Orciani pide que se evalúe la extracción de árboles sobre ruta 94
La diputada Georgina Orciani pidió que el gobierno provincial evalúe la extracción de aquellos árboles que, teniendo peligro de caerse, puedan afectar la red eléctrica, el tránsito y/o la integridad física de los vecinos sobre la ruta 94. Este pedido es producto de los cuatro árboles caídos durante la tormenta del jueves 24 de marzo en el Departamento General López, que provocó el derribo de seis postes, cientos de metros de cables arrancados y 20.000 habitantes santafesinos sin luz por más de 24 horas. “Es algo que se viene reiterando tormenta tras tormenta. No podemos permitir que localidades enteras sigan siendo rehenes de la falta de diligencia gubernamental”, expresó la legisladora radical.
El reclamo, al que adhirió la diputada oriunda de Elortondo Silvia Ciancio, expresa la necesidad de que el gobierno de Santa Fe, a través de Dirección Provincial de Vialidad y la Empresa Provincial de la Energía, realice los controles exhaustivos e informe sobre el estado de la arbolada sobre la ruta provincial 94, su resistencia a las inclemencias climáticas y la necesidad de retirar o extraer aquellos que no estén aptos y puedan ocasionar accidentes de tránsito o destrozos en la red eléctrica. Orciani agregó que durante las últimas tormentas, “los cortes de energía se produjeron por problemas de caída de árboles y sus posteriores consecuencias”. “Son daños previsibles y salvables, por eso es urgente que Vialidad y la EPE dictaminen y actúen al respecto”.
Tras el temporal, la diputada isabelense señaló que estas acciones de mantenimiento son esenciales para evitar posibles nuevos accidentes y nuevos destrozos. “Sabemos que el clima es impredecible y a veces muy agresivo, pero eso no nos impide estar preparados, las rutas tienen que ser seguras para circular y las conexiones eléctricas deben estar resguardadas. Son tres localidades santafesinas, todas a la vera de la ruta 94 las que siempre son olvidadas”, finalizó, haciendo mención a Santa Isabel, Villa Cañás y Teodelina.