Ante el congelamiento presupuestario
UTN venadense, en sesión permanente para sobrevivir a la crisis
Mientras inscriben para el ciclo 2024 en las carreras de Ingeniería, hay inquietud por los costos crecientes que deberán afrontar durante el año con un ingreso fijo. El decano aseguró que ya tomaron las primeras medidas de austeridad, a la vez que buscarán ampliar servicios a terceros.
Con la única certeza de un presupuesto reconducido para el ciclo lectivo 2024, en las universidades nacionales hacen cuentas para saber hasta dónde podrán llegar con sus servicios educativos superiores. Es que, con un 211% de inflación en 2023, y lo que se sumará con la disparada prevista para este primer trimestre, sería una proeza seguir adelante con cierta normalidad, además de descartar, por supuesto, nuevas inversiones.
En el caso de Venado Tuerto, el decano de la Facultad Regional de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), Ing. Jorge Rena, exhibió su preocupación por este presente incierto y, sobre todo, por lo que se avecina, pero al mismo tiempo mostró carácter y templanza para batallar en defensa de la educación pública, no sólo en el reclamo institucional ya iniciado por los canales correspondientes, sino también con líneas de acción propias, desde intensificar la generación de recursos, hasta el recorte de los gastos evitables.
Recursos en caída
Entrando en el análisis de los números gruesos, el directivo dijo que en las universidades nacionales entre el 93% y el 95% se destina a la masa salarial (docente y no docente) y el resto al mantenimiento de los edificios. Y agregó como particularidad que, en 2023, en virtud de las gestiones del Rectorado, la UTN creció en sus ingresos a nivel nacional -en moneda constante- y, desde ya, ese fenómeno benefició a Venado Tuerto que, por ejemplo, contó con recursos para iniciar el dictado de Ingeniería en Sistemas, su tercera carrera de grado.
Sin embargo, Rena aclaró que, históricamente, “en las universidades, en promedio, esas asignaciones para el mantenimiento sólo cubrieron el 50% de las necesidades, obligando a las comunidades universitarias a la generación de recursos propios para garantizar la continuidad de las prestaciones”. Es decir que las dificultades no son nuevas, ya que, a pesar de los incrementos presupuestarios citados, en 2023, a la Tecnológica del sur-sur santafesino las partidas oficiales sólo le alcanzaron para el 38% de los gastos, a causa de la inflación que se hacía sentir. “En 2024, con idéntico presupuesto que el año pasado, habrá servicios que se dispararán al doble, el triple o más aún”, advirtió.
Tras señalar que las discusiones salariales las darán los gremios docentes y no docentes a través de negociaciones paritarias, “los directivos de cada facultad tendremos que concentrarnos en ese 6% o 7% asignados a los gastos generales, porque aún con la política salarial solucionada, las universidades no funcionan si no se atienden el mantenimiento y las necesidades adicionales”.
“Nunca alcanzó el presupuesto oficial en ninguna de las 30 facultades de la UTN, pero todas nos sostuvimos y crecimos, gracias a un modelo de gestión y un fuerte compromiso con la educación pública, pero hoy es una situación límite, porque el desafío es cómo mantener los edificios durante todo un largo año", indicó.
Estado de alerta
Ante la gravedad de la situación, desde comienzos de año, el Consejo Directivo de la UTN venadense, junto con los cuatro departamentos de carreras, se declararon en sesión permanente y, en ese contexto, “ya tomamos las primeras medidas para reconvertir el presupuesto que generamos nosotros (recursos propios) a los fines de reducir el gasto en todo lo posible, cuidando de no perjudicar a las personas que dependen de un único ingreso”, justificó el ingeniero Rena.
“No vamos a desesperarnos, porque la UTN a nivel nacional tiene 75 años y en Venado ya cumplimos 50 años, y hubo procesos parecidos en otras épocas, con fuerte escasez de recursos, pero siempre nos sobrepusimos a esas adversidades, y ahora habrá que hacerlo una vez más, achicando gastos evitables, multiplicando la oferta de servicios, gestionando subsidios (por ejemplo, en la energía eléctrica) y sumando el apoyo de la comunidad, como viene ocurriendo gracias al incansable trabajo de la Asociación Cooperadora (Ateven)”, agradeció.
En esta reconfiguración de actividades, se está evaluando, después de 50 años de clases exclusivamente nocturnas, dictar las clases de los primeros años de cada carrera en horario vespertino (12.45 a 18), en una parte por racionalidad energética y en otra parte para disponer de los espacios que demandarán las actividades paralelas en la noche ante la suspensión de las ampliaciones en las sedes céntricas.
Obras suspendidas
En este marco de restricciones, la UTN venadense había planificado el año pasado una serie de obras de infraestructura en Castelli 526 -local adquirido en 2017-, adyacente al de la esquina de Alvear y Castelli, también de su propiedad, donde proyectaban dictar los cursos de oficios, entre otros propósitos. Sin embargo, la aprobación de la primera etapa de la ampliación edilicia se logró demasiado tarde, sobre el final del año, y quedó afectado por las limitaciones presupuestarias. “Nuestro proyecto era habilitar esas obras en abril próximo, pero el financiamiento se suspendió ante el nuevo contexto nacional”, resumió Rena, acotando que ahora tendrán que reformular las actividades para concentrarlas en la sede central de Laprida al 600.
Puede interesarte
Dudas con Sistemas
También reconoció el decano cierta inquietud por la situación de Ingeniería en Sistemas, que está a punto de iniciar su segundo año de actividad, pero que no se consolida como carrera hasta completar el tercer año, dado que hasta ese momento tiene la categoría de contrato-programa: “Tenemos el compromiso del Ministerio de Educación de la continuidad, pero estamos a la espera, porque recién a los tres años se convierte en una carrera estable. El mecanismo es firmar, en cada mes de enero, como lo hicimos el último martes, las designaciones docentes del año siguiente, hasta que la carrera se consolide”, explicó Rena.
Buen número de inscriptos
En la sede venadense de la Universidad Tecnológica Nacional ya están inscribiendo alumnos para iniciar en 2024 las carreras de Ingeniería Electromecánica, Civil y en Sistemas, en un número semejante a 2023, pero con fuertes expectativas de un crecimiento en la matriculación. Mientras tanto, las autoridades de la UTN ultiman detalles para el lanzamiento del curso de ingreso, el próximo 29 de enero. Y para marzo está previsto el inicio de las actividades complementarias a las carreras de grado, como licenciaturas y tecnicaturas (con aranceles aún indefinidos por la incertidumbre de la economía), y también los cursos de oficios, donde se prevé una gran demanda para el de gasista matriculado, entre otros.