Entrega de diplomas
Segundas lecturas de un acto: gesto de Maximiliano Pullaro para con el senador Michlig
Tercera foto de un vínculo que importa en el oficialismo: primero en Santa Fe la Vieja, luego en un sanatorio por chequeos de rutina y ahora en el Paraninfo de la UNL. Muestran al gobernador electo con el arquitecto de Unidos para Cambiar Santa Fe, que dijo no a la chance de ser su ministro político.
Ivana Fux / Luis Rodrigo
El gobernador electo, ahora con diploma, Maximiliano Pullaro, eligió poner a su lado al senador por San Cristóbal, Felipe Michlig, al subir al escenario del acto organizado por el Tribunal Electoral de la Provincia en el que se entregaron esas credenciales a los ciudadanos elegidos por los santafesinos.
Obviamente, en el momento en que recibió su rollo el diputado provincial radical fue cuando más flashes relampaguearon en el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral, en medio de una jornada lluviosa. Pullaro se ocupó de tomar del brazo al presidente del Comité Provincial de la UCR, que se encontraba en la fila siguiente a espaldas de la que ocupó la fórmula ganadora de Unidos para Cambiar Santa Fe con Pullaro y la vicegobernadora electa Gisela Scaglia en lugar más destacado de la platea.
El ex ministro de Seguridad de Miguel Lifschitz pidió al legislador que lo acompañara a subir las escaleras al estrado, bajo el siempre notable cielo raso morisco que recuerda la belleza matemática de las formas geométricas. Una vez más, Pullaro disipó cualquier duda sobre su relación con quien no será su ministro de Gobierno. Para ambos, en términos políticos, fue un día radiante.
Se trata de un gesto, el tercero en realidad, que debe ser debidamente anotado en las libretas de los periodistas y los observadores de lo que sucede en Santa Fe.
Michlig dijo en una entrevista en exclusiva publicada por El Litoral el 11 de este mes que había declinado el ofrecimiento hecho por Pullaro porque prefería honrar su compromiso con los sancristobalenses y desde entonces se sucedieron entre ambos tres fotos: primero en Santa Fe la Vieja, donde Pullaro presentó su gabinete; luego, en un sanatorio donde el titular del radicalismo provincial se hizo chequeos de rutina, y ahora en el Paraninfo de la UNL a la hora de los diplomas.
La sucesión de imágenes importa en el oficialismo santafesino, compuesto bajo lo que parecía apenas un eslogan en 2022, formar un "frente de frentes" con lo que quedaba del Frente Progresista, Cívico y Social más Juntos por el Cambio. Otros dirigentes de los partidos que componen la coalición de radicales, socialistas y macristas fueron claves para la construcción de la fuerza que ha ganado, pero Michlig fue el arquitecto. Sin dudas junto a otros radicales como el propio Pullaro y José Corral entre otros.
Abrazos y nubarrones
Por otra parte, a propósito de nubarrones y sorpresas climáticas, llamó la atención la ausencia del gobernador Omar Perotti que se dice que tuvo otros asuntos en agenda y también del ex gobernador socialista, Antonio Bonfatti. ¿No estarán juntos?, bromeó un cronista al unir a dos dirigentes que ciertamente han perdido poder en las urnas, aunque fueron elegidos para ocupar una banca en la Cámara de Diputados.
Además, también sobre la futura Cámara baja, fue especial el momento en el que el socialista díscolo Rubén Giustiniani (con su propia fuerza, Igualdad y Participación) recibió el diploma que cuestiona otro diputado provincial, Fabián Palo Oliver del Frente por la Soberanía. Y que piensa judicializar la cuestión vinculada al piso para calcular el reparto de las 22 bancas de la oposición. (28 son para la nómina más votada, en este caso la que encabezara la socialista Clara García).
El ex intendente de Santo Tomé sostiene que él, segundo en esa lista, debe ocupar la banca número 41 que las autoridades electorales han concedido al ex senador nacional por Santa Fe, que eligió compartir honores con la diputada saliente Agustina Donnet. Dos detalles fueron sobresalientes: hubo una barra propia que festejó la entrega de las credenciales a Giustiniani y también un abrazo sentido entre el legislador reelecto y el presidente del Tribunal y de la Corte, Daniel Erbetta.