Notable convocatoria
Otro éxito de Las Cocot Recargadas en Rufino
Desde las 20.30, en la puerta del teatro, la fila de gente de casi 100 metros de largo esperando la llegada de Marcel y Emilio generaba gran expectativa. Como siempre, las entradas se agotan cuando el dúo transformista sube al escenario.
(Por Ana Inés Dobal) - Las Cocot Recargadas subieron la apuesta en su segundo encuentro con el escenario local a dúo el sábado 28 y domingo 29 de octubre. Su primer show fue un éxito inesperado, que las lleva ahora a hacer temporada en Carlos Paz y se embarcaron otra vez antes del verano, estrenando ahora su segunda propuesta para volver a los llenos totales.
Los jóvenes transformistas interpretando a las Cocot llegaron, antes de la función del domingo 29, en moto desde fuera del teatro. Esta particularidad ya despertó sorpresa y movimiento en la zona céntrica de Rufino, ya que a puro bocinazo se las vio manejar en scooter por avenida España para tomar el boulevard Belgrano, frente al teatro, dar la vuelta en la esquina de Centenario y subir a la vereda para abrazarse con quienes esperaban verlas en el Candilejas, recorriendo la fila de principio a fin.
El horario de la función era a las 21, pero la cita debía darse más temprano para no perderse la sorpresa (estaban avisados). La fila de personas con entrada en mano llegaba, pasadas las 20.30, hasta la esquina, desde la puerta del teatro, esperando el espectáculo callejero, antes del inicio del show en sala.
Las campanadas de la Iglesia Santísima Trinidad, a dos cuadras del Candilejas, fueron el preámbulo para la llegada de las divas. A todo brillo, con Pretty Woman a todo volumen y conduciendo un scooter, Las Cocot Recargadas desplegaron su aparición en la escena rufinense.
Saludaron antes de ingresar al Candilejas a todos los presentes de esquina a esquina y así se dio apertura para que los 300 espectadores que completaron la sala -con las entradas anticipadas agotadas- se acomoden.
En la sala
Con un chascarrillo en off comenzó el conteo desde diez hasta cero con las luces de la sala apagadas para que sobre el escenario un asistente coloque un disco y suene Sacá la mano Antonio para que se luzcan bailando con brillos verdes y naranjas.
Con la misma modalidad de sketch con intervalos de cuatro minutos, en los que la intervención de Ana Rabaglio cobra mayor protagonismo que en la primera edición, el público se anima con este personaje ya entrañable "haciendo tiempo" y dejando a punto el escenario.
Los Pimpinela hicieron su aparición con una pareja en cortocircuito queriendo recuperar su relación y haciendo descoser de risa a todo el público. En tanto, Claudia Zapata se incorporó al staff como la ama de llaves y después como otro masculino en escena, con muy buena aceptación.
Para las 21.45 ya habían transcurrido tres propuestas que tentaron a la mayoría y seguiría la Bomba Tucumana con su Pollera Amarilla al son de …"negrito cuando yo bailo si bailo de noche y día. Luego, Isabel y Maribel Pantoja bailó y peleó sobre el escenario con atuendo gitano y castañuelas desenfrenadas, lidiando con complicaciones de sonido que alteraron sus nervios.
A las 22.30, un mago y su secretaria hicieron de las suyas con la vívida agitación del público, pero ese apoyo no fue suficiente para que su truco saliera bien. De nuevo, en el rol de mago, la presencia de la nueva incorporación al elenco.
El cierre esperado llegó a las 22.35 con un teatro de sombras y una melodía que hablaba de perder el miedo y mantener la fe. "Para crecer hay que cambiar de vida y volver a nacer… llenar el alma de ilusiones nuevas, cambiar el aire para después", versaba la letra acariciando con sensibilidad cada final, como una marca registrada de este dúo humorístico.
Con todas las localidades agotadas y una recepción del público siempre abrazadora, Las Cocot Recargadas volvieron a hacer un éxito que suma dos funciones más el próximo fin de semana. Rufino apoya el teatro local y aplaude de pie, una vez más, a este par de soñadores dándolo todo arriba y abajo del escenario, eligiendo ser quienes quieren ser.