La búsqueda de un niño de dos años perdido desde hace dos días en una zona montañosa del sureste francés no ha dado resultado este lunes y continuará el martes, anunciaron las autoridades.
La policía buscan a Emile, el nene de dos años que despareció y mantiene en vilo a Francia
“No hemos podido localizar por ahora al pequeño”, reconoció el prefecto de Alpes Alta Provenza, Marc Chappuis, en un rueda de prensa sobre la marcha de las operaciones.
Chappuis añadió que las batidas concluyeron por la jornada del lunes y continuarán el martes de forma “más focalizada y selectiva”.
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Las autoridades desplegaron un centenar de policías y bomberos con perros rastreadores, así como unos 200 voluntarios de la población local para intentar localizar al pequeño Émile, que desapareció el sábado del jardín de la casa de su abuelos.
“La familia se disponía a salir de casa para ir de excursión. Aprovechó este momento fugaz [de falta de atención] para irse”, dijo François Balique, alcalde de Le Vernet, a la televisión francesa. “Sus abuelos se dieron cuenta de que ya no estaba allí cuando fueron a ponerlo en el auto”.
Los lugareños dijeron a la prensa que el niño, del departamento de Bouches-du-Rhône, cerca de Marsella, estaba pasando las vacaciones de verano con sus abuelos en Haut Vernet, una aldea en un camino sinuoso de Le Vernet con una población de 25 personas. El valle rodeado de bosques es popular entre los excursionistas.
Los responsables de la búsqueda no excluyen ninguna hipótesis, bien que el niño se marchara por su cuenta y se perdiera, o incluso un posible secuestro, pero por ahora no tienen indicios para pensar en un hecho delictivo.
“No tenemos ningún elemento que apunta a que haya habido una infracción penal en la desaparición”, aseguró por su parte el fiscal de Digne-les-Bains, Rémy Avon.
Los últimos en ver al pequeño fueron dos personas que le vieron caminar solo por la calle, y desde entonces su pista se ha desvanecido.
Las pesquisas han incluido la búsqueda en bosques y campos cercanos en torno a la pequeña población de Haut Vernet (al norte de Niza), en la que apenas viven 25 personas, y en todas las casas y edificios del lugar.