Secuestraron un kilo de una sustancia conocida como “la droga del sexo”
La Aduana encontró en una encomienda postal un kilo de una sustancia de estupefaciente gamma-butirolactona (GBL), también llamada éxtasis líquida o “droga del sexo”, proveniente de los Países Bajos. El hallazgo se dio en las oficinas de las Encomiendas Postales Internacionales ubicada en el barrio de Retiro.
Cuando el envío estaba por ser retirado, las autoridades procedieron a la apertura de la caja y visualizaron dos frascos de removedores de pintura transparentes, similares a un gel líquido, que fueron sometidos al analizador portátil de sustancia TruNarc, arrojando resultado positivo de la sustancia GBL.
También informaron que el kilo/litro de GBL en el mercado vale unos mil dólares, o sea, 337.000 pesos al cambio del dólar libre del día. En la calle, según los investigadores, se vende en dosis de 10 a 30 mililitros por 10 o 30 dólares, respectivamente; o sea, entre 3.370 y 10.110 pesos.
Qué es la “droga del sexo”
Esta sustancia se comercializa comúnmente en estado líquido o en gel. Por ello, suele consumirse de manera oral, aunque se encuentran reportes de quienes la administraron vía endovenosa e incluso vía rectal.
Tras la ingesta, una vez dentro del organismo, la gamma-butirolactona se transforma casi inmediatamente en ácido gamma hidroxibutírico, sustancia depresora del Sistema Nervioso Central, que posee un efecto dual según la dosis administrada.
Cuando es a bajas dosis, predomina una acción estimulante:
- Euforia
- Estado de alerta
- Sensación de embriaguez
- Estimulación sexual
- Buen estado de ánimo
En tanto que a altas dosis, superiores a los cuatro gramos, presenta un efecto fuertemente depresor:
- Ansiolítico
- Inductor del sueño y del estado de confusión y desorientación
- Depresor de la sensibilidad táctil y sedativo
Por estos efectos, la gamma-butirolactona también es conocida como “la droga del sexo”, ya que por sus características incoloras e insípidas puede ser fácilmente incorporada a bebidas sin que la víctima note su presencia. Incluso, su efecto sedante se potencia si se ingiere junto con alcohol.
La dosis máxima a suministrarse para percibir los efectos deseados y la dosis mínima requerida para que esta sustancia sea letal, se encuentran muy próximas entre sí, por lo cual es muy fácil incurrir en una sobredosis con potencial riesgo de muerte.