Orgullo de Maggiolo: la doctora María Emilia Barberis será la vicedecana de la Facultad de Derecho de la UNR

La joven abogada de Maggiolo, Maria Emilia Barberis (33), fue elegida este 24 de abril como vicedecana de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario. Siendo una de las caras de la Agrupación 1983, llega a este cargo luego de un intenso trabajo en la vida política estudiantil.

“Estos días recibí muchísimo amor. Estoy impactada y sorprendida de la cantidad de mensajes. Sentí que mucha gente se alegraba con lo que había pasado. No eran simples mensajitos de felicitación y agradecimiento, sino que noté ese día y también en los días posteriores una alegría compartida. Había muchas personas, estudiantes que eran de mi misma generación, o sea ya graduados, docentes, con los que comparto el trabajo día a día”, confesó en contacto son Sur24.

“La verdad que es un desafío hermoso y gigante. Yo desde que entré a esta facultad en un febrero del 2008 no me fui nunca más. Toda mi vida transcurrió aquí. Yo siempre digo que esta pasión por la universidad me ha llevado toda la vida. Y bueno, he trabajado ahí en un montón de áreas, conozco cuáles son sus fortalezas, las debilidades, cómo es cada rincón, de manera que estoy preparada para asumir este desafío y lo hago con el corazón”, admitió.

“Mili”, como la conocen en su mayoría, llegó a Rosario con 18 años en el 2008 y se recibió en el 2014, prácticamente con la carrera al día. Su acercamiento a la militancia estudiantil se dio en parte por la referencia a su padre, activo participante en la vida política maggiolense y por motivación del intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella.

“Era como una discusión en casa. Si bien mi papá participó en política y yo nací y crecí así, también el temor de todos era que me apasione tanto por la militancia estudiantil que me lleve a abandonar mis estudios o a retrasarlos bastante”, recordó.

Barberis, explicó que en su primer año le costó involucrarse y que en un viaje de Rosario a Venado Tuerto en colectivo, se sentó al lado de Leo Chiarella quien la terminaría de convencer. “Ya un poco nos conocíamos. Yo hice los últimos años del secundario en la Cultura Inglesa de Venado y Leo además tiene familiares en Maggiolo. Fueron esas tres horas de colectivo en donde me fue contagiando, invitándome, contándome lo que hacían. Él ya militaba en nuestra agrupación que se llama 1983, un poco en memoria de Raúl Alfonsín y del radicalismo”, dijo.

“Leo creo que fue quien terminó de convencerme o hizo todo para que me una a militar. Así que mis primeros pasos tienen que ver también con haberlo conocido a él en ese viaje que para mí fue un antes y un después. Porque de ahí me invitó a una actividad, una de las primeras en donde me tocó acreditar gente. Así empezó mi militancia”, remarcó.

“Es un compañero de militancia. Es todo lo que está bien en el mundo. Además, es un amigo y hemos transitado juntos todo este camino. Nos hemos formado juntos, hemos militado juntos, hemos dado juntos las mismas batallas y también nos hemos peleado, porque de esas discusiones puertas para adentro uno aprende”, valoró en referencia al intendente venadense.

“Yo estoy muy orgullosa de todo lo que él ha logrado, creo que él también está orgulloso de lo que he podido lograr yo, y no solo yo, porque esto es una cuestión donde me toca a mí, pero atrás hay un montón de trabajo, una agrupación estudiantil que la viene rompiendo año a año y que viene trabajando y superándose. Creo que él también está orgulloso de todo lo que fue la cuna de su militancia que es esta Agrupación 1983. Trabajé con Leo muchos años y estoy orgullosa de eso y aprendí un montón de él”, agregó.

Recorrido

Fue consejera directiva y consejera superior unos años después. La agrupación de la cual es parte, ganó el Centro de Estudiantes el año pasado y volvió a renovar este año. Antes tenían participación dentro de los ocho consejeros del consejo directivo y ahí empezó también su formación fuerte en las cuestiones de militancia estudiantil.

“Para llegar a esta conducción, a gestionar la facultad, tiene que ver con haber estado obviamente en el Consejo Directivo, con haber podido entrar a la gestión en el 2015 en la Secretaría de Extensión y desde ahí generar muchísimos programas que tenían que ver con que la facultad salga un poco a la calle y tenga contacto con estos programas para vincular un poco a la sociedad con la universidad”, sostuvo.

“Ahí es que conozco a Santiago Dearma que también es de Venado Tuerto y vice decano electo de la Facultad de Ciencias Agrarias. Dentro de esta área de extensión nos vinculamos y nos conocimos mucho. Luego me tocó ser secretaria estudiantil en la época de la pandemia, donde hemos trabajado muchísimo para levantar a la facultad y que esté en pie y que sigamos tomando exámenes y cursando”, valoró.

“La verdad es que nuestra facultad de Derecho fue una facultad modelo en eso, porque fue la primera que tuvo exámenes, que no perdió ningún examen durante la pandemia. Eso fue un trabajo enorme. Y luego de esa secretaría me tocó estar en otras dos, de concurso y carrera docente, y acreditación y planificación académica”.

Desafíos

Sobre el rol, plan de trabajo y vinculación con la vida académica, afirmó que el “vice decanato te da un rol de poder generar con mucha creatividad” y que, si bien en el estatuto no están marcadas funciones específicas, ya viene trabajando con este equipo de gestión.

“Mi decano renueva, que también estuvo en la gestión pasada, y tenemos una sinergia de trabajo que es muy linda, con lo cual asumo este rol teniendo en cuenta que pongo al máximo mi creatividad para poder, desde ese lugar, abarcar políticas que tengan que ver transversalmente con más de una oficina, con más de un área, y poder pensar cuestiones académicas de extensión y de investigación que son como los pilares que nos trae esta reforma universitaria dentro de la institución”, se explayó.

La abogada, aclaró que se da ese “desafío de poder generar discusiones que tienen que ver con la actualidad” y que no pueden evitar pensar que estamos en un contexto en constante cambio, donde se discute por qué las carreras duran tanto y cómo deben ser esos planes de estudios. “Estamos trabajando en esto, en acreditar trayectos formativos, cuáles son las discusiones que nos tenemos que dar entorno a esta inteligencia artificial y un montón de otras cosas”, adelantó.

Al margen de los debates macro que tienen para aportarle a la universidad y a las facultades, hay funciones específicas que quiere asumir con mucho compromiso, entre ellas la acreditación tanto de carreras de grado como de posgrado. “Tenemos que mutar del campus virtual para pasar a un campus que está validado por la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONIAU)”.

También se va a ocupar de los ingresos: “Se va viendo con el tiempo, que tienen ciertas particularidades y queremos abordarlo de manera integral y fuerte para que podamos, antes de ese ingreso a la vida universitaria, dotarlos de conocimientos que tengan que ver con un fuerte curso de ingreso”.

Es decir, que no sea eliminatorio porque es un “ingreso libre e irrestricto”, pero sí que “tenga un fuerte componente académico como para ir trabajando algunas cuestiones”, explicó Barberis.

Logros previos

Dentro de los proyectos que fueron trabajando desde el ámbito de las discusiones y las propuestas estudiantiles, se destaca el de haber modificado el plan de estudios. “Logramos sacar el mérito académico, que era un sistema que en realidad lo que hacía era ser desigual en lo que tiene que ver con el ingreso al cursado de comisiones. Generaba muchas trabas en los estudiantes y hemos logrado eliminarlo. Creo que esa fue la mayor conquista”, enfatizó.

También trabajaron con cuestiones de la “triple banda horaria”, para poder lograr tener cursado a la mañana, a la tarde y a la noche, para la gente que trabaja y que las materias tengan esta disponibilidad para poder cursar cuando al estudiante le resulte más fácil.

“Creo que esta facultad a la que pertenezco es mi lugar en el mundo y tengo vocación de servicio también. En esto estoy a disposición de docentes, de no docentes, de estudiantes, porque creo que ese también es nuestro rol”.