Luciano Tobaldi, un obrero del bandoneón
A sus 39 años, el compositor oriundo de Berabevú, Luciano Tobaldi, es quizás uno de los referentes más joven del fuelle en el sur provincial. Se crio en el seno de una familia “musical”, donde la mayoría de sus seres queridos tenía alguna vinculación con el ambiente artístico, pero de forma aficionada. Salvo por un tío, el compositor de folclore -primo hermano de su papá-, Jorge Milikota.
“Todos cantamos, mis padres, mis hermanos y mi hermana. Somos una familia con mucha música. Uno de mis abuelos tocaba el acordeón y otro abuelo tocaba un poco la armónica. Yo fui el único que siguió dedicándome a full”, señaló en charla con Sur 24.
Tobaldi, intentó estudiar en un conservatorio, pero se dio cuenta que no era por ese lado que iba su búsqueda. “Así que lo hice de forma privada, tomando lecciones con profesores y también algo de modo autodidacta”, cuenta, remarcando que además es guitarrista y cantante.
Pero también, tuvo otras facetas: “Empecé estudiando ingeniera en sistema en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) de Rosario. Incluso trabajé en Rosario y Buenos Aires en empresas de ese tipo. Pero no era lo que me gustaba”, recordó.
En paralelo, empezó a tocar el bandoneón en varios lugares, armó grupos y el dúo con el guitarrista Agustín Luna, que aún perdura. Incluso grabaron dos discos y filmaron dos videos. “Fue ahí que sentí que no había nada más importante en mi vida que eso. Fue instantáneo. En esa época renuncié a mi trabajo y me lancé –a la música-, con toda la confianza”.
Luciano partió a Buenos Aires y desde el 2015 al 2019 viajó haciendo giras en grandes festivales de Europa. También tocó en Uruguay y Brasil. “En Argentina, toqué en Buenos Aires, Rosario y en gran parte del sur provincial. Me queda pendiente recorrer el país. Me encantaría hacerlo”, aclaró.
Hoy, está componiendo, profundizando incluso su nivel de idiomas (francés, inglés e italiano) y estudiando instrumentos de viento: “Estoy trabajando para mí. Componiendo mis canciones, que son mi familia”, indicó. Si bien ahora se encuentra instalado en Berabevú, cualquier lugar puede ser un destino. “Quizás Rosario, Buenos Aires, Venado Tuerto, Italia, Francia o París. No lo sé. Ahora la pandemia me hizo parar y replantearme un montón de cosas, incluso mi próximo destino”.
En el sur provincial, se referencia por ejemplo con Alberto “Colorado” Ruiz de Firmat, con quien afirma, “tuve una conexión musical tremenda y hermosa”. “Compartimos tangueadas en la región y me acompañaba. Para mí era Maradona”. Otro fue Lilo Rubens, cantante de Chañar Ladeado. Y obviamente, se influenció por lo que pasaba en su casa con la música que compartió con el papá y con todo el entorno familiar.
Recorrido musical
En su adolescencia, a los 17 años, Luciano toma el primer contacto con el género interpretando tangos tradicionales acompañado por las guitarras de Andrés Ledesma. Desde el 2000 hasta el 2007 residió en la ciudad de Rosario y estudió bandoneón con Carlos Moyano y Alicia Petronilli.
En 2007 se instaló en Buenos Aires con el objetivo de perfeccionar su formación artística. Tomó clases de bandoneón con el eximio Federico Pereiro y de canto con la profesora Ariadna Prime.
Desde entonces, forma parte de diversas agrupaciones tangueras, desempeñándose como cantante en Facazo (2010-2011) y Trío Estaño (2012) y ejecutando el bandoneón en El Quinteto Negro La Boca (2008-2010), Los Nadies (2008-2011) y la orquesta típica Rascacielos (2011-2012). Se presenta en espacios del circuito tanguero de Buenos Aires como Salón Canning, La viruta, Confitería La Ideal, el Teatro Orlando Goñi, Milonga en Orsay, Festival Ave Tango, entre otros.
En agosto de 2011, es invitado a participar como cantor de la Orquesta Típica Julián Peralta en el marco del Festival de Tango junto con otros cantores de reconocida trayectoria como Omar Mollo, Juan Subirá y “Black” Rodriguez Méndez. El concierto presenta nuevas composiciones, nuevos intérpretes vocales y nuevos músicos del género.
Además de tocar el bandoneón y cantar se destaca como autor y compositor. Uno de sus tangos “Es la vida” fue grabado en el disco de Ariel Ardit “Yo lo canto hoy” editado en el 2013. Compuso una de las canciones del festival “Tango en Punta” para la octava edición 2016 en Punta del Este y Bregenz cuyo título es “Estoy con vos”. Brindó conciertos en el sur de Brasil junto a la Compañía de Tango Argentina “Noite de Tango” durante el 2013 y 2014.
Como bandoneonista, trabajó en las casas de tango “Piazzolla Tango” y “La Esquina Homero Manzi” en donde además cantó con el “Sexteto Meridional” (dirigido por el pianista Pablo Estigarribia).
Cuenta con dos discos del Dúo Luna Tobaldi, grabados en el 2013 y 2016. “La idea es sacar un álbum nuevo”, anticipó.
En el 2018 se presenta en el festival de Tarbes en Francia junto a la banda Amores tangos, con quienes toca el bandoneón y canta. En el mismo año acompaña al célebre compositor italiano Vinicio Caposella en la Usina del arte en Buenos Aires y además graba un disco.
La experiencia Metallica
En el marco de las celebraciones por los 40 años de historia de Metallica, Tobaldi fue seleccionado junto a músicos de todo el mundo para interpretar distintas versiones de clásicos de la banda metalera. En su caso, fue con una interpretación en el bandoneón del clásico del álbum negro de 1991, “The Unforgiven”.
Tuvo que realizar un video y enviar el material para que Metallica lo difunda luego en todas sus plataformas oficiales. Fue filmado por otro coterráneo suyo, Fabricio Cola, quien es parte de “Agencia Bianco”.
En la producción, se lo ve vestido de negro, con una remera de la banda y de fondo a la vieja Estación de Ferrocarril de su pueblo. En la imagen final, se lo aprecia caminando donde se encuentra el imponente mural que homenajea a Julieta Del Pino.
Un día para el bandoneón
Desde 2005, el 11 de julio se conmemora el Día Nacional del bandoneón, declarado por el Congreso Nacional mediante ley 26.035 y sancionada el 18 de mayo de ese mismo año. La fecha no fue arbitraria: se eligió por el nacimiento de Aníbal Troilo, el “Bandoneón Mayor de Buenos Aires”, más conocido como “Pichuco”, compositor y director de orquesta y emblema de nuestro tango. Esta ley fue impulsada por Francisco Torné (nieto de Zita Troilo) y el poeta Horacio Ferrer, presidente de la Academia Nacional del Tango.