Además de Ingeniería en Sistemas, la Tecnológica gestiona nuevas carreras
En los últimos días el senador nacional Marcelo Lewandowski anunció la presentación de un proyecto de ley para la creación de la Universidad Nacional de Venado Tuerto, en busca de implementar carreras de educación superior no existentes en la ciudad y la región.
Luego de ello, el Ing. Jorge Rena, decano de la Facultad Regional Venado Tuerto de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) de Venado Tuerto, donde se dictan las carreras de Ingeniería Electromecánica e Ingeniería Civil, se comunicó con el legislador justicialista oriundo de Rosario, y en esa charla evaluaron antecedentes al respecto, como los proyectos impulsados más de una década atrás por el diputado nacional Gustavo Marconatto, en 2008, y el senador nacional Rubén Giustiniani, en 2010 (incluso sesionó la Comisión de Educación de la Cámara alta en el Centro Cívico de ruta 8 y 9 de Julio). También recordaron que la iniciativa se reflotó en 2012, a través de la diputada nacional justicialista Claudia Giaccone (con el asesoramiento del venadense Julio Eggimann) y un año atrás volvió a insistir la diputada nacional por el Frente Renovador santafesino, Vanesa Massetani, quien destacó la conveniencia de abrir en Venado una Casa de Altos Estudios ligada a la producción agrícola.
Luego, intuyendo la improbable aprobación de una iniciativa de estas características en el crítico contexto actual, y que en su momento recibió la rotunda negativa del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), Rena, tras evaluar en detalle cada uno de esos proyectos, consideró que “las áreas del conocimiento que se incluyen en estas propuestas de creación de nuevas universidades, en su mayoría están relacionadas con carreras que podrían dictarse en la Universidad Tecnológica, pero que hoy no se ofrecen en Venado Tuerto, ni tampoco en otras facultades regionales de la Región Centro (tres en Entre Ríos, cinco en Santa Fe, tres en Córdoba y al menos tres en territorio bonaerense). Por eso entendemos que es de importancia estratégica para la UTN, y no sólo para Venado Tuerto, cubrir esa demanda que resulta de interés para una amplia zona geográfica del país”.
En consecuencia, el primer movimiento de las autoridades educativas locales, a fines de septiembre, fue golpear la puerta del principal despacho del Rectorado de la UTN y evaluar, al más alto nivel, las chances de responder a una necesidad que, como se demuestra en las iniciativas descriptas, es del interés de todos los sectores políticos.
“En estos proyectos de nuevas universidades se mencionan carreras vinculadas a la agro-industria, que la UTN la tuvo en los años ’70; las vinculadas con los temas ambientales, incluyendo el agua y el suelo; la biotecnología y los biocombustibles. Todas ellas podrían dictarse en nuestra Facultad, que cuentan con laboratorios, equipamiento e infraestructura para albergar más carreras y más alumnos, y con costos mucho más bajos que los que demandaría la creación de otra Universidad Nacional”, razonó Rena con sentido común, más aún en estas épocas signadas por las restricciones del presupuesto estatal.
“Cuando analizamos todos estos factores, y sumamos el fuerte apoyo político del gobierno municipal a la Tecnológica, como lo hizo público el intendente (Leonel) Chiarella en reiteradas ocasiones, creemos que están dadas las condiciones para gestionar, comenzando por el Rectorado de la UTN, estas posibilidades de expansión, conteniendo en nuestras instalaciones varias de esas carreras incluidas en una nueva Universidad Nacional de difícil concreción”, consideró el decano.
“Para nosotros es valioso el respaldo del gobierno local, como antes lo recibimos de los intendentes (Roberto) Scott y (José) Freyre, y antes aún de (Ernesto) De Mattia, en cuyo mandato obtuvimos el predio de avenida Laprida donde hoy se levanta nuestro edificio”, evocó el flamante decano -asumió en junio último-, agradecido.
“Además -continuó- queremos aprovechar la buena receptividad de las autoridades de Rectorado, que es lo que nos está dando fuerzas para seguir insistiendo, porque de otro modo, y siendo una Facultad Regional pequeña, no tendríamos muchas posibilidades de éxito en la gestión”.
Ingeniería en Sistemas, a un paso
Por otro parte, el decano Jorge Rena informó que “hace siete años que estamos batallando por la incorporación como carrera gratuita de grado de Ingeniería en Sistemas, y hoy estamos a un paso, a una firma de la resolución”, graficó, con expectativas de poder implementarla en el período lectivo 2023 en Venado, sobre todo siendo una carrera que se cursa en otras sedes de UTN.
“Si todo sale como esperamos, en pocos días habrá novedades positivas y podremos abrir la inscripción, aunque no con la carrera completa, sino un tramo, con una adecuación a lo que demanda hoy la Secretaría de Política Universitaria de la Nación.
En este sentido, tras reconocer que con el modelo original el proyecto no era viable, acotó que la alternativa en estudio es “lanzar los tres primeros años, con certificaciones de conocimiento por etapas, por ejemplo: Programación Básica al cabo del primer año; Programación Avanzada tras el segundo; y Analista de Sistemas luego del tercero, como ya sucede hoy. Más adelante, si no se completa el dictado hasta el quinto año en Venado, el alumno podrá completar los dos últimos años en otra Regional”.
Incumbencias profesionales
El ingeniero en Sistemas de Información es un profesional de sólida formación analítica que le permite la interpretación y resolución de problemas mediante el empleo de metodologías de sistemas y tecnologías de procesamiento de información.
Por su preparación resulta especialmente apto para integrar la información proveniente de distintos campos disciplinarios concurrentes a un proyecto común.
Un Ingeniero en Sistemas de Información puede: desarrollar e implementar sistemas de información computacionales para aplicaciones financieras, administrativas, industriales, e-negocios, etc.; diseñar e implementar las redes de información que dan soporte a estos sistemas de información; desarrollar modelos de simulación, sistemas expertos y otros sistemas informáticos específicos destinados a la resolución de problemas de alta complejidad; especificar, gestionar y controlar el funcionamiento y la utilización de recursos informáticos (computadoras, servidores, dispositivos de redes, software) en cada organización.