Refugio Canino: “El 90 por ciento de los perros en la calle tienen o tuvieron dueño”
[vc_row][vc_column][vc_column_text]El Refugio Canino de Venado Tuerto funciona desde 1999, en el predio ubicado en calle Matheu y Alberto de Brouckere (calle ancha), donde albergan unos 280 perros con distintas realidades, desde cachorros hasta aquellos que presentan alguna incapacidad. Hace unos días a través de un comunicado titulado “Cierren los refugios”, buscaron visibilizar el trabajo que realizan y cuánto tiempo dedican a esta labor que no debiera generar críticas.
Desde Sur24 contactamos a la instructora canina Claudina di Martino, encargada de prensa y difusión de la institución y comentó sobre la cotidianidad del lugar. “El refugio es privado y pertenece a la Fundación Trewa, en un predio de una hectárea y media, allí tenemos 21 caniles al aire libre donde viven la mayoría de los perros y después hay dos sectores con caniles más chicos con ciertos animales que no conviven con otros o que tienen alguna discapacidad y también un área de aislamiento que es donde se albergan hembras preñadas, perras con sus crías o aquellos que se recuperan de alguna cirugía y necesitan una atención específica. Y tenemos otra parte donde se mantienen bajo cuidado a los cachorros para que no tengan contacto con el resto”, enumeró.
En total, en la actualidad la cantidad de animales varía entre los 260 y los 280. Para la atención de ellos hay tres empleados que se ocupan del mantenimiento, dos veterinarias, una de ellas es Carolina Peisino que es la directora del lugar. A ellos se suman los colaboradores como Claudina, encargada de la parte comunicacional.
Al respecto de cómo llegan los perros al refugio, Di Martino decía: “Puede que la gente se presenten directamente en el predio o últimamente nos están contactando a través de las redes sociales (principalmente Facebook e Instagram) y a partir de allí se habla con el equipo y se ve el caso. Por lo general se le da prioridad a aquellos animales que no pueden valerse por sí mismos, es por eso que siempre debemos tener un 5 por ciento de lugar vacío para estos casos que requieren un tiempo de aislamiento”.
En promedio tienen al menos un pedido por día para refugiar a un perro. A veces pueden resolverlo brindando asesoramiento y otras atendiendo la inquietud, aunque aclaró que como entidad al no contar con vehículo“no retiramos animales de la vía pública”.
Ayuda mutua con el Imusca
Sobre las amplias áreas en la que pueden accionar, habló también de la “buena relación de colaboración” que mantienen con el municipio a través del Instituto Municipal de Seguridad y Convivencia Animal (Imusca) “con quienes generalmente coordinamos tareas de vacunación antirrábica y lo que es castración se hace en el quirófano que tenemos en el refugio”. “Por ejemplo el Imusca encuentra algún animal y se lo ingresa al refugio por eso es una colaboración constante”, contaba.
“Ellos son la autoridad y capacidad de control y como nosotros no podemos actuar cuando los perros tienen dueños, en esos casos están ellos. Nosotros solo tenemos el lugar para alojar los animales que necesitan un hogar”, aclaraba.
Un trabajo que busca la adopción responsable
En la actualidad el Refugio Canino se solventa con la ayuda mensual de sus colaboradores y de donaciones que reciben para cubrir los tantos gastos que requieren los casi 300 animales. El más significativo son las 4 toneladas de alimentos balanceados que se necesitan por mes.
En cuanto al proceso de adopción, Claudina manifestó que un 90 por ciento van dirigidas a cachorros. “Sabemos que los adultos o los que tienen alguna discapacidad son muy difícil de ubicar en un nuevo hogar”. A pesar de ello, salvo el año pasado, por lo general la cantidad de adopciones en el refugio se equipara a los perros que tienen alojados. “Se va renovando cada año, pero la mayoría de los cachorros que ingresan están un mes o dos y se van”.
Una vez que son adoptados, se trata de hacer un seguimiento, ya sea por redes sociales o desde Imusca cuando son castrados o vacunados se hace un relevamiento de aquellos que salieron del Refugio.
“Una de las condiciones del contrato de adopción es que en el caso de los adultos si la familia o el perro no se adapta pueden volver, pero esto se hace con aquellos animales ya grandes que quizás les cueste familiarizarse”, explicó.
“La realidad es que hay abandono porque los dueños no los castran y los dejan muchas veces porque tienen una condición física diferente. Y es en ese momento cuando se revaloriza el trabajo del refugio; ojalá no hubiera refugio y no tuviéramos la necesidad de rescatar perros pero lamentablemente la realidad es que hay perros que necesita de una institución como la nuestra”, expresó la instructora canina.
Falta de consciencia y educación
Para cerrar, Di Martino reflexionó: “Hay un muy buen concepto del refugio, todavía tenemos que desterrar una vieja costumbre de que es la perrera municipal donde matan a los perros, porque no es así: es un refugio privado que nos cuesta muchísimo mantener y tenemos la suerte de tener al Imusca que tiene a su cargo la parte de control y se agradece que a través de los distintos gobiernos esa política siempre se mantuvo. Aunque es verdad que falta mucha educación o concientización para ciertos cuidados”.
En esta parte sostuvo que hoy “el 90 por ciento de los perros que se ven sueltos en la calle tienen o tuvieron dueño porque un animal no pasa el año de edad si no tuvo una persona que lo cuide. Y aún nos falta una ‘patita’ que es multar este tipo de irresponsabilidades, pero lo bueno es que Venado es una ciudad perrera y colabora”.
Horarios del Refugio Canino para atención y adopción (respetando los protocolos)
-Lunes a viernes, de 9.30 a 17.30;
-Sábados, domingo y feriados, de 14.30 a 17.30.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]