“Esperá, ya te digo como salió. ¡Ganó la partida!”, exclama al teléfono Darío Cáceres, el papá de Salvador. Salvador le había terminado de ganar al campeón uruguayo. El niño oriundo de Recreo está compitiendo en el Torneo Sudamericano de Ajedrez (que culmina el martes 6 de diciembre), en el que se miden los mejores jugadores de América del Sur, con participantes de Chile, Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia, entre otros. Y es el único representante oficial de la Argentina en su categoría (Sub. 8 años).
Salvador, el “Messi” del ajedrez en Santa Fe, busca dar su mejor jugada en el Sudamericano
Reconocido a nivel provincial y nacional por sus logros -fue elegido Deportista Revelación en la Fiesta Provincial Del Deporte 2022-, Salvador Cáceres ya es a estas alturas una suerte de “Messi” del ajedrez, pasión que comparte con su padre, que también es jugador y entrenador del niño. La diferencia es que el crack del fútbol mundial se desempeña en una cancha de césped, y hace las gambetas más increíbles; y Salvador juega en un tablero con 64 casillas y alfiles, peones, reyes y reinas. Hace jugadas magistrales para dejar sin opciones a sus contrincantes. Entre uno y otro, hay talentos similares.
El niño clasificó directamente al Sudamericano cuando salió Campeón Argentino de Ajedrez Sub. 8. En esa categoría, es el único representante del país en Asunción, aunque en otras categorías hay muchos más representantes del país. Y de la provincia hay varios (de Rosario, por ejemplo) que son “jugadores extras” (deben pagar un canon mayor por competir).
A la par de su riguroso entrenamiento, participó de varios torneos nacionales para llegar mejor preparado al Sudamericano. Incluso jugó contra personas mayores de edad, en un torneo realizado; se midió con jugadores de más de 60 años, por dar un ejemplo, y les ganó. Luego de todo esto, “llegamos a este predio olímpico de Paraguay. Es una cancha llena de mesas de ajedrez, y estamos todos los papás haciendo el aguante”, dice Darío Cáceres a Sur24.
El “entrenamiento emocional”
“¿Cómo se trabajan las ansiedades y los nervios? Mirá, es parte del entrenamiento que realizamos. Pero Salvador lo está tomando con naturalidad, ya está más acostumbrado. A medida que vaya tomando confianza, le irá mejor en el torneo”, se entusiasma su papá.
Una hora antes del inicio de la partida, Salvador hace una entrada en calor, como si fuera un partido de fútbol. Luego, ejercicios de ajedrez con nivel de dificultad bajo, para que el cerebro “entre en calor”. Y después, niveles más complicados para que el cerebro ya esté bien activado.
El objetivo de máxima es ganar el título sudamericano en su categoría. “Si llegara al podio, entre los tres clasificados, la Federación Internacional de Ajedrez le daría el título de Candidato a Maestro. De ocurrir eso le faltaría un requisito, que es el puntaje. Pero el título de Candidato sería un gran avance para él. Y si sale campeón, clasificará al Mundial, al Panamericano, al Sudamericano, todo para el año que viene”, explica Darío Cáceres.
Salvador y su padre viajaron juntos en auto hasta Asunción. Gracias a la colaboración económica de tres legisladores provinciales, alcanzaron a comprar 100 dólares. “Y el resto nosotros: todo a pulmón, hicimos beneficios, vendimos cosas, sacando préstamos… Todo para bancar esta actividad. Como deporte es complicado llevar esto adelante, pero la pasión es más fuerte”, concluye el padre. De conocer esta historia de vida, sacrificio y esfuerzo, Lionel Messi se sentiría orgulloso.