Enviado Especial a Doha, Qatar)
Lionel Messi jugó su partido número 22 en mundiales y así quebró el récord que ostentaba Diego Armando Maradona, quien disputó 21 partidos. El debut del rosarino se produjo en la goleada ante Serbia y Montenegro en el Mundial de Alemania de 2006 y marcó uno de los goles del 6 a 0. Además, Messi ya igualó el récord de los mexicanos Carbajal y Rafa Márquez, del alemán Lothar Matthäus y el italiano Gianluigi Buffon, que también jugaron cinco mundiales. A eso hay que sumarle que Messi lleva convertidos, al inicio del partido con los polacos, 92 goles con la celeste y blanca en 166 partidos (el de Polonia fue el 167). Dos récords que serán muy difíciles de batir en el futuro.
Pasó lo que debía pasar: Argentina fue local. El estadio de los contenedores, que seguramente tendrá muy poca vida una vez que Qatar vuelva a su normalidad, había sido el escenario de la invasión brasileña ante Suiza. Sólo se veían camisetas amarillas y el típico fervor que le ponen los brasileños, frente a un pequeño puñado de suizos. Acá fue igual. Desde muy temprano, la calurosa Doha (la temperatura desciende por la noche) se vio invadida por argentinos, muchos de ellos recién llegados y otros que resolvieron hacer “campamento” en otra ciudad o en otro país (ejemplo en Dubai) y llegar a Doha sólo para los partidos.
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Ese mismo clima que se vivió desde la mañana en los lugares más tradicionales de esta ciudad (Sout Wakif, la avenida Corniche y las adyacencias del “974”), fue el que preanunció el espectacular banderazo que provocó la admiración de turistas, de los qataríes y de todos los que llegaron a este país para ver el Mundial.
Antes del partido (a las 16 de Qatar), se convocó a todos a un lugar ubicado a 10 minutos de caminata del estadio de los contenedores. Allí, la gente pudo disfrutar del show de Los Totoras, que también sirvió no sólo para divertirse sino también para consumir las tensas horas previas al partido con Polonia.
El de este miércoles fue el partido número 84 de la Argentina en copas del mundo. La estadística indica que la selección, hasta el inicio del partido con los polacos, acumulaba 44 victorias, 15 empates y 24 derrotas. Si bien en los últimos mundiales Argentina apenas logró pasar cuartos de final en 2014 con Sabella, si tomamos como punto de partida el Mundial de 1978, solamente Alemania consiguió jugar más finales (5) contra las 4 que jugó la Argentina (las dos que ganó ante Holanda y Alemania y las dos que perdió en sendos partidos decisivos ante los alemanes).
El juego de las predicciones estuvo a la orden del día. Varios “expertos” analizaron distintas cuestiones y se animaron a presagiar que Argentina no iba a tener problemas en ganar el partido, alguno de los cuáles hasta se atrevió a señalar los minutos (o la hora) en la que esas posibilidades de conseguir un gol iban a crecer.
Como siempre, El Litoral se cruzó con muchísimos santafesinos que llegaron a Doha, algunos de los cuáles se quedarán, otros se irán y otros se llegarán. Uno de ellos es Enrique Ariotti, el ex presidente de Colón, destacadísimo empresario de la ciudad con proyección a nivel mundial, quien estará arribando a esta ciudad en las próximas horas.
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La Fifa premió a los periodistas que cubrieron 8 mundiales o más y de Argentina fueron siete los que recibieron este reconocimiento. Se trata de Enrique Macaya Márquez (17 mundiales, superando a Diego Lucero en el mundo entero), Ezequiel Fernández Moores, Daniel Arcucci, el querido y respetado Sergio Levinsky, Daniel Waistein y Horacio Pagani. El premio fue entregado nada más ni nada menos que por el brasileño Ronaldo, quien participa de una cadena televisiva y vivió un gracioso momento cuando le terminó de hacer una entrevista a Rodrygo, el jugador de su selección y éste, luego de despedirlo, le tocó las piernas y luego se pasó las manos por la suya, como queriendo transmitirse la indudable jerarquía que tuvo este delantero brasileño en sus tiempos de jugador.
Otra de las caras famosas que se pudo observar fue la de Javier Castrilli, el ex árbitro internacional que está presente en Qatar para seguir las alternativas del Mundial en su rol de comentarista y, naturalmente, analista de las labores arbitrales. A propósito, este jueves en Alemania-Costa Rica se dará un hecho histórico: por primera vez, un partido mundialista será dirigido por una mujer. Se trata de la francesa Stéphanie Frappart.