Primero Venado: la UCR impulsa a Meardi para liderar una “lista única” de concejales

Hace dos meses, Sur24 anticipó las candidaturas a la reelección del intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella, y el senador provincial Lisandro Enrico (sería secundado en la suplencia por su colaboradora Leticia Di Gregorio), que además de contar con grandes expectativas de éxito en sus cometidos, se convirtieron en piezas clave del armado regional y provincial del precandidato a gobernador de Unidos para Cambiar Santa Fe, Maximiliano Pullaro.

Desde entonces, principios de marzo, se sucedió un sinnúmero de deliberaciones en los distintos sectores políticos, pero sin ninguna confirmación relevante. Sin embargo, en las últimas horas, a falta de ocho días para el vencimiento de los plazos -las listas deben presentarse hasta el viernes 12 de mayo-, se filtraron novedades en el escenario político local, más precisamente en el oficialismo. Uno de los datos sobresalientes es la intención de que un boinablanca lidere la oferta legislativa y la figura con más consenso interno es el actual secretario de Desarrollo Productivo y Planeamiento Urbano, Santiago Meardi, quien se trasladó a dicha función ejecutiva luego de desempeñarse durante tres años como edil en Sarmiento y Alem.

Con esta movida, más allá de reclamar el “número uno” -en 2019 ese privilegio lo ostentó el socialista Leonardo Calaianov-, el radicalismo apunta a conservar la armonía con el Partido Socialista (PS), Propuesta Republicana (PRO) y el Partido Demócrata Progresista (PDP). Y ante las amplias posibilidades de obtener tres bancas legislativas (retener las dos propias y sumar una), el ofrecimiento es que el PS y el PRO ocupen el segundo y el tercer lugar de la nómina. De esta manera, razonan en San Martín y Marconi, el equilibrio sería total, porque, en caso de ser reelecto Chiarella, según la hipótesis, en diciembre el bloque oficialista tendría seis ediles: dos de la UCR (Juan Ignacio Pellegrini y Santiago Meardi), dos del PS (Nahuel Pasquinelli y ¿Rosana Bellatti o Leonardo Calaianov?) y dos del PRO (María Verónica Ruiz y ¿?). Por supuesto que, en estos modelos pre-electorales, influye la exigencia de paridad, es decir que deben alternarse las identidades de género, y si es Meardi el cabeza de lista, crecen las chances de la actual diputada provincial Rosana Bellatti de ser la número 2 de la lista.

 

Los obstáculos para la unidad

Más allá de la confianza interna en un triunfo categórico del oficialismo en las próximas elecciones, el mayor obstáculo para la pretendida unidad en Venado Tuerto es que las principales fuerzas de Primero Venado responden a sus respectivos candidatos a gobernador, sumado a que en esta oportunidad -a diferencia de lo acontecido en 2021- Leonel Chiarella es candidato y, desde esa posición, defenderá a capa y espada la postulación del hughense Maxi Pullaro para la Casa Gris.

En consecuencia, aun cuando los postulantes a concejal, en virtud de un acuerdo local, podrían trabajar para sus referentes provinciales en los comicios, también se espera que las cúpulas partidarias, sobre todo en los casos del PS y el PRO, apunten a establecer una identidad y marcar presencia en la Esmeralda del Sur, alentando la presentación en el marco de las primarias de candidatos propios al Concejo Municipal.

En principio, el PS cuenta con mayor margen de acción, ya que el congreso provincial dio autonomía a las autoridades distritales para que resuelvan en función de sus realidades locales; en cambio, el PRO tendría serias dificultades para ingresar en la lista única, dado que la precandidata Carolina Losada no avalaría que sus alfiles venadenses se integren a una composición cuyos principales referentes (Chiarella y Meardi) sostienen la postulación de su antagonista Pullaro.

En el entorno de Chiarella aceptan que “las circunstancias políticas cambiaron” y en estos tiempos de campaña no habrá foto del intendente con la socialista Clara García o la radical Carolina Losada, siendo que ambas batallarán con el exministro de Seguridad provincial por la candidatura a gobernador de Unidos para Cambiar Santa Fe.

En otras palabras, no corre riesgo la unidad de la coalición oficialista en las generales de septiembre, pero a estas alturas es una incógnita cómo será su fisonomía en las primarias, si con lista única desde el vamos, o con pugna interna por las concejalías (hasta ahí podría llegar el nivel de confrontación porque ninguno de los aliados asumiría una candidatura para enfrentar al actual intendente).

En este marco, de conciliarse la unidad, la “marca” de la coalición local seguiría siendo Primero Venado, que a su vez podría competir con otras listas que pudieran presentarse bajo el paraguas de Unidos para Cambiar Santa Fe.

Chiarella y Enrico, las únicas certezas en el amanecer de la campaña electoral venadense

Nombres propios para la Legislatura

A la par de la proyección de Meardi para regresar a Sarmiento y Alem, también suenan nombres destacados de la UCR del departamento General López para integrar la lista de diputados provinciales que apuntalará la postulación de Pullaro en Unidos, tales como la subsecretaria de Participación Ciudadana y Relaciones Internacionales, Sofía Galnares, “en un puesto encumbrado”, según averiguó este portal; el presidente del Comité Departamental de la UCR, Roberto “Tito” Vergé y el ex intendente de Firmat, Carlos Torres.

No es un asunto menor para el gobierno venadense contar, además de Enrico en el Senado, con diputados provinciales cercanos, porque están convencido de que si la ciudad no creció más en este último período es porque no se logró una sintonía política con la Provincia (tampoco con la Nación). Y ante la posibilidad de alcanzar esa afinidad, al menos con la Casa Gris, necesita sumar legisladores propios en la Cámara baja que se conviertan en gestores de los proyectos estratégicos que la Municipalidad tiene en agenda, a la espera del momento oportuno para su aprobación e implementación, y de los que pronto habrán de sumarse, cuando se presenten las iniciativas enmarcadas en el Plan Estratégico Participativo (PEP) que tiene a la propia Galnares como coordinadora, junto a Mauro Nervi.