Melincué: dieron con el perímetro del antiguo fuerte colonial
Nuevamente llegaron docentes, estudiantes e investigadores a la cabecera del departamento General López para continuar avanzando con la reconstrucción de la historia en los entornos a la laguna de Melincué. La novedad en esta cuarta campaña, es que encontraron la estructura de lo que podría haber sido el foso del fuerte.
Así lo confirmó Juan David Avila, del Centro de Estudios Interdisciplinarios en Antropología de la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR, a partir de unos hallazgos que tienen que ver con la delimitación, luego de imágenes tomadas por el drone de Armando Senese. “Es interesante porque si bien la materialidad no indica una estructura del posible fortín, si indica la existencia de un pozo de contención en forma de rectángulo de 50 metros de anchos y 50 de largo. Muy cerca al otro recinto que excavamos en junio y septiembre del 2022”, explicó.
Avila, aclaró que “de a poco estamos realizando una construcción de espacio de territorio vinculado a las estructuras de un fuerte que pensamos es de fines del siglo 18 (1700)”. Luego, señaló que “no sabemos si es el primero o el segundo” (de los fortines) sino que “todo indica que el relato y las crónicas dan a entender que tiene similares construcciones con el tamaño de ese espacio de fosa de alrededor de 4 metros, en todo el perímetro de esa estructura”.
Dentro, encontraron construcciones que coinciden con espacios habitacionales que podrían tener relación de comandancia o de residencia de autoridades: “Es interesante remarcar, que tanto la estructura de ladrillos que aparecen dentro de ese espacio delimitado por ahora con una vegetación y que estamos pensando que es la fosa, son los únicos lugares donde hay estructura de ladrillos”.
Esto viene en referencia al recinto de lo que se podría denominar iglesia, donde aparecieron restos óseos humanos, un piso fuera de ese recinto que puede ser un patio y dentro de la estructura, un sector vinculado a la habitación -se presume que de alguien de jerarquía o de importancia-, que según los relatos históricos “dan a conocer que una parte destinada a la construcción eran estos dos sectores, uno dentro y otro fuera del perímetro de fosa”, agregó Avila.
“Estamos contentos porque fue fructífera esta campaña, evidenciando a partir de una serie de sondeos y excavaciones sobre el foso, que aparece una materialidad vinculada tanto en teja, ladrillos, restos óseos faunísticos, que no implicarían que hay un relleno posterior”, remarcó.
En esta línea, el investigador valoró que la “estructura es la fosa reciente, y ahora encontramos dentro un relleno posterior que podría estar vinculado con las distintas instancias de la acumulación del sedimento que se fue dando posteriormente a la no utilización del fuerte”.
Por otra parte, agradeció a las comunas de Labordeboy, Elortondo y Melincué, más el aporte de vecinos y adelantó que a futuro, la idea es pensar un parque vinculado al sitio “fuerte Melincué”, generando políticas patrimoniales, que le den sentido de protección a nivel local y regional.
Reconstrucción digital
En esta oportunidad, participó la arquitecta Carolina De Luise, master en proyecto y restauración de sitios arquitectónicos. El objetivo es abordar el trabajo interdisciplinariamente para que cada uno aporte conocimientos y trabaje en equipo, “para relevamiento, redibujo y poder pensar en una hipótesis de como hubiera sido” el fuerte colonial de Melincué.
Por su parte la antropóloga Belén Molinegro, del Museo Gallardo de Rosario, explicó que intentaron sondear la pared este, la estructura de lo que fue el foso del fuerte y que allí estuvieron viendo la composición del relleno del foso. También contó que se hizo un registro fotográfico, con relevamiento planimétrico y lo que buscan llevarse es la idea de la dimensión de la estructura.
Asimismo, Mariela Gallego, también del Centro de Estudios Interdisciplinarios en Antropología de la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR, sostuvo que “tenemos en este momento la posibilidad de delimitar el foso del fuerte” ya que el año pasado, “parte estaba bajo del agua y no lo podíamos llegar a visibilizar”.
“Decidimos volver y realizar sondeos para ver que materialidad aparecen en distintas partes. La idea es una reconstrucción 3D de lo que fue el fuerte”, cerró.
*Agradecemos el material y la gentileza de Armando Senese, quien viene cubriendo este trabajo desde los inicios. Todo está siendo publicado en sus redes sociales