Subsecretaria de Control Institucional
Raquel Cosgaya: "No debería haber en la policía ni un solo caso de enriquecimiento ilícito"
En la provincia de Santa Fe hay 110 investigaciones iniciadas por esa causa, e involucran tanto a efectivos en actividad como retirados. "La baja remuneración no justifica cometer este delito", dijo la funcionaria.
En el último año, la Agencia de Control Policial de Santa Fe realizó 118 allanamientos con la detención de 81 personas; de ellas, 59 son policías. Actualmente, 312 agentes se encuentran bajo sumario, en tanto que 34 pasaron a disponibilidad. Según los mismos datos oficiales difundidos por el Ministerio de Seguridad, se generaron 110 expedientes por presunto enriquecimiento ilícito; 32 corresponden a personal policial retirado y 78 a policías en actividad.
En diálogo con El Litoral, la subsecretaria de Control Institucional, Raquel Cosgaya, descartó que la baja remuneración sea una justificación para cometer dicho delito. Aludió al trabajo de la Agencia, y la necesidad de reforzarla con más personal y logística.
- ¿Qué dato destacaría como el más significativo en este año de trabajo?
- Creo que lo más significativo es el mayor número de procedimientos que se han realizado en función de las denuncias que se van recibiendo ya sea de modo personal pero mayoritariamente, en forma anónima. También es para destacar las inspecciones que se han hecho y que permitieron detectar faltas para establecer sanciones y para corregir determinadas conductas cuando quien está involucrado es un efectivo policial.
- ¿Las actuaciones surgen por las denuncias recibidas o por investigaciones que la Agencia realiza?
- Por ambas vías, es decir, realizamos investigaciones e inspecciones mediante las que podemos detectar acciones correctas o incorrectas de la Policía. Estamos hablando siempre del orden administrativo que, eventualmente, también puede derivar en un delito. Si derivan en un delito, se le da intervención directamente a la Fiscalía que obra en consecuencia. El resto de las actuaciones se generan a través de las denuncias que recibimos y que generalmente son anónimas. En este sentido, destaco que existen pocos recursos humanos; poca logística. Por eso mismo, muchas veces la respuesta no es total al número elevado de denuncias que recibimos; eso nos lleva a hacer una selectividad de aquellos hechos que resultan de mayor gravedad.
- ¿De cuántas denuncias estamos hablando?
- El número asciende a 1000 denuncias en un período de menos de dos años, que es desde cuando asumimos. De esos procedimientos hemos tenido 59 policías detenidos y 22 civiles, que suelen estar involucrados en los mismos hechos que los policías.
- ¿Cuál es la falta o delito más frecuente cometido por el efectivo policial?
- En cuanto a las faltas, siempre se trata de cuestiones reglamentarias incumplidas; eso hace a la fase administrativa. En cuanto a delitos, suele ser incumplimiento de los deberes de funcionario público; muchas veces eso está en el límite entre la falta administrativa y el delito de tipo penal, donde ya existe una suerte de dolo e intencionalidad y no solamente el presunto desconocimiento de cómo llevar adelante una determinada acción en forma correcta. Aparece, a veces, el tema drogas, pero de ello se da cuenta la Justicia Federal; y algunos hechos de corrupción. Pero estoy hablando de una parcialidad pequeña de la policía; hablamos de los policías que están al alcance de la investigación de la Agencia de Control porque también la Jefatura de Policía hace sus investigaciones.
- ¿Hay más de cien expedientes iniciados por presunto enriquecimiento ilícito?
- Sí, el tema del enriquecimiento es una investigación engorrosa porque lleva mucho tiempo realizarla y porque depende de las respuestas que deben dar otros organismos administrativos, que a veces no son tan rápidas. Entonces lleva un tiempo bastante prolongado hacerlas. De todas maneras, se han conseguido resultados positivos tanto en orden a tener que cerrar una investigación abierta por una determinada sospecha que no arrojó nada, como aquella que efectivamente confirmó la existencia del delito.
- ¿Cómo evalúa esa cantidad de causas? ¿Es un número elevado?
- Mi respuesta va a ser subjetiva; es un número alto porque desde mi punto de vista, no debería haber ninguna. Y de existir, tendría que ser en un número mucho menor. De todos modos insisto en que ésas son las investigaciones abiertas pero no todas arrojaron un resultado positivo en orden al delito.
- ¿Suelen ser policías de alto rango los que aparecen involucrados en las causas por enriquecimiento? ¿Es la mala remuneración una justificación?
- Voy a contestarlo nuevamente en forma subjetiva; la baja remuneración no justifica el delito. Pero a veces hay otros criterios no para justificar la irregularidad, sino que dan cuenta de una permisividad en ciertas conductas que no son las correctas.
- ¿La Agencia tiene recursos humanos suficientes?
- Necesitamos refuerzos; la Agencia necesita de recursos humanos; incluso la Subsecretaría necesita un mayor recurso humano y logístico. Cada vez es mayor la demanda de la actuación de la Agencia por parte también de los fiscales; muchas veces intervenimos en cuestiones que no son estrictamente policiales, sino que se afecta nuestro personal para hacer otro tipo de investigaciones o actuar en un allanamiento o en detenciones que no son específicamente de policías.
- ¿Con cuánto personal cuenta la Agencia?
- La Agencia hoy tiene 150 efectivos, y sabe usted mejor que yo de la extensión que tiene la provincia. Lo que sí se ha logrado es la presencia de la Agencia en Reconquista, Venado Tuerto y sur en Rafaela. Son pequeñas unidades pero que contribuyen a reforzar el accionar de la Agencia para dar una respuesta más inmediata.