Mónica Nieto: coraje, experiencia, gestión y compromiso para gobernar en Murphy
A días de las elecciones para definir a los próximos presidentes y presidentas comunales en el departamento General López, Sur 24 entrevistó a Mónica Nieto, educadora y reconocida trabajadora de las instituciones en Murphy. Identificada desde hace muchos años con el senador provincial Lisandro Enrico, aspira a poner en sintonía la gestión comunal con el equipo de trabajo del legislador, con quienes proyectan una verdadera transformación en el pueblo.
¿Quién es Mónica Nieto?
Soy una vecina del pueblo qué eligió formar una familia en Murphy. Mamá de cuatro hijos y esposa, que con mucho esfuerzo logré recibirme de docente, profesión que amo y ejerzo con compromiso cada día de mi vida. Pero soy inquieta y empecé a notar que el flagelo de la droga se llevaba a nuestros chicos, entonces también me formé y recibí de acompañante terapéutica con orientación en adicciones, labor que también desempeño en la ONG “Podemos”.
¿Cómo llega a interesarse por la política?
Yo empiezo desde muy chica, de la mano de mi mamá Ramona, que era un gran militante. Crecí en un hogar donde se hablaba de política y además se ejercía. Fue un ejemplo de lucha. Jamás la vi resignarse, una mujer que trabajó incansablemente para contribuir con la igualdad social.
Ya de adulta decidí incorporarme y empezar a trabajar para el doctor Eduardo Filippetti. Luego de un largo camino recorrido, conocí a Lisandro Enrico y me sumé a su equipo. Para mí, es un referente político territorial, pero además es una persona a la que quiero mucho. Mantenemos una gran amistad.
¿Por qué decidió ser candidata en estas elecciones?
Después de trabajar en muchas campañas, de haber recorrido mi pueblo varias veces, conociendo las dificultades y el potencial que tiene mi localidad, sentí que había llegado el momento de encabezar un proyecto. Quiero plasmar lo que fui aprendiendo durante estos años, herramientas que la política me brindó, y siento la necesidad de sumar, de mejorar, de brindar nuevas oportunidades.
Además, estoy involucrada en muchas instituciones. Nadie me tuvo que contar en qué estado o qué necesidades tienen las instituciones. Yo las conozco, soy o fui parte. Creo que la clave es involucrarse, no existe otro modo de cambiar las cosas.
¿Cuáles son los proyectos más importantes qué le presenta a la sociedad?
Creo que Murphy atraviesa una gran crisis habitacional. La situación económica le impide a un gran sector de vecinos poder adquirir un terreno, construir una vivienda o alquilar. Entonces una de mis prioridades es poder generar gestiones de naturaleza público-privada para que la comuna adquiera nuevos terrenos y de esa manera concretar nuevos loteos.
Últimamente, no hubo decisión política de adquirirlos y construir viviendas sociales. Es interesante porque cuento con el aval necesario para hacerlo. En Murphy, el último barrio se hizo hace 15 años y su población creció de manera exponencial. A veces, la falta de gestión genera muchos inconvenientes.
Otro punto vital es empezar a generar espacios para la juventud. Este sector nunca fue apoyado desde la estructura comunal. Proponemos la creación de una Secretaría Joven, desde donde se generen capacitaciones y talleres de oficios. Para poder concretarlo, establecimos líneas de trabajo conjunto con el Gobierno de Venado Tuerto, quienes nos van a brindar cupos para que nuestros jóvenes y adultos accedan a los diferentes cursos que se brindan.
Con fuerte respaldo. Nieto con los diputados Maxi Pullaro, Georgina Orciani y Silvia Ciancio
Nosotros proponemos garantizar el traslado, algo que tampoco se logró en tantos años de gobierno local. Una ‘Trafic’ que traslade a nuestros vecinos a capacitarse, estudiar o ante cualquier demanda social que se presente. Es fundamental apostar a la educación, generar herramientas que permitan que nuestros chicos tengan un trabajo, se puedan desarrollar sin necesidad de irse a otra localidad. El arraigo promueve el crecimiento.
Además, el pueblo está lleno de talentos. Hay que propiciar más pymes, apoyar el emprendedurismo y acompañar a los artesanos. Estoy convencida de que la economía local debe desembocar en un proyecto más amplio. La localidad debe contar con un espacio donde se produzca y se comercialicen diferentes productos, desde el huertero hasta lo más artesanal. Todo en una gran cooperativa social, favoreciendo la ocupación de mano de obra local e incentivando la economía. Hay que desarrollar algún dispositivo desde el Estado que lo garantice.
La educación es un tema aparte. Como docente no puedo desconocer la desvalorización qué sufrimos desde el punto salarial y en nuestra práctica, voy a estar totalmente comprometida, desde mi lugar, a mejorar las condiciones laborales de mis pares. Quiero que las personas que están a cargo del cuidado de nuestros niños en su primera infancia alcancen una mejor propuesta laboral.
No estoy de acuerdo con que nuestras docentes paguen de sus bolsillos las licencias que contempla la ley. La precariedad laboral afecta a la dignidad de las personas y cuando hablo de dignidad no solo me refiero a los trabajadores de la educación. La comuna debe empezar a generar bienestar en sus trabajadores. Se debe incentivar y premiar a los que hacen bien su trabajo y corregir a quienes vienen llevando prácticas abusivas. Es hora de entender que lo que es comunal es patrimonio de todos y no de unos pocos que disponen de sus recursos como propios.
La gente manifiesta preocupación porque siente que este último tiempo perdió espacios y derechos. Las instituciones deben volver a ser independientes. El Estado local debe apoyarlas, respaldarlas, pero nunca meterse adentro. La independencia de las instituciones es primordial para resguardar la identidad de su gente. Hoy los murphenses que desarrollan alguna actividad cultural no cuentan con un espacio propio. Celebro la llegada de la Escuela de Policía, pero se tendría que haber previsto el normal desarrollo de la cultura, que no es menos importante.
El área de salud fue siempre muy compleja de organizar. Fui parte colaboradora de la comisión del Samco donde logramos incorporar un cargo provincial y una ambulancia de alta complejidad. Habíamos logrado organizar un sistema de guardias los fines de semana con la colaboración del senador Lisandro Enrico que se mantuvo durante algunos años. Pero el cambio de gobierno provincial generó un retroceso. Hoy tienen “dificultades para arreglar la ambulancia”. Es algo impensado, que se repite en muchas localidades.
¿Qué piensa hoy del gobierno local?
El gobierno local está atravesando una transición política. En el medio de una pandemia, el ex presidente comunal abandonó el cargo y asumió una colega. No voy a hacer apreciaciones personales de una correligionaria. Solo puedo decir que fuimos buenas compañeras de trabajo y hoy me confunde su pertenencia política.
¿Qué sueña?
Hace 36 años que vivo acá. Murphy creció poblacionalmente y requiere de una mirada más innovadora. Por ejemplo, con programas ambientales más actuales, donde la ciudadanía se convierta en protagonista. Sueño con un pueblo que nos integre a todos, con un proyecto inclusivo que venga a dar nuevas respuestas. La actualidad nos exige nuevas propuestas. Ojalá mis vecinos me acompañen el próximo domingo 14 de noviembre. Amo a mi pueblo y estoy comprometida a dar lo mejor, junto a un gran equipo de trabajo para devolver a la localidad al lugar que se merece.