Primero Venado lo hizo de nuevo y ratificó su poderío
En otra formidable elección, escrutado el 96 por ciento de los votos, la coalición oficialista Primero Venado, de la mano del concejal Juan Ignacio Pellegrini, con un mayor caudal de electores -orilló el 68% del padrón- superó su notable marca del 50% de los sufragios de las primarias, trepando nada menos que el 55% (23.360 votos), y consiguió los objetivos trazados: triunfar por un holgado margen en las generales del 14N y asegurar las tres concejalías que le permitirán al intendente Leonel Chiarella gobernar con un poder político fortalecido en la segunda mitad de su mandato, y con un fuerte apoyo legislativo, dado que contará con cinco ediles sobre diez: los radicales Juan Ignacio Pellegrini y Mariana Iturbide; los socialistas Leonardo Calaianov y Nahuel Pasquinelli, y la macrista Verónica Ruiz.
El resultado no sorprende porque Primero Venado, que partió con una base envidiable de votos, siguió trabajando mejor que nadie en los últimos 45 días, con fuerte concepto de trabajo en equipo, y con tanta intensidad en la gestión y en la comunicación, como si el desafío hubiese sido revertir una derrota.
Con el lastre de la pandemia y esperables dificultades para hacer pie en los inicios, Chiarella y los suyos fueron a lo seguro, dieron prioridad a la fórmula del ordenamiento y la transparencia, y supieron hacer diferencia, sobre todo en el contraste con el PJ local aún convaleciente luego de un doloroso revés.
Con tamaño espaldarazo, la gestión municipal, aun cuando no cuente con la simpatía de los gobiernos nacional y provincial, deberá emprender los grandes proyectos estructurales que necesita una ciudad que, en varios aspectos, aun luce estancada en el tiempo, y que hoy reclama transformaciones profundas.
Seguramente el lanzamiento del Plan Estratégico 2030, el Área Recreativa Norte y las nuevas urbanizaciones, entre otras iniciativas, sobresaldrán en las líneas directrices de una gestión que, a partir de 2022, se distinguirá por un Chiarella empoderado, que este domingo se erigió por peso propio en el candidato a la reelección, sobre todo luego de arriesgarse a plebiscitar su desempeño en este comicio, donde no vaciló en militar a la par con Pellegrini.
Desde el punto de vista de sus componentes individuales, además de la UCR, en Primero Venado también celebran el Partido Socialista, que tenía a Calaianov y suma a Pasquinelli, y el PRO, que compensa la salida del Concejo de Francisco Paris con el ingreso de Verónica Ruiz.
“Batacazo” de Taddia
El otro gran ganador de la fecha resultó ser Bruno Taddia, con Ciudad Futura, quien superó sus propios números de la primaria, con casi el 18% (7.529 votos), se convirtió en su debut en la segunda fuerza más votada de Venado Tuerto (por encima del PJ), y consumó en las generales el prometido batacazo en las urnas, que fue mucho más que un eslogan.
Con un trabajo de base de cuatro años y meritoria creatividad en el diseño de la campaña, la agrupación de fuerte impronta juvenil se plantó con firmeza en el escenario político local y desde diciembre promete ejercer políticas disruptivas en Sarmiento y Alem, a prudente distancia de los bloques tradicionales, y con el confeso objetivo de “refrescar la discusión”.
Roma salvó la ropa
El Frente de Todos, con la candidatura de Sebastian Roma, se recompuso en las generales y al menos, con el 15 por ciento (6.306 votos), consiguió retener la banca que cede Patricio Marenghini por final de mandato. Ante el crecimiento de Primero Venado y Ciudad Futura, también el peronismo necesitó sumar este domingo respecto de las PASO, y lo hizo, seguramente con la ayuda de una constante presencia de los gobiernos nacional y provincial en los últimos tiempos en la ciudad, con obras y anuncios.
Sin embargo, el Frente de Todos sufre la ausencia de liderazgos desde la salida de José Freyre del Municipio y su ingreso a la Provincia. No será fácil lograr una nueva síntesis en el corto plazo, más aún luego de las tensiones en que entrará el PJ en el país y en la provincia tras los resultados de anoche.
Roma, que se sumará al bloque legislativo de Emilce Cufre y Pablo Rada, logró evitar la catástrofe política que hubiera significado no poder retener la banca; y desde el mes entrante el desafío de ensayar una oposición sensata y filosa, aun en desventaja numérica.
Nuevo Concejo Municipal
El 10 de diciembre asumirán Juan Ignacio Pellegrini, María Verónica Ruiz y Nahuel Pasquinelli (Primero Venado); Bruno Taddía (Ciudad Futura) y Sebastian Roma (Frente de Todos).
Quienes continúan hasta 2023 son Leonardo Calaianov y Mariana Iturbide (Primero Venado); Pablo Rada y Emilce Cufre (Frente de Todos) y Darío Jeannot (Venado Renace).
El oficialismo, con cinco bancas, será la primera minoría, seguido por el Frente de Todos con tres, y Ciudad Futura y Venado Renace con una banca cada uno.
Son cuatro los concejales que no continuarán a partir del 10 de diciembre:
Liliana Rostom (Nuevo Horizonte): Ya comenzó a dar sus primeros pasos como funcionaria del Gobierno provincial. Se convertirá en la representante del área de Infraestructura y Hábitat en el sur santafesino.
Francisco Paris (PRO): Podría sumarse al Gabinete municipal en algún sector vinculado a su profesión (veterinario). Su incorporación también permitiría seguir alimentando el acuerdo establecido entre el oficialismo y Juntos por el Cambio, bajo el formato de Primero Venado.
Patricio Marenghini (FdT): Si bien integró la lista del Frente de Todos en tercer lugar, en el último tiempo se lo vio bastante alejado del mundo político y más dedicado a su profesión (ingeniero agrónomo). Hoy todo indica que se volcará a la actividad privada, aunque el escenario podría cambiar si recibiera alguna propuesta del gobierno provincial.
Santiago Meardi/Mabel Caula (Primero Venado): La incorporación de Meardi en la Secretaría de Desarrollo Productivo motivó que asumiera la socialista Caula, quien terminará el mandato como concejala y podría retomar su función dentro del Departamento Ejecutivo como coordinadora de Políticas de Adultos.
Más electores, pero no tanto
En las antípodas de la tarde caótica del sábado, con tormenta de lluvia y viento, el domingo de elecciones discurrió calmo y soleado, contribuyendo en todas las escuelas a una votación más ágil, con mayor flexibilización en los protocolos sanitarios y autoridades de mesa que cumplieron sus obligaciones. Sin embargo, el aumento del número de electores no estuvo a la altura de las expectativas en Venado Tuerto, que apenas creció del 64 al 67,67% respecto de las PASO.
Nacionalizar la boleta única
Casi como al pasar, luego de la emisión de su voto en el Colegio Normal, el senador provincial Lisandro Enrico, entre algunos conceptos generales, deslizó la necesidad de que las elecciones nacionales, así como ocurre con las provinciales, implementen el sistema de boleta única. “Tenemos que elevar un pedido desde el interior para que no siga votando de la manera tradicional”, sugirió el legislador boinablanca y elogió el vigente “modelo santafesino”.
Cabe acotar que en el país, la Cámara Nacional Electoral ya organiza comicios con boleta única para los residentes en el exterior y los presos. En cambio, las actuales autoridades nacionales siguen negando esa posibilidad para los argentinos que residen en el país y gozan de libertad.