Qué puede pasar
El Senado, la Ley Bases y los seis escenarios posibles
Desde el rechazo total a la aprobación sin cambios, y las variantes del ida y vuelta en el Congreso. Qué puede hacer Diputados, entre la técnica parlamentaria y los márgenes políticos.
Mientras las comisiones del Senado avanzan con el trámite y la discusión para aprobar los dictámenes sobre la ley de Bases y el paquete fiscal que se tratarán en el recinto, la suerte parlamentaria inmediata de ambas iniciativas todavía presenta un panorama abierto, con distintos escenarios posibles. En cada caso, determinados por circunstancias estrechamente atadas a la negociación política y también con distintos efectos e implicancias.
Escenario 1: Aprobación de los textos conforme a la media sanción de Diputados. Sería la hipótesis de máxima para el gobierno nacional, pero no existe en la práctica ninguna posibilidad de que vaya a producirse. Implicaría el apoyo en general y en particular de 37 senadores, y funcionaría solo en caso de que todos ellos estuviesen dispuestos a darlo sin introducir ninguna modificación.
Escenario 2: Rechazo total. Es el plan "A" de Unión por la Patria, que cuenta a tal efecto con los 33 legisladores que componen los dos sub bloques conformados por el peronismo kirchnerista y sus aliados en la Cámara alta, y los esfuerzos por sumar los de otros cuatro. No parece la alternativa más factible, pero está dentro de las posibilidades.
Escenario 3: Aprobación en general, con cambios en el texto. Hoy por hoy es la principal apuesta y convicción del gobierno nacional, y por ello los esfuerzos están orientados a negociar modificaciones que garanticen el respaldo a ambas iniciativas. También es el plan "B" del kirchnerismo, que si no consigue el rechazo en general, sí está dispuesto a dar la batalla para lograr un texto diferente en algunas partes de los proyectos, como el capítulo del régimen de incentivos a las grandes inversiones (RIGI), las privatizaciones, la reforma previsional, la restitución de Ganancias y el blanqueo.
En este escenario, la sanción definitiva del texto de las leyes quedará librada a la continuidad del debate en la Cámara de Diputados, ya que es allí adonde deberán volver para que la Cámara baja resuelva si acepta o no las modificaciones. Lo que ya no puede hacer es rechazar los proyectos (porque ya los votó), ni tampoco introducir nuevos cambios (por la misma razón). Es decir que, con el voto aprobatorio del Senado, ambas iniciativas ya estarán convertidas en ley. Lo que restará definir es, precisamente, el texto final. Y eso habilita distintas variantes, según la normativa parlamentaria.
Escenario 4: Diputados acepta los cambios producidos en el Senado: la versión que entrará en vigencia será la resultante de la votación en la Ccámara alta.
Escenario 5: Diputados rechaza los cambios e insiste con la versión original: podrá hacerlo con mayoría simple si el Senado votó las modificaciones con ese nivel de adhesión, o necesitará los dos tercios en caso de que la Cámara alta los hubiese conseguido previamente. Como ésto es prácticamente imposible, Diputados estaría en condiciones de imponer su redacción, dejando de lado no solo lo que eventualmente la oposición pueda llegar a introducir, sino también todo lo negociado por el oficialismo con el sector dialoguista. Esta opción sería jurídicamente posible, aunque extremadamente improbable desde el punto de vista político.
Escenario 6: Diputados acepta parte de los cambios del Senado e insiste con la versión original de otros artículos. Esta amalgama podría ser resultado de una nueva negociación más fina, o de una suerte de pulseada a medias (incluyendo los artículos modificados con mayoría simple o con los dos tercios). A partir de allí, en la Comisión de Labor Parlamentaria se acordará si se abre una nueva discusión punto por punto en el recinto, o si se hace una votación "en bloque" o por títulos.
En cualquiera de los casos, el trámite se completa en este punto y quedará establecido el texto definitivo, sujeto luego a la promulgación por parte del Poder Ejecutivo.
Como este trámite difícilmente pueda completarse hasta entrado del mes de junio, los plazos estarán acordes a las expectativas reajustadas del gobierno, que ya no supedita la firma del Pacto de Mayo a la aprobación de la ley Bases, y se conforma con tener en marcha el trámite para ello, e incluso darle un impulso adicional en el simbólicamente fundacional acto cordobés.