Innovación en el país
Nuevo tratamiento para combatir el trastorno del crecimiento que sufrió Messi
Esta condición afecta a aproximadamente 1 de cada 4,000 niños a nivel global. Este tratamiento podría reemplazar a la utilizada hasta el momento.
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) aprobó el uso de Somatrogon, una innovadora terapia que promete cambiar la vida de muchos niños y adolescentes en todo el mundo que sufren de una deficiencia en la hormona de crecimiento (DHC).
Este nuevo tratamiento marca un avance significativo en la forma en que se aborda esta condición, que afecta a aproximadamente 1 de cada 4.000 niños a nivel global.
Leo Messi fue diagnosticado con este déficit cuando tenía nueve años y fue el Club Barcelona quien pagó el tratamiento del futbolista, porque Carles Rexach, secretario técnico del club en ese entonces, quedó sorprendido con las habilidades deportivas.
Leo Messi fue diagnosticado con este déficit cuando tenía nueve años. Créditos: Reuters.
Qué es la deficiencia de hormona de crecimiento
Según explica el documento al que pudo acceder El Litoral, la deficiencia de hormona de crecimiento (DHC) es una condición médica en la cual el cuerpo no produce suficiente cantidad de una hormona esencial para el crecimiento, conocida como somatropina. Esta hormona es producida por la glándula hipófisis, ubicada en el cerebro, y es crucial para el desarrollo y crecimiento normal de los niños.
Cuando un niño tiene DHC, puede experimentar una serie de síntomas que incluyen estatura baja en comparación con sus compañeros, retraso en el crecimiento de los dientes, desarrollo puberal retrasado y un desarrollo muscular menor al esperado. En los recién nacidos, uno de los signos importantes puede ser la hipoglucemia, una condición en la que los niveles de azúcar en sangre son anormalmente bajos.
La deficiencia de hormona de crecimiento (DHC) es una condición médica en la cual el cuerpo no produce suficiente cantidad de una hormona esencial para el crecimiento
El problema de los tratamientos actuales
Hasta ahora, el tratamiento estándar para la DHC fue la administración diaria de hormonas de crecimiento sintéticas. Aunque estos tratamientos demostraron ser efectivos para ayudar a los niños a crecer y desarrollarse, la necesidad de inyecciones diarias puede ser un desafío significativo tanto para los pacientes como para sus familias. La rutina de las inyecciones puede ser agotadora, causando ansiedad y estrés tanto en los niños como en sus padres.
Nuevo tratamiento
La reciente aprobación de Somatrogon por la Anmat ofrece una solución revolucionaria. A diferencia de los tratamientos anteriores que requerían inyecciones diarias, Somatrogon se administra solo una vez por semana. Esta innovación se debe a la composición química especial que permite que la hormona permanezca activa en el cuerpo durante un período prolongado, reduciendo así la frecuencia de las inyecciones.
La Dra. Analía Morin, jefa del Servicio de Endocrinología en el Hospital de Niños Sor María Ludovica de La Plata, explicó que la introducción de Somatrogon representa un cambio radical en el tratamiento de la DHC. “La hormona de crecimiento recombinante se utilizó durante casi 40 años. La llegada de esta nueva hormona de larga acción es un gran avance, ya que reduce la carga para los pacientes que hasta ahora debían aplicarse inyecciones diarias durante largos periodos. Con Somatrogon, pasarán de aproximadamente 365 aplicaciones anuales a sólo 52”, afirmó la profesional.
Somatrogon ofrece una solución revolucionaria
Además de la comodidad de tener que recibir inyecciones con menos frecuencia, los estudios clínicos demostraron que el tratamiento es tan eficaz como la terapia diaria tradicional. En dos estudios clínicos multicéntricos, se comprobó que Somatrogon, administrado una vez a la semana, ofreció una tasa de crecimiento anual comparable a la de la hormona de crecimiento administrada diariamente. Los resultados también mostraron una mejora significativa en los parámetros de crecimiento y en los niveles del factor de crecimiento insulino-símil tipo 1 (IGF-1), un indicador importante del efecto de la hormona en el cuerpo.
La Dra. Marta Ciaccio, jefa de Servicio de Endocrinología en el Hospital Garrahan, destacó que el nuevo tratamiento no solo busca mejorar la estatura, sino también influir positivamente en el metabolismo, la fuerza muscular y el bienestar general de los pacientes. “Es fundamental que los pediatras sean proactivos en la evaluación del crecimiento infantil y en la derivación oportuna del niño con retraso de crecimiento”, enfatizó.
Impacto en la calidad de vida
El impacto de la DHC no se limita al crecimiento físico; también puede tener importantes repercusiones emocionales y psicológicas para los niños y sus familias. La necesidad de múltiples inyecciones diarias puede añadir una carga significativa a la vida diaria, y el estigma asociado con la estatura baja puede afectar la autoestima y el bienestar emocional de los pacientes.
Inés Castellano, Presidenta de la Asociación Civil Creciendo, una organización de apoyo para padres de niños con talla baja, subrayó la importancia de ofrecer apoyo integral a estos niños. “Aunque hoy hay mucha más información y concientización sobre el tema, todavía queda mucho por hacer para dar apoyo a las personas que transitan por el diagnóstico de DHC. No se trata solo de una cuestión estética, sino del crecimiento y desarrollo integral de la persona”.
Los estudios también demostraron que la reducción en la frecuencia de las inyecciones puede aliviar la ansiedad y el miedo asociados con el tratamiento. Morin señaló que, además de la aplicación semanal, si un paciente olvida la inyección de Somatrogon, tiene hasta tres días para administrarla, lo que añade flexibilidad y facilita la adherencia al tratamiento.
Signos de alerta y detección temprana
La detección temprana de la DHC es crucial para el éxito del tratamiento. Los padres y cuidadores deben estar atentos a señales como el crecimiento desigual en comparación con los compañeros, o si el niño parece significativamente más bajo o más joven de lo que deberían ser para su edad. Existen tablas de crecimiento que los médicos utilizan para monitorear el desarrollo de los niños y detectar cualquier desviación de los parámetros normales.