A través del Decreto 133/25
Argentina volverá a exportar ganado vacuno en pie luego de 50 años
Se trata de una importante medida para el sector ganadero y una fuente de divisas nuevas para el país.
Este miércoles, a través del Decreto 133/25 que lleva la firma de Javier Milei y Luis Caputo, se eliminó la prohibición de exportar ganado en pie, luego de 50 años.
De esta forma se abre la posibilidad de generar nuevos mercados para el sector ganadero argentino. "La prohibición se impuso por un problema de abastecimiento en 1973 y, como en Argentina no hay nada más permanente que lo transitorio, quedó vigente por 50 años", señaló Federico Sturzenegger en la red social X.
El funcionario nacional destacó que la exportación de ganado en pie es un mercado activo e importante en el mundo.
Producto de alto valor
Sturzenegger sostuvo que el ganado en pie, además, es importante porque es un producto buscado por sociedades que tienen métodos particulares de faena (Turquía, por ejemplo, no faena animales castrados). "Excluirnos gratuitamente de esos mercados es un sinsentido", agregó en X.
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"En las últimas semanas se estuvo discutiendo el tema del tipo de cambio, pero pareciera omitirse del debate la extraordinaria la cantidad de restricciones que le habíamos autoimpuesto a nuestro comercio. Además de este ejemplo, en los últimos días hemos debatido los casos de cueros, carbón y chatarra, todos con prohibiciones o puntos de exportación limitados que cercenan las posibilidades de exportación. Insólito", completó el funcionario de Milei.
Por su parte, el Gobierno argumentó que garantizará la vigencia de un sistema económico basado en decisiones libres, adoptadas en un ámbito de libre concurrencia, con respeto a la propiedad privada y a los principios constitucionales de libre circulación de bienes, servicios y trabajo.
“Se dispondrá la más amplia desregulación del comercio, los servicios y la industria en todo el territorio nacional y quedarán sin efecto todas las restricciones a la oferta de bienes y servicios, así como toda exigencia normativa que distorsione los precios de mercado, impida la libre iniciativa privada o evite la interacción espontánea de la oferta y de la demanda”, detalla el decreto.