(Por Ivana Fux) – “Seguramente tendremos una PASO con varios candidatos; con buenos candidatos”, dijo este lunes Omar Perotti en el marco de una recorrida por localidades del departamento General López. Y reiteró lo que ya había planteado el 1 de mayo, cuando era consultado acerca de cuál sería su participación en los próximos comicios: “Voy a colaborar con la estrategia de nuestro frente Juntos”, repitió. Lo que no está claro aún, a 72 horas del cierre de listas que operará el viernes a la media noche, es cuál será esa estrategia.
Negociación en el PJ: Perotti quiere que Mirabella “juegue” y sigue la discusión
Perotti vaticinó que “habrá varios candidatos”, precisamente, después de un fin de semana plagado de llamados y negociaciones para intentar consensuar un postulante a la gobernación; no se busca un solo nombre del peronismo, sino uno acordado entre la Casa Gris y el sector que lidera Marcelo Lewandowski. Con el senador nacional se reunió Perotti -como informara este diario- el sábado durante cuatro horas. Antes, el mandatario había hablado con otros referentes del PJ como Leandro Busatto y Roberto Sukerman.
Desde que el viernes al mediodía – a pesar de la intensa lluvia- ingresó a la Casa Gris a hablar con el gobernador el actual diputado nacional Roberto Mirabella, se especuló con que el también aspirante a la gobernación declinaría su precandidatura. Sin embargo, a esta altura de la semana y a la luz de los magros resultados que han deparado las conversaciones de sábado y domingo, la posición de Perotti se sintetiza en un ‘Mirabella tiene que jugar’. Es su hombre de confianza, camina la provincia desde hace meses y ya lo corrió del esquema electoral original diagramado para las legislativas de 2021, cuando debió deponer su candidatura a senador -terminó compitiendo por una banca en Diputados- para que esa postulación quedase |en manos, justamente, de Lewandowski. El perottismo objeta, asimismo, la posición “dubitativa” de Lewandowski; y le reprochan que no tome una decisión definitiva. “No hay un seguro para todo riesgo en política”, plantean. Pivotear entre una posible precandidatura a gobernador o a intendente de Rosario mutaría de fortaleza a debilidad, aun cuando el dirigente pueda tener chances en ambas instancias.
Exigencias de Lewandowski
Desde el entorno de Lewandowski, en cambio, han asegurado a El Litoral que el principal inconveniente en la negociación pasa por no conceder la participación del referente rosarino en el armado completo de las precandidaturas de toda provincia. El senador acuña la expresión “acuerdos políticos, sí; empleado, de nadie”. Y sobre esa base, aspira no sólo a encabezar una fórmula para la gobernación, sino a tener voz y voto en la confección -por ejemplo- de la lista de precandidatos a diputados.
Pero eso es sólo parte del (des) acuerdo; también se discute qué apoyo promoverá la estructura del gobierno a su campaña, y ello tiene una traducción en términos económicos y financieros. Sin ninguna de esas temáticas resueltas, enojados por cómo el gobierno “especula” con los tiempos y en una suerte de desconfianza mutua ya casi confesa, el sector de Lewandowski entiende que sólo podría ser exitosa la negociación, si interviniese algún actor nacional que pudiese operar como garante de un eventual acuerdo. Pero no son optimistas; repasan, asimismo, el contexto adverso en el que se encuentra la provincia con una desaceleración en la economía y una crisis profunda en seguridad.
Este martes, Perotti tenía previsto en su agenda volver a viajar a Buenos Aires – ya lo había hecho el jueves, para reunirse con Sergio Massa-. El futuro de Lewandowsi, en tanto, no está resuelto. ¿Si no se logra un acuerdo, insistiría con competir por la gobernación a través de su sector? ¿Se postulará, en cambio, como intendente de Rosario? ¿O desechará ambas posibilidades y completará su mandato como senador nacional? Final abierto para su futuro político inmediato, y para la definición de la estrategia del PJ.