UCR y aliados crecieron en las ciudades y el PJ en las comunas
El domingo 14N, en el departamento General López sobresalieron las categóricas victorias oficialistas en las dos ciudades más populosas: Venado Tuerto y Firmat. En la primera, gobernada por el intendente radical Leonel Chiarella, la lista encabezada por Juan Ignacio Pellegrini, en el estreno de Primero Venado (¿el embrión de Primero Santa Fe?), con el 55 % de los votos, conquistó tres de las cinco concejalías y desde diciembre controlará la mitad de las diez bancas en Sarmiento y Alem.
Y en la Capital Provincial de la Maquinaria Agrícola, la oferta liderada por Claudio Garziera, defensora de los intereses del intendente firmatense Leonel Maximino, con casi el 38 %, logró dos de las tres bancas en juego y contará con amplia mayoría en el Concejo, cuya nueva composición será la siguiente: Griselda Valdecasa, Claudio Garziera, María Luz Budassi (asumirá en reemplazo de la fallecida Marcela Peotta) y Silvina Cocitto, todos del Frente Progresista; y Nicolás Rufine y Janina Pellegrini, de Firmat Futura (Frente de Todos).
Distinto es el escenario en las restantes ciudades, Villa Cañás y Rufino, donde los intendentes Norberto Gizzi y Natalio Lattanzi asistieron, incómodos, a festejos ajenos.
En los pagos de Mirtha Legrand, Juntos por el Cambio se impuso con holgura (cerca del 40 por ciento de los votos) abrochando el ingreso de dos concejales (Lisandro Vaccaro y Marisa Sánchez), mientras que el gobernante Frente Progresista, Cívico y Social obtuvo una banca para Ana Isabel Sarbach, con lo cual el nuevo Concejo tendrá tres ediles del FPCyS (Carlos Rabasa, Claudia Compañs y Ana Isabel Sarbach) y tres de JxC (Lisandro Vaccaro, Marisa Sánchez y Verónica Elisei).
Y en Rufino, el oficialismo de Juntos por el Cambio padeció el triunfo contundente del Frente Progresista, Cívico y Social, de la mano del demócrata progresista Federico Carballeira, con más del 46 por ciento de los votos. Y, desde diciembre, el intendente Lattanzi deberá gobernar con un Concejo compuesto por tres ediles del FPCyS (Federico Carballeira, Alejandra Cerutti y Walter Santo), dos de JxC (Norberto Verna y Gisela Reinoso) y una del PJ (Daniela Robles).
El común denominador en las cuatro ciudades es el retroceso del peronismo, en sus diversas variantes, que en Venado Tuerto -con Sebastián Roma- rescató la banca que arriesgaba y zafó del papelón (tendrá un bloque de tres ediles); en Firmat serán dos (conviviendo con cuatro oficialistas); en Rufino sobrevive Daniela Robles, y en Villa Cañás ninguno. Así, salvo en Venado, el PJ de General López cerró el 14N resignando una concejalía en cada una de las otras tres urbes.
En resumen, entre los 28 concejales que corresponden a Venado, Firmat, Rufino y Cañás, sólo seis serán del justicialismo desde el próximo 10 de diciembre. En cambio, Primero Venado; el FPCyS en Firmat y Rufino; y Juntos por el Cambio en Cañás, marcaron la diferencia y acapararon la mayor cantidad de bancas.
Comuna por comuna
En la recorrida por las 27 comunas del departamento, el dato saliente es que en 22 de ellas sus autoridades fueron reelectas (en María Teresa, Aarón Castellanos, San Francisco, Cañada del Ucle y La Chispa había lista única), siendo los triunfos más aplastantes los de Joaquín Poleri en Teodelina (2.804 a 451); Benjamín Gianetti en Wheelwright (2.808 a 705); y Gustavo Zaldo en Amenábar (834 a 162), siempre en función de los datos que arrojó el escrutinio provisorio, y a la espera de las cifras definitivas que se oficializarán este martes a las 17, tras lo cual los fiscales dispondrán de 24 horas para elevar eventuales reclamos.
En tanto, son cuatro las localidades que cambiaron de color político, y todas por escaso margen: Santa Isabel, donde Pablo Giorgis aventajó al oficialista Iván Bordón (1.453 a 1.484); Maggiolo, donde Jorgelina Aguirre, de Juntos por el Cambio, venció (725 a 614) a la candidata oficialista del Frente Progresista, María Candela Bellini; Cafferata, donde el jefe comunal Favio Rossi (FPCyS) cayó ante el joven peronista Joan Franco Stramesi (492 a 446); y Miguel Torres, en la que Gustavo Piccirilli perdió la Comuna ante el justicialista David Segura (140 a 134).
Un caso distinto es el de San Gregorio, donde Lisandro Travieso, del peronista Unidos por San Gregorio, tras el paso al costado de Roberto Alberdi, superó al también justicialista Vicente Losada (1.648 a 1.098), es decir que seguirá el mismo grupo político administrando la comuna, denominado Unidos por San Gregorio, pero con un nuevo presidente comunal.
Y un párrafo aparte merece el insólito caso de Diego de Alvear, cuyo presidente comunal continuará siendo Enrique Sagardía, pero ya no representando a Cambiemos (adonde había llegado a través del partido Fe del fallecido mandamás de la Uatre, “Momo” Venegas), sino al PJ. En esta oportunidad, el caudillo de pueblo superó al opositor Lázaro Sosa por 948 a 333.
En un marco adverso en nacional (donde Juntos por el Cambio lo derrotó por 20 puntos porcentuales en la pulseada de senadores), el peronismo terminó, al menos, cumpliendo objetivos mínimos en la elección comunal, donde conservó sus territorios y sumó algunos nuevos.
Por su parte, el Frente Progresista sufrió la pérdida de Santa Isabel, Maggiolo, Miguel Torres y Cafferata, y no pudo sumar ninguna nueva administración, aunque todavía duplica al peronismo en cantidad de localidades bajo su gobierno en el departamento más austral de la provincia.