Pedirán que los perros de Cecilia Strzyzowski busquen rastros
La estrategia de la querella será pedir nuevos allanamientos de los que participen las mascotas de Cecilia Strzyzowski, en lugares estratégicos, como el campo y la casa del clan Sena, para ver si encuentran algo de relevancia. También requerirán la intervención de perros especializados en búsquedas de restos humanos.
En su perfil de Instagram, Cecilia se definía como “mamá” al hablar de sus mascotas. Lo mismo dice su madre, quien los llama sus “nietos”.
Además, la querella volverá a pedir allanamientos en el campo, en la casa y, sobre todo, en la zona donde estaban construyendo una piscina.
Hasta el momento se encontraron tres pedazos de dedos humanos incinerados en un lecho del Río Tragadero, al igual que un dije que fue reconocido por Gloria Romero, mamá de la joven de 28 años que fue vista por última vez la mañana del 2 de junio cuando entraba a la casa de Emerenciano Sena y Marcela Acuña, junto con su esposo, César Sena.
Los hallazgos se concretaron después de la declaración clave de uno de los siete detenidos en el expediente, Gustavo Obregón.
La sospecha de los investigadores es que Cecilia fue asesinada el mismo 2 de junio en la casa de los Sena, ubicada en la calle Santa María de Oro 1460, y que sus restos fueron torturados y quemados en el campo.
La declaración clave
Obregón dijo ante los integrantes del Equipo Fiscal Especial (EFE), Jorge Cáceres Olivera, Jorge Gómez, Nelia Velásquez, que él y César Sena abandonaron dos bolsas en el Río Tragadero, en proximidades de la chanchería perteneciente al clan Sena.
“Agarramos el camino que lleva hacia la curva y, antes de la curva, nosotros dejamos el auto. Estacionamos ahí, bajamos con las bolsitas, cada uno llevaba una bolsa, y bajamos por un camino, que es como un sendero, que está al costado izquierdo al campo Rossi, que baja hacia el río”, declaró.
El hombre, imputado por “homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas en calidad de partícipe secundario”, añadió: “Llegamos a la costa del río, César desata una y larga todo el contenido de la bolsita en el límite del agua y la costa. Y después con la otra bolsita, lo mismo, la desata y larga el contenido en el límite del agua y la costa. Finalmente, César deja las dos bolsitas en la orilla del río, y le prende fuego a las dos bolsitas, con un encendedor”.
En otro tramo de su declaración, contó que otros objetos fueron abandonados en el barrio Emerenciano Sena la noche del 6 de junio, luego de que César Sena le pidiera que lo llevará a buscar algo a la casa de sus padres, la calle Santa María de Oro, de donde salió “con un bolso o valija” y “una mochila”.
“Era una valija que creo que tenía manija, no recuerdo color, y no sé si tenía rueditas. La pusimos en el asiento de atrás de mi auto, tanto la mochila como la valija, subimos al auto (…) Llegamos al barrio, y en la última calle asfaltada del barrio, que se llama Colo, sería la San Martín, la que sigue, César me dice ‘frená acá’, se bajó y ahí en la banquina nomás bajó la mochila y la valija y ahí nomás prendió fuego con un encendedor, bien al lado del cordón”, detalló.
Además de esos restos y objetos, el pasado sábado fueron hallados trozos de una mochila quemada en la casa de la familia Sena, en la que se presume que fue la escena primaria del crimen de Cecilia, donde también se secuestraron teléfonos celulares y cuchillas para faenar animales.
En el lugar del hallazgo trabajaron alrededor de cinco horas peritos de Gendarmería Nacional Argentina (GNA) que utilizaron un georradar en busca de los restos de la víctima.
Tras el operativo, los gendarmes se trasladaron al barrio Emerenciano, para trabajar específicamente sobre menos de cien metros de la calle José María Paz que fue pavimentada tras la desaparición de Cecilia, ya que una de las hipótesis es que los asesinos pudieron haber esparcido los restos debajo del asfalto.
Por el presunto femicidio de Strzyzowski permanecen detenidos su esposo, César Sena; los padres del joven, Emerenciano Sena y Marcela Acuña; el chofer y asistente del matrimonio, Gustavo Obregón; su esposa, Fabiana González; el casero del campo de los principales sospechosos, Gustavo Melgarejo, y su pareja Griselda Pereira.
Para los investigadores judiciales, César Sena fue el autor material del femicidio de Cecilia, y sus padres, coautores.
Los otros cuatro detenidos están acusados como partícipes del hecho, aunque esa imputación podría ser modificada en los próximos días por la de “encubrimiento agravado”, con penas más leves.
Para el jueves próximo está previsto que los investigadores judiciales pidan las prisiones preventivas de los siete acusados.