Teodelina: el homicida de Francina sería un chico de 15 años
Si bien en los primeros minutos de este lunes circuló el rumor de que el asesinato de Francina Arroyo, de 25 años, ocurrido pasada la medianoche en Teodelina, había sido cometido por un menor de edad, según manifestaciones de dos jóvenes que estaban en inmediaciones del Hospital adonde se trasladó en grave estado a la joven agredida, poco después se hizo cargo del hecho Jael A., una joven de 22 años, quien llamó por teléfono a la Comisaría 7° dispuesta a entregarse.
Esa fue la versión que se sostuvo durante la mañana, hasta que pasado el mediodía la causa dio un brusco giro en su curso, cuando trascendió que el homicida sería un chico de 15 años de edad, hermano de Jael, la cual en un primer momento se había adjudicado el crimen de Francina en un presunto intento de encubrimiento.
La denuncia la recibió personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), y siguiendo directivas del fiscal Damián Cassullo, se comunicó con la Comisaría 6° de Villa Cañás para que sus agentes se constituyan de inmediato en el domicilio del acusado, sito en la vecina localidad. Al apersonarse en la vivienda, la madre manifestó a los policías cañaseños que su hijo estaba en la casa, con varios golpes, y que no oponía reparos a su traslado. En consecuencia, fue derivado al Hospital para brindarle las primeras curaciones.
Por su parte, efectivos de la AIC, junto al fiscal, se dirigieron al Hospital de Villa Cañás y libraron comunicación telefónica con la secretaria del Juzgado de Menores, Nora Ferrando, quien ordenó que se notifique al quinceañero de la causa por homicidio, se convoque a personal de Policía Científico Forense a los fines de proceder al secuestro de las prendas de vestir, y se lo interne en el mencionado centro médico “en forma provisoria para resguardo de la integridad de sus derechos y a disposición de esos estrados”, según reza el parte policial.
La víctima, Francina Arroyo, fue atendida en el hospital de Teodelina, pero los médicos no lograron revertir el grave cuadro ocasionado por la salvaje agresión con un arma blanca en la zona del cuello.