Haciendo camino al andar en el arte
Viaje del venadense Matías Gallitelli a Estación Serrat, la de los mundos sutiles
El destacado coreógrafo, junto a la Laura Roatta, montaron una obra de danza contemporánea que rinde culto al notable catalán en Ciudad de Buenos Aires. Mientras Joan Manuel Serrat se aleja de los escenarios, en una Argentina que lo idolatra, surgen tributos a su arte sin igual.
El talentoso bailarín y coreógrafo venadense Matías Gallitelli volvió a las andadas, y nada menos que de la mano de la reconocida Laura Roatta, con la creación y producción de “Estación Serrat”, una obra de danza contemporánea que está en escena desde principio de agosto, todos los miércoles a las 21, en El Galpón de Guevara, en el barrio porteño de Chacarita.
Después de una intensa temporada en 2022, con “La ofrenda a tres”, junto a Sol Rourich y Teresa Marcaida, Gallitelli coincidió con uno de sus referentes en la danza -Roatta había sido su maestra- y a partir de la admiración de ambos por la obra de Joan Manuel Serrat, decidieron encarar, esta vez con mayor firmeza, el proyecto que una década atrás habían pergeñado juntos.
Cuenta Matías, en diálogo con Sur24, que su vínculo con Serrat “nace de chiquito, cuando lo escuchaba en casa, a través de mi mamá Marisa y mi tío Jota. Hay discos que heredé y es el día de hoy que los escucho, siempre sensibles, sutiles, poéticos”.
Sobre su relación con Laura Roatta, una de las coreógrafas más importantes del país, con desempeños en el Ballet Contemporáneo Nacional, Ballet Folclórico Nacional, Ballet Contemporáneo del San Martín y Ballet Moyseyev, en Rusia, señala Gallitelli que “fue mi maestra y es una persona reconocida mundialmente, nos conocemos desde hace muchos años, existe un reconocimiento mutuo y si bien ya trabajamos juntos, nunca lo habíamos hecho a la par, los dos como creadores”.
La idea de “Estación Serrat” no es reciente, sino que el acuerdo para montar una obra artística con el catalán como eje temático, viene de hace unos 10 años, “cuando estábamos coreografiando con Laura en la final de un Mundial de Tango; incluso pensamos en Julia Zenko como protagonista, y hasta se lo propusimos y quedamos en volver a charlar, pero luego no se avanzó”.
Proceso creativo
Transcurrieron largos años, hasta que “este verano estábamos con Laura en casa y empieza a sonar Serrat en una lista, nos miramos y fue como un mandato: ‘¿y si lo hacemos este año?’, y ahí comenzó un proceso creativo que fue hermoso y se desplegó con absoluta fluidez. Tanto es así que nos dividimos los cuadros que tenía ganas de hacer cada uno, y la obra parece hecha por una sola persona, es muy lindo lo que pasó. Yo me ocupé de la dramaturgia, de la historia, y Laura depositó toda su confianza en mi tarea, pese a que estoy en la mitad de la carrera y ella es una consagrada; entonces, ponerse a la par y delegar en otro, fue muy generoso de su parte”.
“Aunque parezca lo contrario, expresar en la puesta la sensibilidad de Serrat se volvió muy sencillo, porque es un artista, un juglar, un político, un poeta, cuyas creaciones siempre fueron bellas en todos los campos, y trabajar con la belleza es muy fácil cuando uno busca recrearla; quizás resultó más trabajoso cumplir el objetivo de contar la historia sin llegar a la literalidad y, en cierto modo, reinventar al protagonista y que no todo gire en torno a las canciones, porque de hecho, Serrat aparece sobre el final del espectáculo, y no como personaje corpóreo, sino a través de su voz”, puntualizó el actor y guionista.
La elección de los temas no fue ningún misterio: “Son los que nos gustaron, no pensamos en el efecto que causarían en el público, y sobre esa base coincidimos con Laura en la mayoría de las canciones”, entre las cuales se intercalan Lucía, La Saeta, Soneto a mamá, Las pequeñas cosas y Cantares.
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Hay Serrat para rato
En el análisis del venadense Gallitelli, “la obra cuenta con muchos recursos, desplegados en un espacio de ensueño donde Ivana Rossi (canta varios temas de Serrat), una primera figura de la comedia musical y del teatro, empieza a convivir con los personajes de las historias que va contando Serrat, y a la vez ella los va modificando y recreando; entonces, en este espacio onírico se pierden las proporciones y los tiempos”, devela el creador.
Después de destacar la participación del pianista Matías Chapiro, que hizo las pistas y las versiones, advierte que “a veces las canciones no están, pero aparecen escenas o elementos que remiten a ellas. Entonces, es la manera en que se contó, quizás, lo atractivo, y lo que la gente está señalando como uno de los atributos del espectáculo; la respuesta del público en este mes de estreno es óptima, todos se van muy contentos y lo divulgan, incluso algunos vuelven… está pasando algo muy lindo con Serrat”.
“Vamos a seguir adelante, la idea es arrancar el año que viene otra vez. Ahora mismo estamos evaluando algunas propuestas muy interesantes que recibimos en estos días y vamos a ver cómo sigue esto, pero sí, hay Serrat para rato”, subraya con entusiasmo.
Elenco de lujo
Además de los roles clave de Matías Gallitelli y Laura Roatta en la creación artística y producción general, el elenco está conformado por artistas de primera línea, como la cantante Ivana Rossi, y las bailarinas Sol Rourich, Natalia Royo y Sofía Sciaratta; junto con tres jóvenes del Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín, como Paula Ferraris, Damián Saba y el venadense Andrés Ortiz.
“Es un elenco fabuloso, tenemos un grupo muy creativo, no sólo en la pre-producción, sino porque en el escenario sigue creando y mostrando su sensibilidad y, además, nos prestan sus cuerpos y su tiempo, que es una de las cosas más valiosas que uno tiene, y su confianza para que, Laura y yo, como niños, indaguemos un poco más sobre el universo poético de Serrat”, expresa Gallitelli.
Teatro alternativo
Trabajar en el teatro alternativo siempre fue espinoso y bien lo sabe Matías Gallitelli, quien casi toda su vida incursionó en esos meandros. “Los tiempos van cambiando, y para peor, porque cada vez se hace más difícil”, asegura, entre risas, y suma: “esto es una producción propia que hicimos con Laura y nos dimos los gustos de hacer todo lo que queríamos; es un espectáculo que, sin escapar a los cánones del teatro alternativo, tiene todos los recursos y todos los elementos de un teatro comercial”.