No fue fácil lograr la entrevista con Mica Riera. Es que, desde que Netflix estrenó hace algunas semanas “El amor después del amor”, la serie inspirada en la vida de Fito Páez, la actriz estuvo en boca de todos. Su interpretación de Fabiana Cantilo (que ocupa un rol fundamental desde los primeros capítulos, dado que fue pareja del rosarino en los ‘80) encandiló a propios y ajenos. Casi fue como, máquina del tiempo de por medio, ver a la propia cantautora en sus años de juventud. Al notable parecido físico, Mica agregó una profunda internalización de sus gestos, movimientos y expresiones. “Fue un desafío enorme, porque todos conocen a Fabi”, admitió de entrada al charla con este medio.
La santafesina que brilló en el papel de Fabi Cantilo y ahora está en la calle Corrientes
¿Quién es Mica? La actriz, de 31 años, nació en la ciudad de Santa Fe, donde vivió hasta los 4 años. Después se mudó a Buenos Aires con su mamá, que iba a estudiar locución en el Iser. “Pero siempre fui a Santa Fe, donde pasé mis veranos y mis inviernos. Correspondía pasar las vacaciones allá, con la familia paterna. Sigo yendo todo el tiempo, una vez por mes o cada dos meses. Tengo hermanos, amigos, seis sobrinos y mucha gente con la que no quiero perder contacto”, contó en la primera parte de una charla de más de veinte minutos.
“Hay algo loco que me pasó toda mi vida: nunca fui de ningún lugar. Porque, en realidad, era muy porteña para estar en Santa Fe. Cada vez que llegaba era la ‘porteñita’ porque decía todas las eses y estaba viviendo en Buenos Aires. Y cuando estaba en Buenos Aires era la santafesina. Siempre fui como un híbrido entre Santa Fe y Buenos Aires”, asegura entre risas. “Lo divertido es que puedo hacer la tonada santafesina en un instante. Hablo con una persona de Santa Fe y se me pega la tonada. Pienso si tengo que hacer alguna vez algún personaje del interior, me va a salir muy natural”, indicó.
Su identidad santafesina le dio la pauta de que “El amor después del amor” tiene un error que no muchos percibieron: nadie habla como santafesino, a pesar de que aparecen muchos personajes de la provincia de Santa Fe. “Me quería morir cuando lo vi, es que había muchas aristas para pensar, para tener en cuenta. Es algo que seguramente a todos los santafesinos nos ha pasado, que vimos ese detalle. Pero nadie más se dio cuenta”, explicó. “Pienso que se perdieron una oportunidad, hermosa, de hacer la tonada santafesina”, apuntó.
Sin embargo, Mica sostuvo que la serie tiene un 99 por ciento de aciertos. “El equipo de arte, el maquillaje, los peinados, la iluminación, todo eso es perfecto. Desde mi lugar de actriz, haber estado en el equipo, en el rodaje fue como estar en un túnel del tiempo. Viajamos a los 80”, remarca.
Fabi por Mica
¿Cómo hacer un personaje como el de Fabiana Cantilo, al que todo el mundo conoce?. Ese fue el desafío más grande para Mica. “No solo para mí, sino para todos los actores. Sabemos quién es Fabi, quién es Fito, cómo son, cómo se mueven, cómo se enojan, cómo se ríen y es difícil sacar al espectador de ese recuerdo. Una de las cosas más valorables es que les encontramos muchos matices y detalles que hicieron que el espectador se olvidé quién es la persona que estás interpretando y entre por completo en la historia”, aseveró.
Para Mica, el logro de la serie es notable. “Es una historia basada en la vida de Fito, en sus memorias, que después escribió alguien en un guión y otra persona dirigió una serie con actores que componían sus propios personajes. Entonces yo pensaba todo el tiempo: ¿Qué pensará Fabi cuando la vea. O sea ¿se verá ella? Ella y Fito eran las figuritas difíciles. Lo más complejo era que ellos pudieran verse ahí”, describió.
Mica tuvo varios encuentros con su “personaje”. El más importante fue antes del rodaje. “Quería que fuera un personaje rico, con matices. Le hice muchas preguntas personales: de amor, trabajo, salud y mil cosas más. La mayoría las intenté incorporar desde la naturalidad”, recordó.
Después, Fabi visitó el set. “Me vino a decir: ‘no lo puedo creer, estás igual, me da mucha impresión verlo’. Estaba anonadada con la situación, le costaba estar ahí mirándonos”, añadió.
El último encuentro fue poco antes de estrenar. “Hicimos un encuentro con Netflix en la casa de Fabi para que ella vea por primera vez las escenas (no todas). Tenía mucho miedo, porque Fabi dice las cosas como son. Pero fue hermoso. Ella dijo que estábamos iguales, que le había sacado todos los gestos. Fue un encuentro muy lindo, ahí me solté. Me dije: ‘Sí se ve ella, ya está, no me importa más nada’”, expresó.
Los vínculos
Para Mica, el mensaje de la serie es claro. “Lo que plantea es que, justamente, para atravesar la vida y los problemas necesitamos amor, compañía, amigos y familia. En realidad no es un Fito ante la vida, es un Fito acompañado por miles de personas que lo están apoyando y acompañando y subiendo. Nosotros no vivimos solos, somos sociales y necesitamos tener vínculos, gente que nos potencie, nos ayude y nos acompañe. Me parece que eso es un gran acierto porque estamos acostumbrados a ver el camino del héroe, que atraviesa todos los males solo. Y, en realidad, Fito no se pone como un héroe. Siempre tiene alguien al lado. Me parece que eso está logrado de la serie y por eso nos sentimos muy muy identificados”, consideró.
Fito en su vida
Fito Páez no empezó a ser una figura importante en la vida de Mica Riera a partir de su participación en “El amor después del amor”. Lo era desde muchos años antes. De hecho, cuenta, uno de sus recuerdos de la primera niñez, precisamente en la ciudad de Santa Fe, la tiene a ella como protagonista junto a su prima, escuchando en la casa de la abuela la canción “Mariposa tecknicolor”, que pertenece al álbum “Circo Beat”, de 1994. “Era muy chica, pero son canciones que no tienen fecha de vencimiento, que son atemporales”, dijo.
Algo que atrae a Mica del músico rosarino es que siempre le canta a sus allegados y hace discos autorreferenciales. “Es una persona para mí muy elevada porque nunca, nunca se olvida de nadie. Está siempre con los que fueron parte de su vida. Fabi (Cantilo) está siempre alrededor de él. Cecilia (Roth) está siempre alrededor de él. No corta lazos, los hace más fuertes. Eso, para mí, es muy lindo y en la serie está reflejado eso porque es como que, de alguna manera, su lucha es esa: poder sostener los vínculos y mantenerlos a flote. Es una persona que ha perdido mucha gente en su vida y no quiere perder más. Y se encarga de transformar el amor que una vez sintió por una persona en otro tipo de amor. Es un mensaje muy lindo”, explicó la actriz.
Proyectos
La repercusión de la serie abrió muchas puertas nuevas para la carrera de Mica, aunque también terminó de abrir otras que estaban entreabiertas. Varias ofertas buenísimas. Empezó a hacer teatro en Multiteatro (calle Corrientes de Buenos Aires) en “El divorcio”, junto a Luciano Castro, Pablo Rago y Carla Conte. “Estoy contenta, pero en un momento tuve miedo. Pienso que soy una actriz versátil, que puedo hacer muchas cosas y no quería que se me encasille. Me copa esto porque puedo seguir haciendo series internacionales, también puedo hacer teatro, comedia en calle Corrientes y una novela para Polka que estoy a punto de filmar ahora. Me gusta la idea de poder demostrar que puedo hacer muchas cosas”, cerró.